´Lo importante no es llegar sino mantenerse´, eso dice el adagio popular, y que bien que se puede aplicar a la millonaria contratación que ha hecho el Real Madrid al fichar a James Rodríguez en el equipo merengue. (80 millones de euros, unos 202 mil millones de pesos). Y si el valor de la transferencia es galáctica, el sueldo del diez cucuteño es también astronómico. El crack colombiano se ganará por temporada unos 17.689 millones de pesos.
¿Que James ha hecho méritos? Por supuesto que todos. ¿Que se lo merece? Sin duda alguna. El tema es que va a jugar con los grandes del mundo como compañeros, empezando por Cristiano Ronaldo, y eso pesa bastante. En los entrenamientos, en el camerino y por supuesto en los partidos, ya sean de Liga, de Copa del Rey o Liga de Campeones, incluso en la gira amistosa que está haciendo el Real Madrid por los Estados Unidos, como parte de su pretemporada, y a la que seguramente se unirá el astro colombiano, ¡se debe ganar un lugar!
James, como se dice en el argot taurino, ´ya ha toreado en grandes plazas´, debutó en 2006 en la primera división del fútbol colombiano, a los 14 años, con el Envigado, y en dos temporadas jugó 30 partidos y marcó 9 goles. Su primer tanto como profesional lo convirtió a los 16.
En 2008, se unió al club argentino Banfield, equipo con el cual jugó dos temporadas, con un total de 50 partidos y 7 goles anotados. Continúa siendo el extranjero más joven en anotar en el fútbol argentino, con apenas 17 años.
En 2010 el FC Porto lo contrató por 4 temporadas y se coronó campeón de Portugal tres veces, además ganó una Liga de Europa. En julio de 2013 pasó al AS Mónaco y ahora al Real Madrid.
En 2007 James fue convocado a la selección nacional de Colombia sub-17. En 2011 jugó la Copa Mundial sub-20. En septiembre de 2011 fue llamado a la selección de mayores, debutó en un partido contra Bolivia y fue nombrado jugador del partido.
Fue el goleador del mundial Brasil 2014 con seis tantos, y el gol que le anotó a Uruguay fue escogido como el mejor del certamen, con una votación contundente del 75 % entre más de cuatro millones de votos en todo el mundo.
Y como si fuera poco, James también se llevó el tercer puesto al mejor gol, tanto que le anotó a Japón.
Sin embargo, y pese a semejante palmarés, James tiene que ganarse un puesto en el equipo. Ya lo dijo en su primera rueda de prensa oficial como jugador del Real Madrid, ´´El día que tenga que entrenar quiero ganarme la titular´´, y eso es precisamente lo que debe hacer, mostrar su clase desde los entrenos, sin timidez, sin temores, ´sin demasiado respeto por sus compañeros´.
James debe mostrarle a Carlo Ancelotti, director técnico del Real Madrid, de qué está hecho y para qué. Debe convencer al estratega italiano que él, (nos referimos a James), es mejor que el croata Luka Modrić y que el alemán Toni Kroos, jugadores con quienes va a ´pelear´ directamente el puesto. En el fútbol la titularidad se gana en los entrenamientos, ahí hay que ´meterla toda´, sin ser timoratos.
Ahora bien, para James, su convivencia con las estrellas del equipo merengue debe ser de mucha armonía pero haciéndose respetar. Tiene que marcar territorio, ser amigo, pero también competencia. (sanamente obviamente).
Su humildad y sencillez deben mantenerse intactas, pero sin ser sumiso, por el contrario, tiene que llenarse de ´atrevimiento´ e irreverencia para brillar en esa constelación de estrellas.
James debe comportarse como su ídolo de la infancia, Oliver Atom, el protagonista de la serie animada Supercampeones, su espíritu guerrero y combatiente siempre debe estar presente.
