Por PanzaVidela

Qué triste que en nuestro país existan personajes con micrófono cuyo máximo deseo pareciera fuera ese. Que Colombia pierda y saquen a Don José, como lo llaman. Cuando no se refieren a él peyorativamente como «el patriarca» o aún «el abuelo». Parece que estuvieran esperando una derrota de Colombia para decir: «srs, yo lo dije».

Me sigue resultando indignante que el señor Carlos Antonio Vélez sume meses y meses haciéndole campaña negativa a José Pékerman. Al técnico que por primera vez en la historia del mediocre fútbol colombiano lo llevó a cuartos de final de una Copa del Mundo.

Antes del Mundial el señor Vélez duró meses haciendo campaña negativa argumentando que sin Falcao Colombia difícilmente podría hacer una buena labor en el Mundial. Que el DT tenía la obligación de encontrar una solución a la «Falcao-dependencia» de las eliminatorias. Vélez repetía mañana tras mañana -en sus diferentes espacios mediáticos- que sin Falcao Colombia no sería capaz de hacer una buena Copa del Mundo, debido -por supuesto- a la incapacidad del técnico argentino de encontrar una solución.

Llegó la Copa del Mundo y la Colombia de Pékerman sorprendió al mundo justamente por una variante técnico-táctica. Ubicó a James Rodríguez como «falso nueve» y como se dice en el mundo del fútbol «la rompió», la «sacó del estadio». Japoneses, griegos y los temibles africanos de Costa de Marfil, sin hablar de los uruguayos, no pudieron contrarrestar esa propuesta. No solo Colombia fue sensación en el Mundial, James valorizó su pase en proporciones inimaginables. Y junto a James, Cuadrado, Armero, Zapata, etc subieron sus cotizaciones. Sin Falcao Colombia logró la mejor posición histórica en una Copa del Mundo. Seamos realistas, pasarán decenios y decenios para que Colombia supere esa hazaña. Vélez tuvo que callar. Su andamiaje de críticas cayó como un castillo de cartas.

Llegó la Copa América y la presentación de los nuestros estuvo lejos de las expectativas. Sin embargo -y apesar de las ya nombradas limitaciones en ataque- quedó una alegría inmnesa y esperanzadora. La «aparición» de Murillo. Una vez más las críticas se habían centrado -antes de la Copa- en encontrar el reemplazo del «mariscal» Yepes. «Si Colombia hizo un gran Mundial -decía Vélez- fue gracias a las individualidades, entre ellas Yepes». Tenía razón. Sin embargo Yepes se fue y «don José» trajo a un «desconocido» para el medio local. Un tipo que se formó en España. Murillo fue la gran revelación y sorpresa de la Copa América. Y todos coincidieron en algo: Murillo es el reemplazo de Yepes. ¿Quién lo «encontró» y quién lo trajo a la Selección? Silencio.

Tras la decepcionante Copa América Carlos Antonio Vélez tuvo todo el tiempo y la constancia del mundo para recoger -una a una- su avalancha de críticas. Está en todo su derecho. No faltaba más. Pero resulta triste -por un lado- y curioso -por el otro- como algunos argumentos se contradicen. Veamos, en resumidas cuentas es algo así: «Si Colombia gana es gracias a las individualidades y si Colombia pierde es por culpa de Pékerman». Es decir, con cara gano yo, con sello pierde usted. ¿En serio? No lo puedo creer.

Mi sentido común me diría que si hay individualidades que se destacan es por 2 razones. Una, porque el técnico los escogió, los llamó, los orientó, los ubicó y les dio indicaciones precisas de qué hacer. Dos, por supuesto la obvia, por mérito y talento propio. Mi sentido común -ojo que no soy un experto en tácticas como para sentarme a criticar olímpicamente a un señor 3 veces campeón del Mundo- me dice que si un equipo gana o pierde, se debe a 2 factores principalmente. La responsabilidad del técnico, por supuesto, y la de los jugadores. Planificación, escogencia, seguimiento, rendimientos individuales y colectivos, y otros factores «externos» como los medios, los hinchas, los directivos. Todo eso tiene que ver.

Mi escrito de hoy -antes de iniciar el primer juego clasificatorio a Rusia 2018- tenía como objetivo criticar -de manera sensata y respetuosa- al criticador. Al señor periodista Carlos Antonio Vélez, quien también en su derecho, no ha hecho sino demeritar y criticar absolutamente todo lo que tiene que ver con José Pékerman. Qué triste -de verdad- resultan este tipo de «dardos envenenados» y continuos al único señor que logró la hazaña de llevarnos a cuartos de final de una Copa del Mundo. Ese logro histórico que además valorizó a toda una camada de grandes jugadores que seguirán abriendo puertas -por primera vez en los equipos élite del planeta- a los que vienen atrás. Un señor que además le impregnó al puesto de seleccionador nacional un estilo respetuoso, callado, sereno, culto, inteligente. Ah, y !trabajador!

En este último párrafo solo quiero decir lo siguiente. El señor Vélez está en todo su derecho de criticar y seguir haciéndolo. Pero también quiero dejar esta voz de protesta. Un clamado al pueblo colombiano para apoyar como debe apoyar un país a su selección. Comienza una de las competencias más difíciles del mundo futbolero. Todos los rivales son fuertes y están bien preparados. Habrá victorias y derrotas. Si la selección gana será resultado de un trabajo en equipo, igualmente en la derrota serán compartidas las responsabilidades. Atrás esos preceptos «envenenados» que dan la responsabilidad de la victoria a los jugadores y la de la derrota al técnico. Si se gana, ganan todos, si se pierde pierden todos. Y respecto a nuestra selección todos sabemos que si ganamos, ganamos todos. Bueno, casi todos. Parece.

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Bonus track.

Felicitaciones a Juan Carlos Osorio por su próximo nombramiento como Dt de México. Allá podrá cumplir su sueño de dirigir en una Copa del Mundo. Justo y merecido. En Colombia -casualmente- el periodista Vélez lo recibió con su característico sello peyorativo cuando vino a Millonarios. No me cabe duda que en Rusia 2018 estará en el banco cumpliendo un sueño por el que ha luchado y vencido adversidades. Su alegría también es la mía.

Preguntas para los foristas:

1. ¿Cómo ven este partido contra Perú?

2. ¿Creen que un mal comienzo en estos 2 juegos de eliminatoria pondría en riesgo la continuidad de Pékerman?

3. ¿Creen que hay personas interesadas -en Colombia- en que nuestra selección pierda?

Agradezco sus comentarios de manera respetuosa en este espacio así como en @PanzaVidela