El cambio climático es una realidad, ¿nos adaptaremos a estas temperaturas o moriremos en el intento?

Las temperaturas extremas en el mundo han aumentado cada vez más rápido en los últimos siglos, según datos de la OMM (organización meteorológica mundial) estamos cada vez entrando a un promedio de temperatura más alto en el planeta. Esto como consecuencia de las actividades antrópicas, la emisión de contaminantes, patrones de consumo y la destrucción de ecosistemas estratégicos. Temperaturas extremas que muchas veces llegan a afectar las especies de todo el planeta.

Las temperaturas continúan aumentando debido a que nuestro planeta reacciona con lentitud, las consecuencias del aumento de las emisiones de años pasados. Por ello hablamos de adaptación y mitigación. Ya conocemos las consecuencias de estar al borde de la autodestrucción, como si entráramos a las fosas profundas del no retorno de las de acciones de nuestros actos, caminando lento al infierno de Dante, con temperaturas extremas que alcanzan los 42 grados Celsius. Ello nos hace reflexionar sobre el futuro común y las consecuencias de nuestra desidia ambiental frente a un planeta que destruimos.

¿Aumento promedio de la temperatura en Colombia?

La temperatura media anual en Colombia según los informes del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) aumentó entre 0,8 y 1,5 °C entre 1951 y los 2000. Se espera un nuevo aumento de entre 1 y 2,0 °C para 2050. Es probable que el calentamiento sea alto, entre más de 2 °C en la parte sur del país. Departamentos como La Guajira han registrado temperaturas extremas este año, alcanzando los 38 y 43 grados Celsius.

Las diferencias en las temperaturas de las regionales surgen principalmente entre las zonas montañosas de la zona andina y las cordilleras. Como resultado del calentamiento, las temporadas de precipitación (lluvia) intensas provocaran inundaciones y riesgo de remoción en masa (deslizamiento). La mitigación es sinónimo de resiliencia, donde las comunidades se han salvado de las difíciles condiciones climáticas.

De 1951 a 2001, la precipitación anual aumentó en casi todas las zonas del país, con la excepción de gran parte del departamento de La Guajira. Hubo más precipitaciones en los meses donde antes eran periodos secos, mientras que los meses de lluvia se volvieron más secos. Para 2055, es probable que las precipitaciones aumenten un 3 % más, pero la destrucción de ecosistemas estratégicos y la deforestación harán todo un caos en el territorio. Cada vez nos volvemos más vulnerables a los cambios climáticos y lamentablemente no reaccionamos frente a la protección de nuestro territorio.

¿Cómo nos afecta, no solo a los seres humanos, sino a todos en general y esto qué significa?

Las temperaturas globales promedio han aumentado cada vez más rápido en los últimos siglos. Esto es nefasto para los ecosistemas y las cadenas tróficas. Por ejemplo, el aumento de temperatura hace que el fitoplancton y el zooplancton se disminuya, lo que produce a su vez que las especies también se extingan. Es cortar la alimentación de miles de especies en un corto tiempo, hace que las poblaciones animales y vegetales estén en desequilibrio y las cadenas tróficas se vean afectadas. Por tanto la adaptación climática es una prioridad que se distribuye de manera diferente entre los gobiernos, estatal y local.

Al mismo tiempo, tenemos que reconocer que el cambio climático global se ha sentido desde hace mucho tiempo. Recordemos que en nuestro país tenemos zonas excepcionalmente calurosas, la tormenta «IOTA», que dejó un rastro de devastación en los arrecifes de coral y las fuertes lluvias repentinas que provocaron remoción de masa y devastación de ciudades principales. Ante señales tan claras del cambio climático global, debemos tomar precauciones de mitigación.

Ya está claro que el cambio climático global tendrá un impacto significativo en la diversidad biológica. Se prevé que zonas de distribución de animales y vegetales endémicas de Colombia y la composición de las comunidades cambien significativamente, ya que ningún animal ni ninguna planta vive por sí solo. “La simbiosis ecológica” depende de las relaciones entre las especies. , todas las especies están integradas en ecosistemas complejos.

La extinción de ecosistemas estratégicos por el cambio climático es una realidad, especialmente en nuestro país con tasas altas de deforestación. Consecuencias de especies naturales tan fuertes que generan un impacto en toda la cadena trófica, ya vemos este efecto en la seguridad alimentaria, cada vez es más costoso producir alimentos.

Informe completo IPCC, https://www.ipcc.ch/report/sixth-assessment-report-working-group-ii/

Por:
MSc. Ramon Gabriel Aguilar Vega
Docente Tecnología en Gestión Ambiental (presencial y virtual)
Facultad de Negocios Gestión y Sostenibilidad del Politécnico Grancolombiano