Desde el 26 de enero pasado no publicábamos nuestro blog y queriendo escribir de otra cosa nos vemos en la imperiosa necesidad de volver a tocar el tema de este desgobierno. Y es que el presidente Petro se supera cada día a sí mismo (para mal obviamente) y la apuesta en redes sociales es adivinar con qué perla va a salir el primer mandatario.
El titular de nuestra columna se lo tomamos prestado al Maestro Fernán Martínez, post que trinó en su cuenta de X y resume absolutamente todo lo que pasa en Colombia. El desgobierno es total, la oposición se la hace el mismo Petro con el fuego amigo que recibe a diario y con todas sus salidas en falso en cada tarima a la que se sube.
Caza peleas con todo el mundo, abre muchos frentes de guerra, genera polémicas y lanza globos al aire, pero todo, al mejor estilo del Chapulín Colorado, es ‘fríamente calculado’ porque la idea es distraer a la opinión pública para que no se hable de la poca ejecución del presidente, la de sus ministros y la de todos sus colaboradores, de sus promesas incumplidas, de su populismo incoherente y que toda la atención se centre en Constituyentes, improbables, nada viables y nocivas para Colombia.
Una sola mirada en X y encontramos frases célebres de los internautas refiriéndose al desastre del gobierno Petro, de su famoso ‘cambio’ y del Pacto Histórico.
Es un grito a voces que los apoyos que recibió Petro en su campaña fueron ‘non sanctos’ y que tarde o temprano salen a la luz esas alianzas de los que hoy desgobiernan con personajes y organizaciones de dudosa procedencia.
Por ejemplo, Iván Mordisco, miembro del EMC (Estado Mayor Central) confesó, palabras más, palabras menos, en esa sacada de trapitos al sol, que apoyaron al hoy presidente en campaña. El disidente explotó porque Petro lo llamó traqueto, entre otras cosas:
¨Las disidencias están matando dirigentes campesinos, asesinando al pueblo y habla de revolución. ¿Qué revolución ni que carajos? Diga la verdad, deje de usar la memoria de ‘Manuel Marulanda Vélez’ que por lo menos se atrevió a hacer una revolución de verdad”, declaró Petro, a lo que el delincuente Mordisco respondió:
“Gustavo Petro me acusa de traqueto y de usar la memoria de Manuel Marulanda. Cuando lo apoyamos en campaña no éramos traquetos. Además de traicionarnos, traicionó al pueblo que lo respaldó por su discurso progresista y de paz; hoy impulsa la guerra y el capitalismo”.
Y Petro contraatacó: «Yo quiero que cojan vivo a Iván Mordisco. No me lo maten. Porque un Twitter dijo que el Twitter dice que, y me tienen en un escándalo. Cuando yo ni de chiquito me quise meter a las Farc porque no comulgo con ese tipo de pensamientos. Entonces, no quiero que lo maten por ahí, quiero esté vivo porque va a la cárcel a hablar».
Esas rencillas suelen darse cuando se hacen pactos entre iguales, de manera soterrada, morronga, solapada y con trapisondas, a espaldas del país.
Y ahora hablemos de la famosa Constituyente que propone Petro, la cual juró sobre mármol no convocar, y que no es otra cosa que humo, y de hacerse por atajos, usando medios no constitucionales y pasándose la ley por la faja y las instituciones, cosa que Petro es capaz y ya lo ha demostrado, pues sería un disparo que el presidente se pegaría en el pie, porque en el momento que convoque a cualquier pronunciamiento del pueblo en las urnas será derrotado sin piedad.
Por lo demás, digamos que continúa dando palos de ciego con sus nombramientos, manejando el país como si fuera una finca, rodeado de los más ineptos, despilfarrando los recursos públicos, desgobernando y en campaña para el 2026, usando los medios de comunicación públicos para su propaganda política, amenazando al congreso por un lado y por el otro queriéndolo comprar con mermelada, agarrado en X hasta con el colombiano más humilde porque le confronta sus malas ideas, siempre incoherente con lo que piensa, dice y hace, generando luchas de clases, instigando a que los colombianos peleen entre sí, reivindicándose como militante de la Primera Línea, bautizando poblaciones como fortines de revolución, en fin, es un verdadera vergüenza su nula gestión para el país y ante la comunidad internacional.
Ayer hablaba Luis Carlos Vélez, director de LA FM, de los gobiernícolas, término acuñado por el multimillonario empresario mexicano Ricardo Salinas y que los usa para definir a quienes gobiernan hacia atrás, regresando a la época de las cavernas, pues ese vocablo sí que se le puede trasladar al Presidente Petro y a su Séquito, quieren regresar el país a las épocas de subdesarrollo total, solo por implantar un modelo económico caduco, donde el pueblo no tiene nada y los gobernantes lo tienen todo. También podríamos acuñar otro término, ‘Petrícula’ para quienes siguen a ciegas al ‘Mesías del Cambio’ quien en casi 2 años de desgobierno no ha hecho nada. Tantos años en campaña para ser presidente y llegar a la Casa de Nariño a hacer todo lo que criticaba y como dicen las abuelas ‘pior’.
P.D. Todos los bodegueros del gobierno Petro recibiendo puestos con salarios astronómicos, ¿y la famosa meritocracia, de la que hablaba el presidente en campaña, qué?
Periodista
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