Por: Diego Rodríguez Saza / Eskarlata
“Las malas personas no pueden ser periodistas”
Ryszard Kapuscinski
Este oficio y gran profesión del periodismo, la ejerzo con total independencia, característica que me permite tener una visión menos acalorada frente a la que pueden tener los colegas que deben seguir las normativas y lineamientos editoriales de un medio.
Después de los últimos acontecimientos relevantes para Colombia, entre elecciones parlamentarias y presidenciales, mundial de fútbol Rusia 2018, llamado a indagatoria al senador Álvaro Uribe Vélez y cubrimiento de la posesión presidencial; es valioso replantear la forma y el entramado que se maneja por diversos medios para cubrir cada suceso.
Me permito poner sobre estás líneas, todo el respeto y admiración profesional a los que en verdad han sido maestros del periodismo en los últimos tiempos, periodistas que he disfrutado leer, escuchar y ver en sus columnas y programas; y por los que me siento orgulloso de haber elegido mi carrera como comunicador social y periodista.
La radio en Colombia ya tiene un antes y un después; y es uno de los nombres más respetados en el medio, Hernán Peláez, una puesta en escena radial que permitió que el humor, las tertulias y las noticias fueran de la mano sin rivalizar, a parte de darle un sentido estructurado al periodismo deportivo. La Luciérnaga con el Dr. Peláez era la radio ideal, antes de la llegada de Gustavo Gómez.
Daniel Coronel, en mi concepto, el mejor periodista de denuncia que ha tenido el país, sus columnas en la Revista Semana han sido referente en los medios y sus investigaciones rigurosas muestran el matiz con el que forja su opinión crítica. Juan Gossaín, el periodista que hizo durante mucho años el editorial matutino de RCN radio, en donde se desglosaba una reflexión amplia sobre el acontecer nacional. Holman Morris, como director del programa Contravía, realizó un periodismo investigativo a profundidad, reportería en lugares en donde se forjaba la argumentación con testimonios e imágenes que hablaban por sí solas. Punto negativo para Morris en el periodismo, se adhirió a la política con la Colombia Humana. Punto positivo para la sociedad capitalina con Morris, ver nacer un nuevo político con fuertes argumentos ante las denuncias.
Y no podría dejar atrás a Julio César González “Matador”, quien con el don del trazo agudo y humorístico, cuenta un instante incomodo para el pueblo colombiano y aún más incomodo para los políticos de turno, aunque ha carecido un poco de equilibrio en el momento de realizar sus juicios.
Aquella crítica punzante, la forma en abordar las temáticas y su rigor periodístico, me permiten nombrarlos como cuatro periodistas referentes ante la ola bastarda, sínica y vacía que trae el oficio informativo con añejos y nuevos personajes que nos advierten que el periodismo está en decadencia. Lo ideal seria nombrar a muchos más profesionales del periodismo, pero por el momento hago énfasis en los anteriores.
Observemos casos puntuales en los que periodistas como Luis Carlos Vélez, Néstor Morales y Dario Arismendi, entre otros; entrevistan a dos candidatos presidenciales, y en donde dejan de lado absolutamente y descaradamente cualquier intento de objetividad.
No necesitamos siquiera ser estudiosos o grandes analistas de medios para darnos cuenta del candidato que les simpatiza de alta manera, y del candidato o personaje que no es afín a sus intereses personales.
Puede observar los videos aquí:
La “objetividad” de Luis Carlos Vélez:
https://www.youtube.com/watch?v=ajgic1X-v7k
La “justificación” de Nestor Morales ante la vulgaridad del senador Alfredo Ramos frente a Claudia López:
https://www.youtube.com/watch?v=7zu6Vy93CvE
La “parcialidad” de Dario Arismendi
https://www.youtube.com/watch?v=2BVIlcGaKDE
El “veneno” de Carlos Antonio Vélez frente a Pekerman:
https://www.youtube.com/watch?v=JBBhLaIfuCo
El “exjugador de fútbol” según Iván Mejía:
Asumamos el papel de ser exigentes con el periodismo, no consumamos basura informativa, los periodistas independientes también poseen la capacidad de forjar o proponer una idea más cercana a la realidad, así que confrontemos lo que nos muestran a diario los medios masivos.
No permitamos que entre Telesur y NTN24 nos sigan mostrando sus realidades sesgadas y convenientes ante el extremismo de izquierda y derecha. Al igual que WIN Sport siga exponiendo las ideas retrogradas y radicales de un Carlos Antonio Vélez, un Iván Mejía y toda su escuela de periodismo deportivo arrogante, pantallero y nefasto que mucho daño le ha hecho al deporte colombiano. Porque si se trata de insultarnos, creer que tenemos la verdad absoluta, despotricar y casi aniquilar la carrera de profesionales del deporte, jugadores de fútbol y deportistas; eso lo podemos hacer en la tienda de barrio junto al clásico “petaco” de cerveza.
Existen medios independientes (en una segunda entrega trataré más detenidamente), que hasta la fecha poseen mayor seriedad frente a medios convencionales, por lo menos en sus entrevistas a candidatos presidenciales no encarnan al DJ y animador con el jueguito de “caiga en la nota”.