Por: Carlos Ossa

Laura Beltrán, mejor conocida en el mundo de las redes sociales como ‘Lalis’ fue protagonista la semana pasada por ser tendencia en la red social Twitter, ¿la razón? A la conocida video bloguera le tomaron una foto de cuerpo completo, en dicha foto se podía visualizar que tenia varios kilos de más, y como ella toma sus videos única y exclusivamente del pecho para arriba y tiene un rostro de buen ver, causó sorpresa en la comunidad virtual.

Las críticas fueron tanto incisivas como destructivas por su aspecto físico. Las defensoras de Lalis argumentaban que atacar a una mujer por su aspecto era violencia de genero “pura y dura”, y la youtuber afirmaba que jamás ha engañado a nadie ya que es bloguera y no modelo, y por lo tanto nunca ha tenido que mostrarse de cuerpo completo. Además, dijo que si utiliza filtros es porque lo desea.

Aunque el tema debió zanjarse ahí, empezó a crecer como bola de nieve. Si bien toda la comunidad en Twitter estaba de acuerdo en que no es correcto atacar a alguien por su físico, le mostraron varios trinos a la señorita en los cuales ella llama “porky” al Presidente de la República, “enano culi bajito” al expresidente Uribe e «indigente» a Paloma Valencia, haciendo referencia a la vez que estuvo despeinada en el Congreso. Y a un señor de apellido Polo Polo, presuntamente, lo trató de “esclavo” (por ser afrodescendiente). Esto, entre otros miles de insultos a personas que no piensan como ella.

En el programa Vicky en Semana, la youtuber lloró y habló sobre la importancia de elevar el debate, lo que conlleva a combatir con argumentos más no a burlarse del físico. No obstante, cuando Vicky Dávila le preguntó sobre la manera en que se refirió presidente Duque y lo llamó “porky”, ella dijo que no lo hacía por el físico sino como una bandera política, lo cual echó leña al fuego al demostrar la incapacidad de la izquierda para reconocer sus errores.

Es de notar que los complejos físicos de una persona son delicados dentro de cada fuero interno, y que atacar o rechazar a alguien por ello es una actitud despiadada. Pero también es necesario recalcar la importancia de la coherencia y del pedir perdón. Como dice el pasaje bíblico: “como juzguéis seréis juzgados”.

No se debe atacar el profesionalismo o el intelecto de una persona por no tener la misma opinión del contrario. Sobre esto la señorita Lalis dijo una vez que Vicky Dávila era mala periodista y afirmó que era «un cáncer» por el hecho de no apoyar el Paro… Todo esto, cuando precisamente Lalis se caracteriza por hacer solo periodismo militante y no por su imparcialidad.

Todo ser humano tiene defectos, lo que importa es el discurso de los argumentos y no el ataque a las personas.

@Carlossa_B