De ganarse la titularidad, lo cual seguramente será más pronto que tarde, ¡debe saber ubicarse en el terreno de juego!, como dice el refrán, ´ ni tan cerca que queme al santo ni tan lejos que no lo alumbre´. No debe robarse espacios con Angelito Di María, (si el argentino continua en el equipo), y por su condición de pasador debe asistir al luso Ronaldo, al francés Benzema y al galés Bale, sin renunciar a pisar el área, rematar al arco o buscar un cabezazo en las dieciocho. En los tiros libres con perfil derecho, el balón ya tiene un dueño que es Ronaldo, pero con perfil izquierdo, que es el fuerte de James, su ´competidor´ directo es Gareth Bale. En este caso debe atreverse a coger el balón sin pensarlo dos veces.
James aprendió en el Mónaco a marcar, porque su anterior técnico, el italiano Claudio Ranieri, se lo exigía, y él, (nos referimos a James), no lo hacía, debido a eso, lo tuvo en el banco hasta que el ´crack´ entendió que en el fútbol todos deben defender. En la selección Colombia, con Pekérman, lo hace, aunque no tiene mucha responsabilidad de marca, porque eso ya es parte de su juego.
Como dice mi hijo Jr, por ser James amigo de Ronaldo, ya tiene un plus a su favor, porque para nadie es un secreto que el ego del astro portugués, (al cual admiramos montones), es tan grande como su salario y le incomoda que alguien opaque su brillo. Afortunadamente este no es el caso, el diez colombiano ha visitado varias veces la concentración del equipo blanco, ha estado en partidos claves del Real Madrid como espectador, y siempre ha demostrado su admiración por el club merengue y por Cristiano.
En cuanto a Bale y a Benzema, aunque son celosos e individualistas, y quieren ser siempre titulares, y ya han hecho un nombre en el equipo, saben que James, en lugar de ser una ´amenaza´ es más bien un socio, que los puede dejar mano a mano con los arqueros y ayudar a aumentar su récord goleador.
James ´ya pagó derecho a piso´, y lo demostró en el mundial. Juega como en ´el potrero´, con alegría y tranquilidad, y eso debe hacerlo en el Real Madrid. Como dicen los jóvenes como él, debe ´gozársela´ a punta de Ras Tas Tas, y por qué no, enseñarle a celebrar así a sus compañeros. (¿Se imaginan amigos lectores los jugadores del Real Madrid haciendo la coreografía de la Selección Colombia al anotar un gol?)
En España James siempre va a jugar de local porque en ese país hay muchos compatriotas nuestros, y en la Liga de Campeones no faltará una bandera y un hincha colombiano en los estadios cuando jueguen de visitantes.
Si alguna vez debe estar en el banco, tendrá que aceptarlo con humildad y con hidalguía. Si de pronto falla un penalti con su ´paradinha, (cuando Ronaldo no esté y no cobre), pues a pegarle al próximo cuando le toque. En pocas palabras, a brillar en esa constelación merengue pero ¡con los pies en la tierra!
¡Hala Madrid!
James, ¡Vamos por el Balón de Oro en Europa!, luego Rusia 2018 te espera, esta vez con Falcao, son cuatro años para que muestres tu talento y te lleves más colombianos para la Liga de las Estrellas. (Cuadradito, Quinterito, o tu cuñadito David, entre otros).
Curiosamente James al llegar al club merengue unió a los colombianos hinchas del Barcelona y del Real Madrid, porque ajeno al color de la camiseta que viste, es su triunfo el que todos queremos. Mi hijo Tataito, seguidor fanático de Messi y del equipo azulgrana, disfrutó y se emocionó, casi hasta llorar, con la presentación de la estrella colombiana en el mítico estadio español Santiago Bernabéu.
Como trinamos al verte poner la blanca del Real Madrid……
¡Buena James! eres el embajador del país ante el mundo. Tu sueño es Real y Merengue, pero más que una camiseta, es tu patria la que representas.
giovanniagudelomancera
periodista