Está claro para estos tiempos, que la desclasificación de los archivos son un hecho. En las páginas oficiales, lentamente pero seguro, cumplen con sus leyes de desclasificación. Y la verdad para nuestra tarea no es urgente. Ya que como lo dijo el Prelado del Vaticano Monseñor Corrado Balducci comienzos del siglo XXI, «como mentirle a la gente si los ve y los fotografía».
Les dejo con algunos datos que nos manifiesta Pedro Romaniuk, quien hasta en su dialéctica manifestó reiteradamente la urgencia del despertar. Como tantos que sumamos a nuestra referencia, no es el mensaje o el mensajero, es como nosotros nos manifestamos ante la realidad que se nos pone al frente constantemente.
Hoy los titulares de la aprobación desde las instituciones gubernamentales, potencias del mundo, no alcanzan ante una humanidad que está dormida y sujeta a la estupidez de tener el poder y la razón en cualquiera que sea la actividad rutinaria de sus vidas.
Desde nuestra tarea como difusores del tema O.V.N.I. manifestamos una denuncia constante ante la mala copia, la repetición de ideas como loros y la falta de pertenencia al propio pensar del individuo, permitiendo que otros les indique los caminos a seguir, como lo han sido los maestros espirituales y contactados. Estamos en un tiempo urgente de poner de manifiesto el daño que le ha hecho el seudo contactismo como la ciencia ortodoxa a este tratado. El respeto y los valores de un ser humano bien construido, es manifiesto suficiente, no para la salvación de la raza humana, ya que definitivamente no está perdida, más bien para mantener un equilibrio de vida en tan magnifico planeta que hoy habitamos. Y no es un mensaje extraterrestre utilizado como manifiesto para hablar de «ellos»
Acompañar la actualidad del tema OVNI hace necesario remitirnos a investigaciones de los años 70. Investigadores de la talla del Piloto de la Fuerza Aérea de Argentina, el señor Pedro Romaniuk, nos ilustra en sus interminables letras escritas por aquellos años, acerca del ocultamiento del tema OVNI.
Y he de remitirme a ellas, en algunos párrafos extraídos del libro Discos Voladores. En muchos mas textos está expuesto que el ocultamiento del tema está además sujeto a la complicidad del medio de comunicación, que no se ocupa del mismo de manera seria y objetiva, como de algunos que dicen ser investigadores de ovnis, y acentúan demasiado en el fenómeno, enajenando la datación desde los tiempos en los marcos geopolíticos y religiosos, el tema ha estado presente como modo de mantener el poder.
LUMALOES
Del libro Discos voladores, la tierra y el hombre de Pedro Romaniuk
Primera edición 1979
Ha llegado el momento de poner punto final al ocultamiento premeditado y a la negación sistemática llevada a cabo. El fracaso de la pretensión de ocultar la realidad a las grandes masas humanas es ya evidente.
Ya son muchos los gobiernos, como el de España, que han reconocido oficialmente no solo la existencia de los discos voladores, sino también su procedencia extraterrestre.
Francia, a través de su Servicio de Seguridad Nacional, ha adoptado una posición similar. Mientras tanto, muchos otros países entre los que se cuentan las grandes potencias mundiales (U.R.S.S y EE. UU.) lo hacen en forma reservada o secreta en sus centros de investigación. Existen, entre otros modernos y enormes laboratorios, como el ATIC (Air Technical Intelligence Center) , Organismo investigador oficial de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, con asiento en la Base Aérea Wright Patterson, Dayton, estado de Ohio; o su similar en la Unión Soviética. Están dotados de inmensos recursos tecnológicos, científicos, económicos y humanos de primera línea, incluyendo a los famosos hombres contacto, como se denomina a los seres humanos que se comunican mentalmente con las inteligencias superiores que tripulan los discos voladores. Seres humanos contacto son Norma Cathy, Ted Owens, Carl Andersen y otros, en los Estados Unidos; junto a una docena de científicos paranormales en la U.R.S.S. y sus países satélites, eso sin contar lo de las otras naciones. Ellos son los que han hecho conocer los acontecimientos que en un futuro ya presente nos tocará vivir a la raza humana integra.
