El idioma español está conformado por 300.000 palabras, aproximadamente. No obstante, dada la enorme cantidad de sustantivos, adjetivos, pronombres, adverbios, etc., que cada una de ellas sustituye, no es exagerado afirmar que el léxico de una persona del común está conformado en esencia por cinco palabras básicas.
A continuación, cada término en múltiples contextos, y el sustento de la afirmación
Término número uno
Si un individuo considera pertinente hacerle caer en la cuenta a otro de los defectos y de las falencias que tiene como persona, no tiene que preocuparse por rebuscar entre ignominioso, abyecto, ruin, mezquino, pusilánime, oprobioso, estíptico, intransigente… y cientos más de complejos y enredados, el adjetivo que mejor lo defina, basta con que vaya y le diga que es un hijueputa. Ahora, si estima que su actitud es en extremo reprochable, le antepone el prefijo gran, doble, triple, tetra, o catre, en sustituto de cualquier adjetivo superlativo.
Cuando la observación no se hace a una persona en particular, sino a un grupo de muchas de ellas, se antepone la expresión «partida de». Sobra aclarar que en este caso específico el término se apunta en plural.
¿En qué otros casos se enuncia en plural? Respuesta: Si es interrogativa la oración que lo contiene. Ejemplo: Cuando se urge conocer la identidad de una determinada persona, ¿con quién hijueputas estaba? Indagar por un lugar específico, ¿dónde hijueputas estaba?, etc.
Otras aplicaciones:
Como parámetro de referencia: Feo, tiene plata, o bruto, como un hijueputa…
Es sustituto, y a la vez complemento de todas las expresiones de sorpresa, rabia, dolor, alivio, y asombro. Es el grito predilecto de los hinchas cuando un futbolista yerra, pero también cuando acierta y anota un gol.
Principales derivados
El Putas: Así se le denomina a un reconocido espanto, pero también al hombre eficiente y talentoso. Al muy eficiente y muy talentoso, el reputas. ¿O sea que al hombre ineficiente y lerdo, se le dice, el no putas? No. Se le dice que es una güeva. Igual sucede con el esposo sumiso, el «cornudo», o el estudiante objeto de burlas.
Y si el virtuoso es el putas, el fraternal y amigable es del putas. Del putas no es una expresión exclusiva para referirse a un ser humano de cualidades excepcionales, aplica también para definir objetos asombrosos, lugares fantásticos o situaciones memorables.
Como parámetro de referencia: Yo a esa hembra la amo, o la cabeza me duele como un putas.
Otros derivados
Puto: Enojado. II Difícil o complicado.
Putamente: Con intensidad.
La putería: Lo máximo. La panacea.
La expresión «ni puta idea» denota ignorancia absoluta en un determinado tema.
Término número dos y término número tres
Marica sustituye la mitad de todos los nombres propios, y de las expresiones para referirse a un ser humano. Guevón, la otra mitad. Eso sin tener en cuenta el enorme número de sujetos -hombres y mujeres- que se llaman de una forma y se apellidan de la otra.
Güevonada y maricada: Objeto. II Situación irrelevante.
Hacerse el güevón: Fingir inocencia.
Término número cuatro
Si ante la negativa de evadirse del trabajo e irse con ellos a beber, sus compañeros le recriminan, «como raro sumercé sacando el culo», es porque consideran un rasgo muy común en usted negarse a aceptar cualquier tipo de invitación. Y luego, a medida que toman sus pertenencias y se alejan, los escucha murmurar, «malo, malo, don cosianfirulo no va porque se quiere quedar lambiéndole el culo al jefe», lo dicen porque tal vez la actitud para con sus superiores es demasiado reverente, de igual forma el afán tan desmedido que se le ve por complacerlos. «Mejor que ni vaya, ese man me cae como una soberana patada en el culo», téngalo presente, al fulano que dijo lo anterior, usted no le agrada en lo más mínimo. Y mientras estira el pescuezo intentando escuchar si rajan más de usted, de repente llega su jefe por la espalda y le pregunta, «¿por qué no está haciendo un culo?» Lo que a él le interesa conocer es la razón por la cual usted no está ejerciendo ninguna tarea relacionada con su trabajo. «No es eso, jefe, lo que pasa es que…» «Me importan un culo sus disculpas, bien puede metérselas por donde le quepan». En primer lugar, parece que ya no le interesa escuchar de su boca ningún tipo de explicación, y en segundo, es ese asterisco, marrón y maloliente, ubicado en el centro, parte inferior de su retaguardia, el lugar que él considera propicio para guardar sus excusas, por ello esta última sí es, aunque implícita, una alusión literal a su culo. «A mí me gusta son los empleados que mueven y meten el culo». ¿Y ahora? ¿Otra alusión literal? ¿Le bailo de espaldas? Respuesta: No. Simple, para su organización él espera contar con personal calificado, muy disciplinado y activo.
Si al llegar a casa, a la pregunta, ¿amor, qué hay hoy de comer?, su esposa le responde que ni un culo, es porque su llegada la sorprendió sin nada sobre el fogón, y la alacena vacía.
