Por PanzaVidela
Todos aquellos que han estado alguna vez en México o han tenido algún tipo de acercamiento con la cultura mexicana, podrán constatar que se trata de uno de los pueblos más solidarios, orgullosos de sí mismos y, por encima de todo, amables.
Por supuesto que en su extenso territorio hay criminales, gente mala. Como en todas partes. Y justamente uno de estos desafortunados seres humanos fue el que cometió el terrible acto de dispararle en la cabeza al futbolista Salvador Cabañas.
Cabañas es, hoy por hoy, uno de los más importantes goleadores suramericanos, tal vez el mejor. Ídolo multitudinario de uno de los equipos más poderosos del continente latinoamericano como lo es el América de México, ícono de la selección paraguaya, bastión de ambas escuadras en sus numerosos logros, entre los que están la clasificación al Mundial de Fútbol en Suráfrica.
Cabañas es paraguayo y juega en México. Pero frente a la muerte el ser humano se despoja de las barreras que la mente crea para separarnos y entonces cada ser humano ve a sus similares como lo que son: hermanos de la misma familia. Así, he visto manifestaciones de solidaridad en diversos países, desde México hasta Argentina, pasando por nuestro país, donde he leído varios homenajes y palabras de solidaridad y apoyo a Salvador.
La solidaridad no sólo se expresa enviando unos cuantos dólares a los damnificados de una catástrofe, también se es solidario en la oración y en el pensamiento. Fue emocionante ver por televisión una congregación de miles de aficionados en un estadio mexicano, con oraciones y cánticos, en el país de la Virgen de Guadalupe, pidiendo con devoción por la recuperación de Salvador.
Estos gestos son los que dignifican y magnifican la condición del ser humano, los que dan sentido a nuestra experiencia en estas sociedades cada vez más violentas y mentalizadas. El pretexto, una vez más, fue el fútbol. Para demostrar que este deporte no es una congregación de bárbaros, como lo piensan algunos, sino al contrario, una de las manifestaciones colectivas más maravillosas e importantes de nuestras sociedades.
Desde esta tribuna de opinión, no perdemos la oportunidad para enviarle nuestros pensamientos y palabras de apoyo y solidaridad a Salvador. No al goleador e ídolo de multitudes, que tantas alegrías nos ha regalado con su fútbol, sino al ser humano común y corriente. Al que tendrá que levantarse y construir una nueva vida, ya no en el césped de los estadios. Ojalá se recupere y tenga esa oportunidad.
//Nota: mañana se inicia el torneo con el clásico Millonarios vs Nacional. Ya hemos hablado bastante respecto a la expectativa que este juego genera. Sobre la nómina inicialista podemos decir que la más probable alineación sea con: Obelar; Perlaza, Mera, Henríquez, Casierra, Robayo, Ramírez, Vásquez y Omar Rodríguez; Arrechea (o Erwin) y Boyero. ¡Suerte al equipo mañana, ojalá comencemos con victoria!
¡Saludo Albiazul!