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Jamiro esperando...Invitación a cronistas de Jamiroquai: Recibo artículos acerca del concierto, las infidencias, lo que se vivió adentro, lo que se vivió afuera, todo. No teman a escribir que acá no nos los vamos a comer vivos. La idea es compartir la experiencia, y no sólo se trata de música. Reseñas, a carsol@eltiempo.com.co

Evidentemente va a ser una noche funky inolvidable. Les aconsejo pedir permiso en la oficina o en la U para descansar el viernes, o sino van a llegar hechos tiritas. Pero gócencela con todo.

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Uno de los conciertos que más he gozado en la vida -no he ido a muchos, la verdad, porque soy un melómano muy casero- es el que dio Martirio junto a Chano Domínguez en el Festival de Jazz del Teatro Libre, en esta linda ciudad que nos da ese tipo de sorpresas. Ella estaba envuelta en sus mantas, con una moña en el pelo, bajo una lluvia de flores rojas que le arrojaba un público lacrimoso. Su sonrisa firme, segura, y un honesto "gracias" me dejaron hipnotizado. Su espectáculo junto al pianista fue único.

Recuerdo haber buscado una foto o alguna huella de la diva, años después, en el Café Central de Madrid, donde suele cantar para un público de 30 personas.

Martirio y Chano, con el Trío Acoplados, unen la clásica copla española con el jazz. Además, con esos ingredientes formales y gallardos que tiene la presencia de una cantaora española (hay algo en ellas tan coqueto que, en mi opinión, se ven más sexys que las famosas geishas). Cito palabras de Martirio que los organizadores del concierto se han preocupado por difundir: “la intención es hacer conciertos de sentimiento, no cantar la última canción de moda y ya está, sino hacer que el corazón, la memoria y todo se menee”.

Ahora, el asunto se puso más emocionante al involucrar el sonido del bolero cubano de Omara Portuondo. La recordamos muchísimo por Buena Vista, especialmente por aquella escena del documental de Win Wenders en que ella hace dueto con Ibrahím Ferrer en los estudio Egrem, cantando ese coro que yo sé que los que vieron la película recuerdan: "Silencio, que están durmiendo, los nardos y las azucenas". La recordamos también por ese disco hermoso que sacó con puros boleros de antaño.

Omara superó el Buena Vista. Fue excelente para ella pero ya superó esa etapa y está en la gala de las grandes.

Pues bien, ahora imagínense todos estos personajes juntos, en un mismo escenario, dándole toda esta energía al público. Este es un concierto recomendadísimo. Los rockeros talvez se sentirán frustrados: Entre los nombres que sonaron para ser el espectáculo musical de esta edición en el Festival estuvo Joaquín Sabina. Pero este es un espectáculo para ver. Creo que para verlo en esta ocasión, pues sinceramente no creo que se repita.

Les dejo una fotico de cómo fue ese encuentro en Sevilla, España. De izquierda a derecha, Omara, el grandioso Chucho Valdés y Martirio.

Cuándo: Sábado 8 de abril, 8:00 p.m., en Corferias Ciudad Teatro
Precios: Platino $120.000, VIP $ 75.000 y General $40.000

Suerte y pulso.

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