Por PanzaVidela
De la derrota de Millos ayer en el horno de Barrancabermeja quedan los siguientes comentarios.
1. Mejora táctica.
Para mí fue un gran placer ver en el primer tiempo un Millos muy bien planteado desde lo táctico, con un esquema de 5 volantes y un solo delantero. Israel planificó muy bien el partido y su equipo se vio sólido, compacto entre líneas, ordenado sin balón. Cuando Millos no tenía el balón hacía doble línea de 4 atrás, dejando muy poco espacio entre defensa y medio campo. Se apoderó del balón y se hizo dueño del espacio y de las acciones haciendo ver débil al Alianza Petrolera en su propio estadio. Con el balón Millos tuvo la intención clara de desequilibrar por las bandas -sobre todo por la izquierda con la dupla Silva-Machado- y de llegar con sorpresa con volantes como Robayo o Silva. En mi opinión la estrategia y planificación fue perfecta. En la ejecución del plan Millos no tuvo poder de definición, siendo el ejemplo más claro una jugada brillante de Silva que erró en forma increíble y desafortunada el «tiburón» Romero. Ayer en «el horno» Romero tuvo un flojísimo partido dejando muy en claro algo que dijimos a comienzos de torneo: Millos no reemplazó a Uribe y a lo largo del torneo -con lesiones y suspensiones- se hará evidente. Ayer -una vez más- fue el caso.
En la segunda etapa Israel hizo cambios con la intención de refrescar el equipo y buscar -al menos- el empate. Pero no logró su objetivo. En la retina del espectador -así como en las estadísticas- quedó la impresión de un juego parejo. Los nuestros perdieron 3 puntos valiosos por no tener poder en la definición y porque Alianza aprovechó muy bien una de las pocas llegadas a gol.
2. ¿Semestre de transición?
Una vez terminó el partido empezaron a circular por redes sociales versiones según las cuales la hinchada azul debía comprender que éste era un semestre de transición y que para el próximo semestre habría al menos 10 jugadores nuevos, pedidos por Israel y Peluffo.
Se armó el debate y aquí va mi posición al respecto. No comparto y encuentro inadmisible que este torneo se de por perdido y ya se hable de un semestre de transición. Recuerdo cuando Juan Carlos Osorio llegó a Millonarios -prácticamente eliminado- y ganó sus primeros 5 partidos al frente del equipo, clasificándolo a los ocho. Innumerables son los casos de técnicos que asumieron a mitad de torneo y enderezaron el rumbo de sus equipos. Entre otras -y por si acaso- ¿para eso se les trajo no?
La nómina de Millonarios es de las más costosas del FPC y resulta incomprensible ver en la cancha un equipo inferior futbolísticamente frente a otros con mucho menos presupuesto y nóminas con tantas limitaciones. Israel es un técnico capaz y muy experimentado. Y la nómina de jugadores es extremadamente costosa, con algunos jugadores de grandes condiciones. Si bien la nómina tiene las falencias conocidas por todos, en comparación con los rivales, este equipo tiene con qué y debe como mínimo clasificarse dentro de los ocho. Lo contrario sería gran fracaso deportivo y administrativo. Ninguna presentación tendría para el actual presidente y junta directiva decir que este semestre era de transición y que las expectativas deben estar puestas en el siguiente.
Al contrario, vienen 3 partidos en casa para Millos. Tolima, Jaguares y Envigado. Nueve puntos para meterse en la pelea. Antes de jugar los últimos 9 puntos decisivos frente a Nacional, Medellín y Santa Fe. Esto es competencia y si bien es cierto ya estamos con calculadora en mano, hay que planificar estos partidos para ganarlos y jugarlos como finales.
Preguntas para los foristas:
- ¿Qué opinión les merece la derrota de ayer en «el horno»?
- ¿Están de acuerdo con aquello del «semestre de transición»?
- Viendo los 6 partidos que faltan, ¿creen que aún hay posibilidades de clasificar?
- Y sobre Serpa, ¿bien, gracias?
Agradezco sus comentarios en este espacio así como en @PanzaVidela