Ingresa o regístrate acá para seguir este blog.

Tomen nota: desastrosos directorios, más pronto que tarde, se convierten en desastrosas organizaciones, que pierden irremediablemente valor o incluso desaparecen. El problema de muchos líderes y dueños de empresa es el ego, no tanto por la ambición que hay en el ego, sino por el contenido de las cosas que ambicionamos. La ambición en sí misma no es ni buena ni mala, más bien es una condición necesaria para cualquier tipo de logro importante. El reto que tenemos es ambicionar las cosas correctas.

El ego, además, nos persuade de que tenemos razón y, por lo tanto, los líderes y propietarios no alcanzan a darse cuenta a tiempo de sus errores. Si estos errores provienen del directorio, es muy difícil que la empresa no se resienta, la mayoría de las veces de manera grave. Por ejemplo, el ego se manifiesta a veces en forma de creencia poderosa: “si soy el dueño de la empresa, tengo la capacidad de manejar cualquier situación y superar los problemas, y de salir fortalecidos de ellos o de las crisis que surgen en el mercado o que internamente hemos provocado”.

Pero la realidad es implacable y contradice la anterior creencia: ser dueño del avión, no te da la capacidad de pilotarlo, y menos en condiciones climáticas excepcionales; para estos casos, necesitas de “pilotos” expertos. Y, de hecho, sin un directorio competente, es sólo cuestión de tiempo que la empresa perderá competitividad y correrá el riesgo de desaparecer. ¿O por qué creen que más del 70% de las empresas familiares no logran superar con éxito -es decir, con mayor valor que el creado por las generaciones anteriores- la tercera generación? La alta mortalidad de las empresas familiares -y no familiares- solo se explica con directorios mediocres dedicados más a impulsar caprichos o intereses particulares que a generar valor a los accionistas y a todos los grupos de interés.

¿O qué creen que le pasó, por ejemplo, a un importante banco del interior del país, una entidad que llegó a ser la tercera organización nacional en depósitos, una historia de éxito que era el orgullo de toda la región, y, concretamente, para su bella ciudad capital? ¿Por qué acabó desapareciendo y siendo comprado? Sin duda, pasaron muchas cosas, pero quiero mencionar un aspecto que a mi modo de ver jugó un papel clave en ese caso, al igual que en muchos otros que conozco: el nivel y desempeño del directorio.

Puedes ser una empresa exitosa sin un directorio, pero es muy difícil que esta situación sea sostenible en el tiempo (…) Es más común que la decadencia empresarial se dé en la continuidad de una empresa que no tiene un directorio o, si lo tiene, que éste no sea competente e idóneo.

Como consejero independiente y coach de varios directorios afirmo con total convicción: de nada sirve celebrar intensos directorios de dos días de duración todos los meses si en el directorio están sentados personas incapaces de visualizar la estrategia que necesita la empresa y, lo que es aún más importante, de ejecutarla sin excusas ni contemplaciones ni dilaciones. No por contar con más gente, o por hacer las reuniones más largas, eres más competente, ágil y exitoso.

En cambio, puedes manejar excelentemente un banco con cinco personas competentes en el directorio y hacerlo crecer más y de manera más inteligente y consistente que el resto, incluso mejor que cuando estaban sentadas en él nueve personas: otro banco muy conocido de mi país es ejemplo de ello y lo celebro porque el impacto social, de que haya buenos directores y empresarios, es demasiado grande.

Puedes ser una empresa exitosa sin un directorio, pero es muy difícil que esta situación sea sostenible en el tiempo, a no ser que sea una empresa que compite en una situación de (casi) monopolio o con mayores “facilidades” que los demás actores del mercado. Es más común que la decadencia empresarial se dé en la continuidad de una empresa que no tiene un directorio o, si lo tiene, que éste no sea competente e idóneo. Esta es mi experiencia y aquí la comparto: mejores directorios, mejores empresas. Por eso este es mi consejo final: medid y evaluad continuamente el perfil, la idoneidad y el desempeño de los miembros del directorio. Por el bien de todos.

@pabloalamocoach

+34680675893

Compartir post