Asistí al lanzamiento del Club de Lectura “Conexión Literaria” de la Facultad de Ciencias Económicas, Administrativas y Contables de la Fundación Universitaria Tecnológico Comfenalco del Distrito de Cartagena de Indias, cuyo lema es muy diciente: “La lectura nos une, la escritura nos libera”. Una iniciativa que concita la reflexión académica desde todas las instancias que velan por la formación de las nuevas generaciones y que sirva para catalizar esfuerzos humanos y logísticos de maestros, directivos y estudiantes para consolidar una sociedad justa, ilustrada y libre.
Todo ocurrió en el auditorio Augusto Covo una mañana de marzo. Allí había entusiasmo diseminado en rostros, corazones y mentes de jóvenes estudiantes, docentes y directivos, quienes con avidez llegaron ilusionados de la novedad. Los panegíricos sobre la lectura y las demás habilidades en la formación del ser humano no se quedaron atrás, pues formar lectores a través de un Club implica un grande compromiso. Sé que los líderes y lideresas de esta loable estrategia didáctico-pedagógica, docentes de comunicación oral y escrita, no claudicarán y dejarán en alto el buen nombre de maestros y maestras comprometidos con la plausible iniciativa institucional. Por ello, desde esta tribuna expreso mis percepciones de la importancia que deben tener las actividades de la lectura placentera y la lectura crítica con sus implicaciones en la consolidación de una sociedad libre y aupada desde este novísimo Club de lectura.
De acuerdo a lo anterior, se puede decir que la formación lectora es un proceso fundamental que trasciende la mera decodificación de palabras; es un pilar esencial en el desarrollo integral de los individuos y en la construcción de sociedades más educadas y críticas. Como bien señala Pedroza Doria, «la lectura no es solo un acto de comprensión y de interpretación de textos, sino una herramienta que permite al individuo comprender el mundo, cuestionarlo y transformarlo» (Pedroza Doria, E. 2020). Esta afirmación subraya la importancia de la lectura como un mecanismo que no solo enriquece el conocimiento, sino que también fomenta el pensamiento crítico y la participación activa en la sociedad.
En primer lugar, la lectura es una herramienta indispensable para el aprendizaje y el desarrollo cognitivo. Según el informe PISA de la OECD (2006), “la comprensión e interpretación de diferentes clases de textos son claves para alcanzar objetivos personales y participar de manera efectiva en la sociedad”. Esta afirmación refuerza la idea de que la lectura no es un mero ejercicio académico, sino una competencia que permite a los individuos ampliar sus horizontes y acceder a nuevas oportunidades. Según Pedroza, E (2020). en su texto Educación y pensamiento crítico, compara la lectura con una llave que abre puertas a mundos desconocidos: «Así como una llave abre una puerta, la lectura abre la mente a nuevas ideas, perspectivas y posibilidades». Esta analogía ilustra cómo la lectura no solo proporciona información, sino que también estimula la imaginación y la creatividad.
En el ámbito educativo, la lectura desempeña un papel crucial al mejorar el rendimiento académico y combatir el analfabetismo. Biancarosa y Snow (2004) destacan que los programas educativos efectivos incluyen actividades intensivas de lectura y escritura, lo que no solo beneficia a los estudiantes académicamente, sino que también fortalece su capacidad para enfrentar desafíos futuros. Pedroza E, (2020). sostiene que «la formación lectora es la base sobre la cual se construye el aprendizaje permanente«. Esto refuerza la idea de que la lectura no es un fin en sí mismo, sino un medio para alcanzar un desarrollo intelectual y social más amplio.
Además, la lectura fomenta habilidades como la reflexión, el razonamiento crítico y la comunicación efectiva, competencias esenciales en una sociedad globalizada. Phillips y Norris (1999) afirman que leer críticamente implica analizar argumentos, evaluar evidencias y construir opiniones fundamentadas. Este proceso no solo enriquece el conocimiento, sino que también desarrolla una postura crítica frente a los textos y la realidad. Según Pedroza, E. (2020). «Así como un escultor moldea la arcilla, el lector crítico moldea su pensamiento a través de la interpretación y el análisis de los texto”, la lectura activa y reflexiva transforma la mente del individuo, permitiéndole construir un pensamiento más sólido y autónomo.
Asimismo, la lectura tiene beneficios emocionales y culturales que van más allá del ámbito académico. La práctica de la lectura fomenta la empatía al permitir a los lectores explorar diferentes perspectivas culturales y emocionales. Como señala Pedroza, E, (2020) «leer es viajar sin moverse, es vivir mil vidas en una sola». Esto es, resaltar cómo la lectura nos conecta con experiencias y emociones ajenas, enriqueciendo nuestra comprensión del mundo y de nosotros mismos.
En síntesis, la formación lectora es un proceso integral que impacta en todos los aspectos del desarrollo humano: intelectual, social, emocional y cultural. Como bien se afirma: «una sociedad que lee es una sociedad que piensa, cuestiona y avanza» (Pedroza, E, 2020). Fomentar este hábito no solo mejora las capacidades individuales, sino que también contribuye al progreso colectivo al formar ciudadanos más críticos e informados. Por ello, promover estrategias efectivas para fortalecer las competencias lecto-escriturales debe ser una prioridad en los sistemas educativos actuales a través de estrategias didácticas placenteras, máxime si es en un Club de Lectura como “Conexión Literaria” que, en mi opinión, será reconocida como un trascendental proyecto que contrarrestará el uso acrítico de los aparatos tecnológicos tan en boga actualmente. Pues, los libros, la lectura y la escritura, en definitiva, son las llaves que abren las puertas al conocimiento, al pensamiento crítico y a la transformación social.
Referencias bibliográficas
Biancarosa, G., & Snow, C. E. (2004). Reading next: A vision for action and research in middle and high school literacy. Alliance for Excellent Education.
OECD. (2006). PISA 2006: Programme for International Student Assessment. OECD Publishing.
Pedroza Doria, E. (2020, 15 de marzo). La lectura como herramienta de transformación social. El Tiempo. https://blogs.eltiempo.com/pensamientoycreatividad/2022/09/19/importancia-de-la-lectura-critica-en-la-sociedad-de-consumo/
Pedroza Doria, E. (2020, 22 de junio). Educación y pensamiento crítico: La importancia de la lectura. El Espectador. https://www.elespectador.com/actualidad/la-escritura-creativa-y-su-importancia-en-la-transformacion-del-ser-humano-388784/
Phillips, L. M., & Norris, S. P. (1999). Interpreting popular reports of science: What happens when the reader’s world meets the world on paper? International Journal of Science Education, 21(3), 317-327. https://doi.org/10.1080/095006999290723