Seguir este blog

Uno siempre es más inteligente al día siguiente. Si discutimos con alguien, la frase magistral que nos habría hecho ganar la discusión nos llega a la mente muchas horas después. ¡Claro… debí haberle dicho que… ya pa’qué! (descarga este episodio podcast)

El comentario fabuloso, inteligente y oportuno que habría conquistado a la persona que nos gustó… sólo se nos ocurre cuando ya no está. Eso nos pasa con demasiada frecuencia, es como Antonio Sanint contaba en aquella rutina de stand-up comedy sobre la neurona encargada de hablarle a las mujeres bonitas…

Imagino que también las mujeres sentirán algo equivalente, que posiblemente sea el no atreverse a hablar primero y quizás quedarse esperando a que él se anime. ¿Y si ella pudiera enviarle un saludo aún sin saber su nombre? Y uno pudiera reconocer su foto en una app en el teléfono y así establecer contacto?

Gracias a Dios existe la tecnología. El siglo 21 es hoy, y ahora hay una App para conseguir una segunda oportunidad y lograr hablarle a esa persona que nos encantó… o conectarnos con quien no pudimos hablar por timidez, distancia, o mala suerte. Y también puede servir para descubrir a esa persona ideal con quien compartimos espacios cercanos, aficiones, gustos… y que como en las películas adolescentes está justo a nuestro lado y no nos damos cuenta.

Marie Cosnard, la dueña de la voz que oyes en la entrevista.

En este episodio podcast puedes oír la entrevista con Marie Cosnard, la vocera de la app francesa Happn, diseñada para tener esa segunda oportunidad con alguien que nos cruzamos una o muchas veces sin hablarnos. O con esa persona con la que necesitamos una segunda oportunidad.

Espero que encuentres divertida esta entrevista que por cierto… necesitaría una segunda oportunidad para contarle a Marie que ya descubrí que con esta app puedes vincular una cuenta de Spotify para enviarle canciones a las personas, y que la conexión con facebook te adelanta todos los intereses en común que ambos tengan, o los amigos compartidos que podrían presentarlos si uno aún sigue siendo tímido como para enviarle un saludo en la app.