El ciclo comienza con la que era residencia de mi familia en 1974. El barrio es Sears, sector de clase media, bautizado en tal forma como epónimo homenaje al centro comercial cercano, después desaparecido para abrir paso al atiborrado Galerías, quien también cedió su nombre al lugar. A veces la frase “eran otros tiempos cobra especial significado”.
Ahí están mi señor tío y mi señora madre con sus también señores padres. Él tendría unos 11 años, ella 21 y ellos 47 y 43, según mis cálculos y lo poco que sé de números.
Volví hace poco para calibrar el estado de aquella casa en donde viví hasta cumplir cinco años para encontrarme con una escena harto dantesca. Los jardines ahora son aparcaderos, la sala se convirtió en fritanguería, las casonas en montallantas, los árboles en rejas.
Entonces… ¿a qué panificador pudo habérsele ocurrido el vocablo Evolución para aludir a un establecimiento que no es nada distinto a la prueba física del retroceso del que la zona es víctima irreversible?