Si a la pregunta, ¿mijo, cómo le fue en el examen final?, su hijo mayor le responde que como un culo, abónele la sinceridad, pero no espere buenos resultados. Y si al primer reclamo de su parte él le contesta: Ahora no va a venir a armarme la chúpame el culo. Ante todo le solicita que no lo vaya a recriminar, mucho menos que vaya a empezar a hacer alharaca. Si posteriormente pasa al cuarto de su hija y esta le dice que ni le hable porque el sábado la hizo quedar como un culo cuando la regañó delante de todas sus amigas, no lo dude, aún se encuentra muy sentida con usted debido el tamaño ridículo que la hizo pasar.
Al finalizar el día, a oscuras, sentado sobre uno de los peldaños de escalera, su hijo menor se acerca, posa la manita sobre su hombro, y le dice: «papi, deje esa cara de culo», desde su inocencia, lo que el pequeño realmente está tratando es de animarlo a que cambie de semblante, porque el que tiene refleja pena y aburrimiento. «En serio, papi, que actitud tan cula la que está usted tomando». Párese de ahí, hombre y váyase a dormir, el niño le está haciendo caer en la cuenta de que a su edad esa actitud de mocoso regañado no le queda nada bien.
Término número cinco
Quizás el más usado. Si prohibieran su uso, quedaríamos incomunicados.
Si alguien pregunta, ¿dónde será que queda esa mierda?, se refiere a un lugar.
Si alguien dice que alguna mierda lo tiene preocupado, esa mierda puede ser desde un pequeño disgusto entre amigos hasta un desengaño amoroso, problemas en los negocios o un grave percance familiar. Incluso, una delicada enfermedad.
Si un sujeto olvida el nombre de algún objeto, lo único que debe hacer es apuntarle con el dedo índice, o con la boca, y decirle a quienquiera que este cerca; pis, oiga, alcánceme esa mierda. Es la expresión con más vigencia y proyección a futuro, no importa lo sofisticado del avance tecnológico que esté por arribar a este país, mierda aguarda por él para definirlo.
En su esencia, o estado más puro, significa engaño, mentira, o demagogia. La expresión, ¡que va, pura mierda!, connota, de parte de quien la pronuncia, un alto grado de incredulidad.
En un contexto culinario, como medida de dolor. El ingerirla, se refiere al sufrimiento que, de diversa índole, todo ser humano puede llegar a padecer. La cantidad a consumir es directamente proporcional al grado de sufrimiento. Por consiguiente, una cosa es convidar un prójimo, a la mesa, a una pequeña degustación, un bocadito, y otra bien seria, es mandarlo a comerse, entera, una de sus tres prácticas presentaciones: personal, cerro, y bulto. Idéntico significado adquiere cuando a ese mismo prójimo se le sugiere, no como una masa apta para el consumo, sino como «lugar» de destino.
¿En que otro contexto denota dolor? Respuesta: Cuando se habla de un humano que «mutó» a esta sustancia. «Ese man se volvió mierda», o sea que, producto de un infortunado suceso, ese sujeto está muy deprimido o su estado emocional es crítico. La expresión, ¡esa mierda! denota consentimiento y aprobación.
Ese man se portó como una mierda el sábado: El sujeto al que se hace referencia tuvo una actitud displicente y muy reprochable el día sábado.
Aplicaciones en el campo de la física y la matemática
Como unidad de medida de longitud. El sistema coprológico de longitud se ocupa de grandes distancias y sus tres unidades básicas a saber son: La mierda, la puta mierda y la gran puta mierda.
Como lo estudiamos anteriormente, una de sus principales funciones radica en designar cualquier tipo de objeto, su ausencia, por lo tanto, dice la regla, connota vacío. ¡Ni mierda! Expresa ausencia de elementos en un conjunto.
¡La misma mierda!: Dícese de dos o más cosas que en apariencia son disímiles, pero que en esencia son lo mismo.
¡A toda mierda! Describe la trayectoria de una partícula, de un punto a otro, a una gran velocidad.
Y, por último, la medida para expresar la deformación absoluta de la materia. Si un objeto es golpeado y sus propiedades físicas en cierta medida se vieron alteradas, este objeto se averió, ahora, si el golpe fue un poco más severo y no solo sus propiedades físicas sino también su funcionalidad se vio seriamente comprometida, este objeto se dañó. Pero si como consecuencia de un terrible golpe el objeto pierde cualquier funcionalidad y sus propiedades físicas se deterioran a tal punto que el objeto queda irreconocible, nada que hacer, esa maricada lo que se volvió fue mierda y quedo sirviendo pa un culo.
¿Entienden ahora el porqué es que un joven estudiante tartamudea en las exposiciones orales y poco habla en las fiestas familiares? En estos contextos le está prohibido el uso de las 5 palabras mediante las cuales se comunica, o, lo que es lo mismo, está castrado gramaticalmente hablando. Pero que retórica cuando está con su grupo de amigos y puede madrear a sus anchas.
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