Como ya comienza la campaña para la elección de alcaldes y gobernadores, hemos iniciado un ciclo, acá en La Sal en la Herida, de entrevistas a los precandidatos a este cargo de elección popular en Bogotá. Hoy tenemos al colega Hollman Morris, muy conocido por ustedes amigos lectores, y quien nos cuenta su propuesta de gobierno. Él fue exitoso gerente de Canal Capital, y hoy es precandidato del Progresismo a la alcaldía de la capital, junto con María Mercedes Maldonado, exsecretaria de Planeación y de Hábitat del alcalde Petro, y Guillermo Alfonso Jaramillo, exgobernador del Tolima, y exsecretario de Salud y de Gobierno, también de la administración actual.

Hollman Morris – foto tomada de m.jetset.com.co

LSALenLH:   Luego de posicionar a Canal Capital, visibilizarlo y sobretodo fortalecerlo, pese a la cantidad de críticas injustificadas orquestadas desde los canales privados, y de algunos periodistas al servicio de ellos, ¿por qué dejar el barco mar adentro y no llevarlo a la orilla, y preferir dar un salto a la política, riesgoso y peligroso?

H.M:   Giovanni, soy un hombre de desafíos. Mi vida ha sido eso, apostarle a las cosas en las que creo. Así, creí y creé el programa CONTRAVÍA para darle la voz a las victimas cuando cerraron filas en torno a la guerra. Le aposté a la Televisión Pública y saqué adelante a Canal Capital. Le he apostado a mantenerme con vida en medio de la más terrible persecución sin cambiar mis principios y el compromiso por los DDHH y una cultura de paz.

No abandono el barco, lo que quiero es profundizarlo. El fortalecimiento de Canal Capital es el resultado de una política que quiere recobrar el valor y la gerencia de lo público, sin embargo viví la persecución disfrazada de control político y la arremetida antidemocrática para tumbar este proyecto. Una Bogotá Humana en la que creo, la intolerancia contra ella y la persecución en mi contra me invitan a dar el paso a la política, y junto con otros liderazgos crear el gran bloque democrático para defender el proceso de paz y los cambios de fondo que necesita el país.

La política como deliberación pública debe ocupar un lugar en la vida de cada una y cada uno de los ciudadanos. Hacer política debe ser ya, sinónimo de vida, de humanidad. En un país ad portas de firmar la paz, hacer política no puede representar riesgo o peligro alguno para nadie.

LSALenLH:    El Petrismo y el Progresismo tienen en este momento otros dos precandidatos, ¿piensa que su exposición en los medios le da alguna ventaja sobre ellos?

H.M   Tengo un reconocimiento en todo el país, por el programa CONTRAVIA por la defensa de los DDHH y la paz, por los reconocimientos internacionales que he obtenido, por las causas que he defendido y recientemente por convertir a Canal Capital en un paradigma, eso sumado hace que tenga un reconocimiento público y mediático importante. Pero en esta coyuntura política quizás pese la forma como hago las cosas, en la calle, con la gente escuchando y preguntando e inmediatamente poniéndolo en redes sociales, una forma diferente de hacer la política, eso es todo.

LSALenLH:    Le escuchamos decir en la W que todos los precandidatos del Progresismo ´están cabalgando en el mismo petro´, perdón, ´en el mismo potro´, ¿es eso cierto?, ¿o cada uno, como se dice popularmente, tira para su lado?

H.M:   Cabalgamos en el mismo Petro, es decir en los postulados fundamentales de la Bogotá Humana, todos lo tenemos claro. La defensa de lo público, la lucha contra la segregación y una ciudad que se reconcilia con el agua y el medio ambiente, estamos defendiendo esos pilares y decimos que queremos profundizarlos.

LSALenLH:   ¿Cree usted que se le debe dar otra oportunidad a la izquierda en Bogotá? ¿O ya es hora que sea otro partido el que la gobierne?

H.M:   Creo que hay que darle una oportunidad al Progresismo. Esto es darles una oportunidad a las nuevas ciudadanías, animalistas, ambientalistas, LGBTI, hoppers, punkis, a un creciente grupo de ciudadanos indignados, a la izquierda, a la población en condición de discapacidad, a intelectuales, a los niños y niñas de cada rincón de la ciudad. Estamos hablando de algo que va más allá de un partido de izquierdas o de derechas, la gente en Bogotá, en Colombia y en el mundo quiere partidos que tengan en cuenta a la gente, a sus organizaciones sociales y que sobre todo no sigan alimentando la inequidad.

La Constitución del 91 fue la superación de décadas de repartición del poder por las élites bipartidistas. Desde entonces, en Bogotá se viene votando de manera inteligente, esta no será la excepción; allí está la oportunidad.

LSALenLH:   ¿Cuáles serían sus prioridades para la ciudad en caso de ser elegido alcalde de Bogotá?

H.M:   Giovanni, la movilidad y la seguridad aparecen como lo más sentido por los capitalinos, uno no puede desconocer eso, esas son las prioridades. Sin embargo, quiero ir más allá, la guerra ha sido de alguna manera la secretaria de Planeación de Bogotá, es una ciudad planeada al vaivén de la guerra. La capital es el resumen de la guerra en Colombia.

Podremos entonces las y los bogotanos convertirla en la capital de la paz. Podrá ser la paz que viene en camino la que planee la ciudad, es decir que nos convierta en ciudadanos que se reconcilian con el medio ambiente, que respetan una cebra, que construye un modelo de ciudad más amable y no manda a las víctimas y los pobres a las periferias, donde los bogotanos entienden que usar el carro para transportar a una persona es violento para la movilidad de todos. Una ciudad que hace los más fabulosos monumentos y parques a la memoria de las víctimas de todos los bandos y crea cátedras para convertir a nuestros niños en constructores de paz y valientes defensores de DDHH.

