Por PanzaVidela

Imposible evitar la tentación de escribir algo con este titular. Así pues, entrando en el contexto nacional de estos días, la pregunta para Ricardo Lunari y los directivos azules: ¿Ud no sabe quién soy yo?

Por supuesto la respuesta poco importa. Porque soy solo un hincha más, uno más de los millones de hinchas que tiene Millonarios a nivel nacional e internacional.

Como hincha azul, hincha del embajador, me permito escribirle a Ricardo Lunari y directivos azules con bastante preocupación. El domingo pasado Millonarios cayó humillado 5-1 frente al Deportivo Cali. Como triste dato anecdótico de aquel juego podemos decir que nuestro arquero Nicolás Vikonis nos salvó de recibir otros tantos más.

Terminado el semestre pasado escuchábamos a nuestro poco experimentado DT Ricardo Lunari decir que aquel equipo había recibido muchas goleadas porque no era un equipo armado por él. Decía Lunari, «debíamos tenerlo en consideración y esperar a ver un equipo muy diferente este semestre».

Para los que llevamos años viendo fútbol y sin necesidad de ser unos gurús del balompié, estaba claro que las goleadas que recibió el equipo de Lunari el semestre pasado no eran fruto de viejos rezagos de otro entrenador (aunque algo de eso sí había), sino que pertenecían de plano y de lleno al nuevo estratega. En los 10 partidos que dirigió Lunari el semestre pasado dejó clara su impronta. Un Dt de los «ofensivos», de aquellos que dejan atrás la táctica defensiva y apuestan el todo a un fútbol poco equilibrado. Sus equipos suelen ser montañas rusas, un día golean a un chiquitín que ofrezca poca oposición y al otro son goleados por los duros del torneo, aquellos que tienen la maquinaria bien aceitada. Así lo escribí en el post de inicio del torneo, explicando un poco lo que nos traería este semestre.

Comenzamos con 3 triunfos en casa ante equipos débiles y continuamos con dos derrotas de visitante ante equipos más fuertes. Cinco partidos que resumen perfectamente la montaña rusa que esperábamos este semestre. Y continuará así. El Millos de Ricardo Lunari es un equipo descompensado, desequilibrado. Vendrán más goleadas a favor frente a defensas y equipos inferiores, así como goleadas en contra frente a equipos mejor preparados y delanteras fuertes que no tendrán mayor dificultad en vulnerar una defensa con poco trabajo y por lo tanto bastante descoordinada.

Como hinchas azules nos duele ver un equipo tan débil en defensa, porque sabemos que en el torneo hay al menos 4 o 5 equipos que tienen el poderío ofensivo (tal como lo hicieron el semestre pasado) de darnos «sopa y seco», como ya lo hizo el Cali el domingo pasado. Humillación para un equipo grande como es Millonarios.

Mis últimas palabras de este post van dirigidas a los directivos azules, quienes -una vez más- están viendo los resultados de malas decisiones. Mala decisión fue entregarle la dirección técnica del equipo a un entrenador que no tiene la experiencia ni los conocimientos tácticos para darle a un club como Millonarios la fortaleza y seriedad que necesita. Jugadores hay, no me cabe duda, pero trabajo defensivo no. Eso se ve en la cancha. Y se verá aún durante muchos partidos que vienen.

Saludo embajador!