El libro del ex presidente Ernesto Samper, Grito Latinoamericano, nos permite tener una mirada diferente frente al futuro de los países de la región. Lograr la integración en un momento en el cual no se sabe quién va a pagar los costos de la pandemia puede ser el mejor escudo para resistir a la crisis económica y social que se vive a causa del covid-19, esto sumado, claro, a un apoyo real del gobierno a quienes hacen parte del empleo informal, no con pañitos de agua tibia.
En el diálogo que tuve con el ex presidente de Colombia para el programa Radio City, manifestó que Grito Latinoamericano es el reflejo del sentir de los jóvenes del continente y agregó que “las movilizaciones sociales son el combustible de una dinámica muy propia de América Latina, es el ‘movimientalismo’ social, todas nuestras grades reivindicaciones, los comuneros, los movimientos de los sin tierra en Brasil, de los esclavos en Haití, todos esos movimientos sociales son de la esencia de la política en América Latina.”
Cuando hablamos de la pandemia y el aislamiento, Ernesto Samper manifestó: “El impacto del aislamiento en América Latina es muy diferente al impacto que se genera en Europa, en América Latina el 56 % hacen parte de la economía informal, en Europa quienes están en casa tiene apoyo del Gobierno, la gente en muchos casos sale a las calles por hambre, a buscar incluso recurso de salud para sus hijos. Si realmente hay una voluntad del gobierno de dar una solución a la gente que hoy está guardada en sus casas debe hacerlo con subsidios y una renta básica, de lo contrario no se le puede impedir a la gente que salga a las calles a protestar”.
El grito hace referencia a levantar la voz más de lo normal para expresar enfado o desaprobación.
El artista noruego Edvard Munch pasó a la historia con la obra, ejecutada en 1893, la cual será exhibida en el Museo Nacional de Noruega a partir de 2022, la cual se ha convertido en una expresión radical y atemporal de la ansiedad humana. Y es que la pandemia ha generado enfermedades que afectan la salud mental y la más frecuente es la que representa esta expresión artística.
Un Grito Latinoamericano no solo podría representar la ansiedad, sino además la locura colectiva que genera tanta desigualdad desde la esencia de los movimientos sociales y la expresión de los jóvenes del continente.
Al cierre de la conversación con el ex Secretario General de UNASUR me llamó mucho la atención cuando afirmó que “Latinoamérica tiene dos papas: el papa Francisco y el Papa Mujica. Tal vez uno más a la izquierda que otro, pero los dos son figuras cautivantes, comparten una virtud que es la compasión, son compasivos, les duele el sufrimiento ajeno, usted habla con Mujica y es como un abuelo enseñando. Pepe le dice a los jóvenes que no busquen la felicidad en los supermercados, allá no la encuentran, la felicidad esta en sí mismos. Mujica es un ejemplo de lucha, coherencia, convicción y corazón. La gente joven que está buscando ese futuro que está en Grito Latinoamericano, ese futuro es ya, no se va a demorar 20 años, hoy nos estamos comunicando virtualmente, estamos enfrentando otros riesgos mas graves que el covid como el cambio climático, estamos acabando nosotros con los ecosistemas, la gente busca la paz interior, ese es el futuro del que hablan personas como Pepe Mujica y el Papa Francisco”.
Ernesto Samper Pizano nos deja una profunda reflexión, nos permite revisar la conciencia ciudadana y observar con detenimiento las casualidades que tenemos desde Argentina hasta México, una casualidad común es la pobreza colectiva en un territorio lleno de riqueza. Recomendado su libro, leerlo es la forma de reivindicar la identidad de América Latina.