Ir más allá es asumir el reto de construir una ciudad que minuto a minuto, sea deseada, planeada, realizada por la Paz.

LSALenLH:   ¿Bogotá necesita un gerente más que un alcalde, usted ha sido un excelente periodista, pero como administrador o funcionario público, aparte de su brillante paso por Canal Capital, su experiencia no es mucha, piensa que esa puede ser una dificultad para gobernar?

H.M:   Soy un gerente y un emprendedor. Saqué adelante mi productora de TV y de esa empresa hemos vivido yo y mi familia más de la mitad de mi vida; fui gerente de Canal Capital con éxito, visión, audacia y liderazgo. Levanté un canal de TV pública en tiempo record. Tengo claro que no soy el tipo de gerente intermediario de los intereses de las minorías y mucho menos de las mafias. Soy un gerente de la gente, que escucha a la gente en la calle y se convierte en su vehículo para lograr sus sueños, un gerente humanista.

En tanto una labor solidaria, ética, de lo público y de lo común, ser Alcalde con capacidades de Gerente, debía hoy en día ser una aspiración y una posibilidad para cualquier ciudadana o ciudadano. Además, Bogotá sí necesita un Alcalde que garantice procesos democráticos de gobierno. Un Alcalde que sea capaz de asumir la Gerencia de sus empresas y entidades, pero que a la vez permita el florecimiento de una Cultura Democrática, en la cual, la política no quede reducida a transacciones entre elites; y que por el contrario garantice la consolidación de ciudadanías activas en el debate y la deliberación pública.

LSALenLH :  ¿En caso de no ser elegido precandidato, o alcalde, volvería al periodismo independiente?, ¿o a un canal público?, porque es claro que en los canales privados no podría trabajar, porque de hecho usted, para usar una frase de cajón, ´es una piedra en el zapato para ellos´.

H.M:   Siempre seré periodista, antes, ahora y después. Se confunden los que creen que el periodista deja de serlo porque no está en un gran medio. Mis hijos y mi familia son los mejores lectores de las crónicas de ciudad que elaboro después de los recorridos; siempre está presente el periodismo, en mi método de trabajo, en mi forma de investigar la ciudad y en la manera como me comunico con los bogotanos. Para mí, el periodismo es y será la mejor escuela para hacer política.

LSALenLH:   ¿Cómo está la situación actual con Uribe y el Centro Democrático, han dejado de perseguirlo, señalarlo y estigmatizarlo?

H.M:   El senador Uribe no ha descansado un minuto en perseguirme, deslegitimarme y amenazarme. Es el líder de la segunda fuerza política más importante del país. Un señalamiento de Uribe se convierte en un matoneo inmediato que a veces llega como orden hasta ciertos organismos de control que no hacen control y buscan venganza, pasarnos la cuenta de cobro por nuestras denuncias contra el paramilitarismo. Son 13 años bajo su persecución y la de su entorno.

LSALenLH:   ¿Qué piensa de la captura de María Pilar Hurtado? y ¿cómo ve el escenario nacional si ella ´prende el ventilador´?

H.M:   Pido seguridad para María del Pilar Hurtado y su familia, para ella todas las garantías. Hurtado recibía órdenes de su jefe inmediato, es decir, el expresidente Uribe, no puede entonces cargar con toda la responsabilidad, pero entonces, tiene que confesar y decirles a los colombianos la verdad.

LSALenLH:   Los periodistas somos voceros de la sociedad, aunque muchos no lo hagan y pierdan el rumbo, ¿piensa usted que la política también debe ser así, ante todo servicio a la comunidad?

H.M:   El buen periodista, como el buen político, es el que se entrega a su pueblo y tiene en cuenta sobre todo a aquellos que no tienen voz. El periodista que se entrega, al igual que el político, a servir exclusivamente a los intereses de los poderosos, olvidando a los débiles, no es un buen periodista y no será un político revolucionario.

LSALenLH:   ¿De qué forma podría el Petrismo, o el Progresismo, ayudar a la transformación del país?, ¿si no tienen cargos de elección popular, se convertirían en oposición?

H.M :  Estoy convencido que el Progresismo es el partido y el gobierno de la paz. La Bogotá Humana es un programa de gobierno para el cambio, que perfectamente le ha puesto rieles a la paz. Y es desde allí, desde el ejemplo que iniciativas como el mínimo vital de agua para los más pobres, tiene hoy impactos a nivel nacional, ayudando a la humanización y transformación del país.

LSALenLH:   ¿Qué tan cerca ve la firma del proceso de paz?, ¿y cree usted que será una paz Neoliberal?

H.M:   Giovanni, veo la paz muy cerca como nunca antes en la historia del país. Pero la firma de la paz no es la paz, es apenas el inicio de la construcción de la paz que implica en Colombia cambios de fondo, por ejemplo, un cambio que nos lleve a dejar de ser el país mas inequitativo de América Latina o por ejemplo el cambio que nos traiga una apertura democrática de los medios de comunicación. No se puede firmar la paz para que nada cambie, se firma la paz para que las cosas cambien, y eso será posible si cada colombiano y cada colombiana, se apropia de su rol. Los jóvenes serán los grandes motores de la paz.

giovanniagudelomancera

periodista

Tarjeta Profesional #8356 Expedida por el Ministerio de Educación Nacional

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