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Se cumplen tres lustros de la muerte de Humberto Monroy, uno de los genios tras bandas como Génesis y Los Speakers.

Llegó con un infarto a cuestas al Hospital San Juan de Dios en Zipaquirá. Era 24 de marzo de 1992. Se llamaba Humberto Monroy. Le decían Humo. Tenía 46 años, un talante silencioso, una sonrisa limpia y un alma capaz de escribir más de 100 canciones.

Aunque de seguro los miembros del cuerpo médico del lugar lo ignoraban, el espontáneo y agónico visitante agazapado en los pasillos del establecimiento, era uno de los responsables de la existencia de un todo indefinible llamado rock nacional.

Como muchos de los pioneros de ese que siempre ha sido un ritmo de minorías en el ámbito local, había llegado a la música, mucho más motivado por la Música Misma (escrita así, en mayúsculas iniciales) que por la reputación o el lucro que ésta pudiera traer consigo.

Nació el 14 de noviembre de 1945. Estudió en el colegio José Joaquín Casas. Creció en medio de una típica familia de extracción media en el entonces residencial sector del 7 de agosto.

Comenzó a convertirse en lo que llegaría a ser cuando en 1961, durante espontáneos encuentros de amigos empezó a ensayar con una banda de aficionados a la que se denominó Los Dinámicos, conformada por su primo Alfredo de Sosa, Fernando Latorre y él.

Aún no se sabía de Beatles ni de Stones dentro de la esfera sonora del momento. Los ídolos eran Elvis Presley, Paul Anka, Enrique Guzmán y César Costa. Y así, a la medida de las figuras conocidas a través de estaciones de radio como Nuevo Mundo de Caracol, se iba dando forma al genio de estos precursores, no del todo reconocidos.

De esas tardes de ensayos e historias nunca documentadas y de la fusión con otra banda, Los Electrónicos, nacieron Los Speakers: por decir lo menos uno de los dos conjuntos más importantes de cuantos se formaron en Colombia durante los 60.

Ahí, junto a un nada despreciable grupo de músicos innovadores entre los que se contaron su viejo compañero de aventuras Fernando Latorre, el español Rodrigo García, Oswaldo Hernández, Luis Dueñas, Óscar Lasprilla y el italiano Roberto Fiorilli, se dio vida a seis álbumes, muestras vivas de una creatividad adelantada a sus tiempos.

En 1968, tras la producción de una de las obras maestras del rock en Colombia, ‘Los Speakers en el maravilloso mundo de Ingesón’, Monroy ya se perfilaba un folclorista consumado. En 2003 Fiorilli se refirió a aquel Humberto como un "cultor del vaudeville, del country y del pop inglés".

Después de su participación en el proyecto Siglo 0, su siguiente experiencia sería el inicio de algo a lo que podría motejarse de "folk rock colombiano". Un grupo que fusionaba el sonido de los rondadores, tiples y quenas con teclados, bajos y baterías. Su nombre fue Génesis. El Grupo Génesis de Colombia. Surgió en forma casi simultánea a su homónimo inglés.

Con ellos, como con cualquier grupo de trovadores progresistas, Humberto dio inicio a la osada empresa de viajar desde Bogotá hasta Perú, con su música como único sustento, yendo en autostop y en autobuses intermunicipales, y soportando los rigores de la aventura.

De Génesis nos quedaron siete discos de larga duración, tal vez la crónica no muy sonada agrupación de rock más persistente en la historia del país y uno de los grandes seleccionados nacionales en lo que a rock concierne.

Sus mayores éxitos: una versión del ‘How can I tell you’ de Cat Stevens, en principio grabada como relleno para completar un disco y el popular ‘Don Simón’, éxito contundente después de una original campaña de expectativa a través de Radio Visión.

Algunas de las fichas clave de lo que fue Génesis se fueron demasiado rápido. Edgar Restrepo Caro aborrecía a los mariachis y al vallenato. No obstante, por esas macabras paradojas del destino murió atropellado por un vehículo de émulos de la música jalisciense, a la altura de los almacenes Cafám de La Floresta, al tiempo que la velación de su cuerpo sin vida fue perturbada por notas vallenatas de fondo, alentadas por los vecinos dolientes; Juan Fernando Echavarría, ya entrados en el siglo XXI, falleció también en misteriosas circunstancias mientras viajaba.

Prevalece un sabor agrio y dulce al pensar en la vasta producción de Monroy durante casi 30 años de carrera, y en la consecuente imposibilidad por parte del público general a la hora de obtener reediciones de dichos trabajos. Ya en los 80 y por poco tiempo, Génesis, con la vista puesta en el mercado europeo decidió ser Maíz, bajo la tutela de Armando Plata Camacho. Cuentan las historias que Maíz ostenta la marca difícil de igualar de haber completado, en un lapso de tres meses, 127 conciertos y 18 apariciones en televisión.

Uno de los más allegados amigos de Humo, Kché, también conocido como Jorge Latorre, quien ha hecho de la conservación de la memoria Génesis una de sus misiones de vida lo definió como: "Un hombre muy místico, con un gran amor a la vida. Pero sobre todo como un gran compositor".

Esa tarde de marzo, después de 24 horas de sufrimiento, y ante la imposibilidad económica de conseguir los 500.000 pesos para ser atendido en un establecimiento especializado en Bogotá, Humberto Monroy Gil dejó la tierra. Con él estaba Ángela Guerrero, su compañera de vida. Fue quizá, un mensaje explícito de la postración monetaria que suele afligir a los artistas procedentes de suelo colombiano.

Tal vez, si existe algo parecido a un paraíso mágico a donde van a parar las leyendas desaparecidas, allí hay desde ese instante un lugar para Monroy, quien de seguro estará tocando con Lennon, Hendrix, Brian Jones o Buddy Holly.

Que sea esta la oportunidad para que el mercado discográfico, aquí desde la tierra, se acuerde de él.

Desfile de figuras

Varias decenas de músicos, con diversas formaciones, estilos y procedencias formaron parte del universo Génesis en casi 20 años de trayectoria.

Alexis Restrepo, Alfonso Chacón, Arturo Astudillo, Batier, Betty Vargas, Camilo Ferrans, Charlie Cardona, Claudia Guerrero, Cosme, Fabio Gómez, Ferdie Fernández, Fernando Reyes, Guillermo Guzmán "El Marciano", Hernando Becerra, Javier Martínez Maya. José Kruger, Kché, Luis Fernando Echavarría, Luis Vicente Cyro, Mario García, Mario Rodríguez, Mario Sarasti, Mauricio Agudelo, Miguel Muñoz, Roberto Fiorilli, Ricardo Waldman, Rubén Jaramillo, Sibius, Tania Moreno,

Monroy esencial

A continuación un recuento de los aportes discográficos de Monroy, por tristeza "no del todo disponibles". Hay en manos de Kché un buen número de cintas maestras inéditas.

 

Con Los Speakers

 

The Speakers (1964)
La casa del sol naciente (1965)
Tuercas, tornillos y alicates (1966)
Los Speakers (1967)
En el maravilloso mundo de Ingesón (1968)

Con Génesis

Géne-sis-a-Dios (1972)
Génesis (1974)
Yakta Mama (1975)
Reunióm (1978)
El paso de los Andes (1980)
En un planeta lejano (1981)
Absolutamente Normal (1986)

Como solista

Sol y luna (1975)

Con Maíz

Maíz (1982)

Con Siglo 0

 

 

Latinoamérica (1970)

 

 

 

 

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