Los famosos “me gusta”, los indicativos de interacción más importantes en redes sociales, ya no serán solamente un adorno en nuestras publicaciones, el programa “#CausasCiudadanas” del Ministerio del Interior, se ha propuesto reconocer aquellas iniciativas ciudadanas que alcancen las 20 mil interacciones. Este importante reconocimiento del impacto que las redes sociales tienen en nuestras vidas, es una excelente oportunidad para reflexionar sobre cómo podríamos generar peticiones y propuestas con potencial de éxito.

Piense en el bien común y en el interés general

Antes de “#CausasCiudadanas”, plataformas en línea como Change.org se han vuelto el lugar para visibilizar causas sociales a través de internet. Allí, algunas peticiones como “no más cobros”, que busca suspender los cobros al retirar dinero de cajeros automáticos, se han acercado a los 50.000 simpatizantes y es una de las peticiones más firmadas por los colombianos. Otras, como “Creación de un Parque Jurásico Real” ó “Reducir la cantidad de fotos que Dennis sube al Whatsapp”, demuestran los alcances de estas plataformas.

Tenga claro el objetivo de la campaña

Una campaña que no tiene claro cómo va a resolver un problema, debe dársele tiempo para madurar y mejorar. Los simpatizantes deben saber que se plantea una solución razonable a un problema común y que se cuenta las herramientas para llevarlo a cabo. Desconfíe de aquellas que son muy amplias, poco claras y que buscan resolver muchas cosas al mismo tiempo. Por ejemplo, la noble ¿Por qué la libreta militar es obligatoria y la educación no? tiene buenas intenciones pero parece querer hacer dos cosas al mismo tiempo, ninguna de forma muy clara.

No es hacer una carta al Niño Dios

Desafortunadamente, las campañas más absurdas y difíciles de llevar a cabo son las que abundan. La perspectiva social de estas iniciativas debería ser su derrotero, pues por su visibilidad pueden llegar a generar cambios profundos para el bien de muchas personas. Sin embargo, las del tipo: “Los tesoros del Galeón San José deben ser repartidos entre todos los colombianos”, “Pídanle al Presidente que construya la Estrella de la Muerte de Star Wars” suelen acaparar más visibilidad.

Note que en estas se desconoce el interlocutor, no es claro quién debería llevar a cabo el proyecto y por eso, es probable que no vayan a tener éxito. Es indispensable dirigir la petición y la propuesta a la persona indicada, la que tomaría la decisión y aquella que en últimas pueda llevar a cabo las metas planteadas.

Una propuesta duradera y permanente

Una iniciativa con un beneficio a corto plazo da cuenta de un interés inmediato y de impacto reducido. Esta es la oportunidad para generar propuestas permanentes, con continuidad y que puedan impactar la vida de la gente. Peticiones como “Paremos la desviación del Arroyo Bruno, en La Guajira” y otras similares, tienen un beneficio ecológico permanente para comunidades vulnerables que históricamente han sido ignoradas.

Darse a conocer

El impacto de la campaña y su alcance se mide directamente por su visibilidad en redes. Es necesario echar a correr la voz y hacer uso de videos, entrevistas, soportes y todos los recursos que permitan garantizar el impacto de la propuesta. Una buena iniciativa puede encontrar dificultad para materializarse si no cuenta con la visibilidad adecuada.

Evitar los ataques a un particular

Este es uno de los usos más nocivos de las redes sociales y una tendencia que tristemente prevalece. El acoso sistemático a personas y colectivos se ha vuelto la cara más visible de una plataforma que debería funcionar para todo lo contrario.

Algunas campañas, con intenciones más nobles, hacen tareas de vigilantismo digital y linchamiento público; aunque las plataformas para causas ciudadanas son vitales para elevar denuncias, la intención es llamar la atención de la justicia, no suplantarla. Busque siempre el bien común.

@FDavilaL

Fernando Dávila Ladrón De Guevara

Rector Institución Universitaria Politécnico Grancolombiano