Más allá de Ciudad Perdida y el Tayrona, Santa Marta ofrece un abanico de posibilidades para los viajeros. Aquí le sugiero cuatro planes diferentes para vivir la ciudad.

 

Un retiro espiritual: Si le gustan los planes que lo confrontan en su espiritualidad, la comunidad Hare Krishna de Santa Marta ofrece retiros y voluntariados de diferentes duraciones en la ecoaldea Goloka, ubicada en la Sierra Nevada de Santa Marta.

Rituales de fuego, baños en las fuentes de agua sagradas de los mamos de la Sierra Nevada, clases de yoga y sesiones de cocina vegetariana, son algunos de los puntos de las agendas de estos retiros espirituales.


Un paseo por katamarán: Es un plan económico, no tan popular y perfecto para familias y parejas. El katamarán arranca su recorrido desde la Marina de Santa Marta y realiza un paseo de un día entero por diferentes playas paradisiacas del Caribe, en las que es posible descender para bañarse, hacer careteo, comer y tomarse unos tragos.

A bordo del katamarán también se venden bebidas alcohólicas y hay música para disfrutar del recorrido. Además, si cuenta con suerte, incluso puede sorprenderse con algún grupo de delfines en libertad nadando a su lado.

City tour histórico: La ciudad donde murió Simón Bolívar ofrece la posibilidad de visitar su quinta y conocer más sobre la historia del Libertador. Se trata de la Quinta de San Pedro Alejandrino, uno de los puntos imperdibles para visitar en Santa Marta. Sus tours son muy organizados, el lugar se encuentra muy bien conservado y llegar allí a bordo de un taxi es fácil y rápido. 


Después de visitar la quinta, es buena idea ir al Centro Histórico de la ciudad a disfrutar de la arquitectura Colonial y terminar la jornada tomándose algún trago en el romántico Parque de los Novios.

 

 

Río abajo hasta llegar al mar: Uno de los mejores planes en la sierra samaria, pero también uno de los menos populares. En Taironaka es posible descender por el río Don Diego sobre un neumático hasta llegar al mar. Es una alternativa perfecta para relajarse, conectarse con la naturaleza y finalizar la jornada en un paisaje de ensueño, en el cual una playa estrecha es lo único que divide al río del mar.

Agradecimiento especial: a la aerolínea Viva Air Colombia y al hotel Best Western Santa Marta por sus atenciones en este viaje a la ciudad.