Por: Carla Fernández Abril

Los encuentros ciudadanos y los presupuestos participativos son una oportunidad que vale oro para el desarrollo y crecimiento de las localidades, y, por ende, de toda la capital. Conforme al Acuerdo 13 del 2000, estos espacios de participación le permiten a toda persona mayor de 14 años decidir en qué quieren que se inviertan los recursos públicos de su localidad: infraestructura, deporte, cultural, paz y convivencia, jóvenes, movilidad, espacio público, ambiente, entre otros, priorizando las necesidades que desde el territorio vive la ciudadanía.

Este año, los encuentros ciudadanos y presupuestos participativos tienen un componente especial y es que no sólo la ciudadanía puede elegir en qué invertir los recursos locales, sino que además pueden priorizar ¡el 60 %! de estos recursos conforme a sus necesidades colectivas, decisión que se adopta a través del Acuerdo 740 de 2019 y se reglamenta a través del Decreto 768 de 2019.

Además, es importante mencionar que la metodología de los presupuestos participativos ha sido un éxito en otras ciudades del país como Pasto, ya que a través de estos se incentivó a la ciudadanía a participar y a decidir; esto se genera básicamente porque la población comienza a sentir que puede hacer parte de las decisiones importantes que se dan en la esfera de lo público y que le pertenecían únicamente a sus dirigentes o gobernantes.

Con la renovación de la administración bogotana, los presupuestos participativos y los encuentros ciudadanos cobraron gran importancia y se presentaron como aquel instrumento y espacio que le permitiría a la gente involucrarse en mayor medida en las decisiones de la administración local; sin embargo, para el caso de los presupuestos participativos en su prueba piloto parece que no se han podido desarrollar de la mejor forma, ya que justo se desató la pandemia y esto llevó obligatoriamente la participación a un escenario virtual, lugar que solía usarse para el ocio y comunicaciones sencillas, pero que debió reinventarse para poder desarrollar de la mejor manera este proceso participativo del cual se tiene o tenía gran expectativa.

Lastimosamente, he escuchado a varias personas (vecinos y amigos) quejarse de la forma en la que se están desarrollando los encuentros, ya que parece que la virtualidad en vez de facilitar la participación y aumentarla, ha causado todo lo contrario por la falta de claridad frente a la metodología y forma de participación. Y es lógico, ¡nadie, absolutamente nadie previó el virus y mucho menos, una cuarentena que ya no es cuarentena!; además de ello, es importante resaltar que el adulto mayor era quién más solía participar de los encuentros cuando estos eran presenciales, lastimosamente, todo el tema de la participación y votación virtual ha provocado una disminución considerable de esta población dado que muchos de ellos o no tienen un dispositivo al cual conectarse o, teniéndolo, no saben cómo usarlo para estos propósitos.

Para colmo de males, a quienes se les facilita usar estos aparatos tecnológicos -los adultos jóvenes- son los que tristemente menos participan, bien sea por indiferencia, por desconocimiento, o por simple desconfianza en los procesos institucionales públicos.

Adicional a ello, parece que se han presentado choques entre los Consejeros de Planeación Local (CPL), quienes en su autonomía han buscado formas que permitan el pleno desarrollo de los encuentros, pero que todo indica que se les salieron de las manos, la administración distrital, que en su afán de sacar adelante los encuentros ciudadanos propuso la contratación local de una plataforma digital de transmisión y reunión en vivo que parece que en vez de facilitar la participación la ha dificultado por la falta de claridad en su funcionamiento y uso, y la ciudadanía, que al parecer no está del todo informada y sensibilizada respecto a estos espacios de participación y que en su mayoría está preocupada por la cuarentena y su bolsillo, además, como ya se mencionó, aquella que desea participar se le ha dificultado, y aquella que puede participar le es indiferente el proceso.

Amanecerá y veremos, espero y esperamos muchos ciudadanos que los encuentros ciudadanos y el proceso de decisión dentro de los presupuestos participativos llegue a buen termino porque es una oportunidad valiosa para toda la ciudad. Por tanto, invito a toda la comunidad lectora de Bogotá a inscribirse, participar, decidir, y votar, ¡aún hay tiempo!

Twitter: @CarlaFAbril