Por PanzaVidela
Terminó anoche
una semana que comenzó con asomo de crisis en Millonarios, donde la continuidad
de Ríchard Páez fue puesta bajo la lupa. Con las victorias frente a Santa Fe -el
miércoles- y frente a Tolima -anoche- los dirigidos por Páez sumaron 6 puntos
vitales en la carrera por la clasificación, que ubican al equipo en la sexta casilla y dan estabilidad al trabajo del técnico y jugadores.
Un tiempo le bastó
a Millonarios para definir el partido a su favor. En los primeros 45 minutos el
equipo albiazul fue rápido, contundente y tuvo en Mayer Candelo -¡otra vez!- el
eje de su funcionamiento y pieza fundamental de su ataque. Muy temprano -al minuto
7- Lewis Ochoa se proyectó con velocidad al ataque y metió un centro rastrero
para la definición certera de Luis Mosquera y la celebración tempranera en el
Nemesio Camacho. Millonarios siguió con el mismo ímpetu, la misma velocidad y
contundencia en el ataque y al minuto 36 concretó el segundo, en jugada de tiro
de esquina que cabeceó dos veces Pedro Franco para el 2-0. Antes de terminar el
primer tiempo el Tolima descontó con un señor golazo de tiro libre de Rafa
Castillo (ex-Millos), imposible de tapar para Ramos.
El primer tiempo
fue importante y le devuelve al hincha la ilusión, pues después de los 2
partidos perdidos en la gira de la semana pasada y los consecuentes vientos de
crisis que esto trajo, el de anoche -en el primer tiempo- volvió a ser el
equipo que la hinchada quiere ver -el mismo que derrotó al Cali 3-1- explotando
la velocidad por las puntas y siendo contundentes en el ataque. Anoche fue
importante el haber contado con otros argumentos ofensivos como lo fue el
aporte de Luis Mosquera (¡se le ve mucho más cómodo de volante y le aporta más
al equipo!) y el aporte de Pedro Franco, como lo hizo en la jugada del gol.
Porque anoche nuestro goleador Toloza no fue contundente y también es válido y
necesario tener en el equipo otros argumentos distintos para llegar al gol.
En el segundo
tiempo Millonarios fue más cauto, bajó el ritmo de la primera etapa y se dedicó
a fortalecerse en defensa, intentando dar trámite al balón, sin dar ventajas en
el fondo. Los
dirigidos por Páez mostraron seguridad para manejar un marcador favorable e
inteligencia para dar prioridad al orden defensivo y no poner en riesgo los 3
puntos. Vale el reconocimiento a Ríchard Páez, pues esta vez supo transmitir el
mensaje a sus jugadores, los cambios también fueron acertados y en general su
equipo dejó una imagen positiva.
Con estos 6
puntos Millonarios se mete de nuevo en la pelea. Esperemos que de aquí en
adelante la producción del equipo siga en «crescendo», que la pareja de
centrales «Franco-Córdoba» siga afianzándose, que nuestro juvenil Luis Mosquera también aproveche al máximo su
titularidad, ojalá en el medio campo, donde definitivamente se le ve más cómodo
y más útil para el equipo. Y que Mayer Candelo también siga en la regularidad
de los últimos partidos, pues el equipo sube mucho su rendimiento y la producción
ofensiva se ve directamente influenciada por su desempeño.
El próximo partido
de Millonarios será en Armenia frente a un difícil Deportes Quindío. Los
dirigidos por Ríchard Páez llegan con la tranquilidad de venir en alza, de
haber alejado los vientos de crisis y con la esperanza de ratificar en condición
de visitantes las mejoras tanto a nivel individual como colectivo.
¡Saludo Albiazul!
// La invitación
para todos a unirse a la cuenta de Twitter y compartir novedades y percepciones
sobre el azul embajador: @PanzaVidela