La comunicación y la información retoman liderato en la pandemia
Por Álvaro Rodríguez Hernández, docente de la Escuela de Comunicación y Gestión de la Información. Director de PoliRadio y PoliDeportes del Politécnico Grancolombiano.
Vamos caminando sobre la pandemia, el planeta sigue girando y la adaptación es lo que la humanidad está afrontando de una manera rápida y obligatoria, los procesos buscan una nueva forma de ser ejecutados y el cambio de paradigmas es inminente. Cosas, profesiones, trabajos y situaciones muestran que no son necesarias y otras se hacen más relevantes y brillan por su nueva importancia.
La comunicación y el periodismo siempre han jugado un papel destacado en la sociedad y en la construcción de país; al igual que otras profesiones han venido mutando y su poder adaptativo genera que sigan cumpliendo con su función social, generando que cada día se haga necesario tener profesionales capacitados para afrontar los retos que presenta este campo.
Los escenarios digitales han asumido el protagonismo para las nuevas dinámicas, los procesos comunicativos se vuelven indispensables en cada una de las interacciones humanas, desde el ámbito familiar, hasta los espacios laborales, pasando por el entretenimiento y lo personal.
Los diseños de servicio, los procesos de implementación y los escenarios de interacción con dichos servicios generan una línea comunicativa que debe ser abordada desde los fundamentos propios de la comunicación; es decir, un profesional que esté en la capacidad de interactuar y ser parte de un equipo compuesto por varias disciplinas, en donde se logre abordar la generación de soluciones para las problemáticas humanas.
La comunicación permea a la humanidad; por tal motivo, estudiarla, manejarla, aplicarla y optimizarla, debe ser un objetivo primario al momento de pensar en una mejor calidad de vida para el mundo. Por solo nombrar cuatro escenarios encontramos: las organizaciones, la educación, el desarrollo social y la información.
En las organizaciones la comunicación, fácilmente, puede ser una nueva vicepresidencia o subgerencia, una buena comunicación organizacional, manejada profesionalmente, optimiza los procesos internos y puede estar llamada a potencializar los ingresos y la productividad de la empresa. La pandemia ha desplazado buena parte de las acciones directas y presenciales de las organizaciones y, en este momento, se hace indispensable en el desarrollo de una compañía.
Para la educación la comunicación es fundamental, hablar de la educomunicación, del fortalecimiento de los procesos pedagógicos, de la innovación en las estrategias educativas y del efectivo acompañamiento a los estudiantes es tocar el tema del éxito educativo, tanto en un modelo virtual, como en el que hoy estamos inmersos de la presencialidad mediada por plataformas tecnológicas, hasta la alternancia de espacios académicos, un nuevo modelo presencial que, en la obligada primera fase, fundamentó su éxito en las dinámicas comunicacionales.
Las poblaciones marginadas, los grupos minoritarios, las comunidades vulnerables y, en términos generales, la sociedad, cuentan con la comunicación como un eje articulador de desarrollo, visibilización de sus debilidades y fortalezas, lo cual permite que se facilite su integración a la unidad y construcción de país, lo cual es imprescindible durante este proceso y en la pospandemia.
La información hace parte del funcionamiento social, acá el periodismo retoma su importancia, esta pandemia ha exigido que estos profesionales; es decir, los periodistas, ofrezcan información corroborada y verídica a la ciudadanía. En un principio esto se ha limitado a los datos oficiales, debido a la dinámica de comportamiento social al cual se ha visto llamado el mundo.
Con el transcurrir del tiempo, y a sabiendas que este proceso de la covid-19 aún no termina y nos acompañará por un largo lapso, el trabajo periodístico debe ir abordando la investigación de todo lo que ha generado esta emergencia sanitaria, al igual que aquellos hechos que afectan a la sociedad y van más allá de lo que estamos viviendo.
Hace poco se vio como el buen periodismo resistió el ser absorbido por el poder económico, el medio Primera Página conservó su autonomía empresarial y con un modelo sostenible de negocio sigue ofreciendo información desde la investigación y la independencia del ejercicio profesional del periodismo.
Más allá de los grandes medios y la utilidad económica del infoentretenimiento, es necesario que la sociedad cuente con un periodismo al servicio de la verdad, sostenible y con la garantía que sea manejado por las mentes de personas preparadas para asumir esta responsabilidad con ética y con las nuevas competencias digitales que exige la profesión.
El infoentretenimiento
Los medios de comunicación masiva encontraron en el entretenimiento y el infoentretenimiento un producto lucrativo que generó el crecimiento e interés de los grupos económicos en este sector, los espacios informativos sufrieron una reducción y se generaron campos en donde se disfrazó el entretenimiento como un espacio informativo.
Lo anterior no quiere decir que no puedan ir de la mano, pero sí se deben generar momentos específicos dedicados a la información que le brinden a la sociedad los resultados del trabajo periodístico, el que debe responder a unas narrativas agradables para las audiencias.
Excelente contar con la ciencia ficción, las adaptaciones de la realidad y los espacios que nos permiten crecer como sociedad dentro de los procesos creativos propios de los seres humanos, eso no lo podemos perder y, como tal, debe ser promovido; sin duda, el entretenimiento es una necesidad y acá los procesos comunicativos, también, aportan a una buena producción.
Todo está asociado a una cabeza que es la comunicación, no como único elemento social, sino como un aspecto de valor indispensable en los procesos, en el cual hay un amplio campo de acción para prestar un servicio a la humanidad, sin que esto se deje de pensar como una profesión en donde quien la ejerce pueda cumplir sus metas y obtener una remuneración competitiva en el mercado, de tal manera que el profesional pueda cubrir sus necesidades.
Además de la formación, es necesario que los profesionales de la comunicación y la información se capaciten permanentemente, esto obliga a que las universidades ofrezcan un portafolio acorde a las necesidades del mercado laboral y donde se contemplen los diferentes tópicos de la comunicación digital.
Es así como la comunicación, con una mirada multidimensional, hace parte de los aspectos que nos ayudarán a llevar esta emergencia y afrontar las diferentes condiciones de vida que se presenten durante el desarrollo de esta situación en donde, día a día, la humanidad se enfrenta a un nuevo reto.
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