El máximo organismo mundial, Las Naciones Unidas, se suma al consenso mundial. Durante la Asamblea General realizada en noviembre de 1977 se presentó el proyecto de establecer una comisión especial para investigar “los objetos voladores no identificados” (OVNIs) que incursionan en nuestro mundo. Fue propuesto por Erik Gairy, primer ministro de Granada, y aprobado por unanimidad en la última reunión de septiembre, siendo incluido en el respectivo orden del día.
-Seres de otros mundos pueden constituir una amenaza para la raza humana y nosotros debemos prepararnos para ello- manifestó el diputado Michael A. G: Michaud, director del Servicio de Seguridad Policial del Departamento de Estado en Washington, EE UU.
Continuó el vocero oficial: «Civilizaciones que han desarrollado tecnologías por medio de las cuales se pueden trasladar a través de las estrellas podrían destruir este mundo si así lo desean. Podrían utilizar armamentos que tornarían primitivas nuestras bombas atómicas».
El diputado Irwin Pikus, director de la Oficina de Vuelos Especiales del Departamento de Estado en Washington ha manifestado en un comunicado también oficial:
«Deberíamos estar preparados para enfrentarnos con una amenaza extraterrestre poderosa- y continuó el mismo Michaud, funcionario de 39 años y 15 de antigüedad en el Departamento de Estado:
El contacto con seres de otro mundo es algo que tendría enorme repercusión si llegara a producirse y nosotros no estuviéramos preparados. Todo este asunto debería ser analizado por un panel de expertos de todo el mundo, para determinar cuál sería la propuesta de la raza humana a un contacto con criaturas espaciales.
… Ellos dominan fuerzas y poderes tan superiores a los nuestros, que ante los mismos somos como el mosquito ante el ser humano. Así, nuestros más modernos y sofisticaos armamentos actuales – incluyendo los atómicos- se convierten en algo similar al hacha de piedra de la prehistoria frente a una ametralladora moderna. Quienes dirigen las experiencias astronáuticas de la U.R.S.S. y los Estados Unidos, conocen perfectamente bien estos detalles, ya que durante los vuelos tripulados que se dirigieron al Cosmos, tanto los satélites artificiales de uso civil y científico, como los famosos F.O.B.S. de uso militar, armados con artefactos atómicos, fueron inspeccionados, secuestrados y en algunos casos devueltos luego de meses (31 días en el caso del Sputnik 2)»
Se recomienda leer informes sobre armas pacificas extraterrestres expuestos en nuestros dos libros anteriores (Desde el Cosmos nos vigilan,1977 y Texto de Ciencia Extraterrestre 1978), donde se relata como las tripulaciones de las cápsulas de las series Apolo de EE UU y Cosmos de la U.R.S.S. experimentaron infinidad de ataques con ondas lumínicas, sónicas y paralizantes –que no matan ni destruyen- producidas por seres extraterrestres desde discos voladores.
Esos ataques efectuados con armas inofensivas (como las denominamos), ya que no causan muertes ni consecuencias dañinas posteriores a su utilización, no pudieron ser evitadas. Las ondas no solo anularon totalmente a las tripulaciones, sino también neutralizaron por completo los mecanismos de los módulos terrestres.
F.O.B.S.(sigla inglesa que significa Sistema de Bombardeo Atómico Orbital Fraccionado. Fue desarrollado ya por la Unión Soviética, Estados Unidos y China, colocando a bordo de los satélites hasta 10 y 12 artefactos atómicos o termonucleares que pueden ser arrojados individualmente en diversos países con precisión matemática desde alturas superiores a millones de metros)
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