Por: Javier Baquero – JABA

De: Crotaurinos

 

En tarde calurosa y bastante accidentada se cumplió el quinto festejo de la Feria de Cali. Vimos la mejor entrada del seriado. Se cortaron tres orejas, dos toreros pasaron a la enfermería. Un toro, un ganadero y los aficionados fueron burlados por el palco presidencial.

 

Mucho más de tres cuartos, o mejor, como le gustaría a muchos que dijéramos, lleno taurino en los tendidos de Cañaveralejo, asistieron a uno de los carteles mejor rematados de la feria 49 de la capital del departamento del Valle.

 

Se lidiaron toros de la dehesa del maestro Cesar Rincón, Las Ventas del Espíritu Santo, bien presentados en general a excepción del lidiado en segundo lugar que fue remontado y a contrahecho.

 

José Gómez “Dinastía”

En el primero de la tarde salió con ganas y saludo al ejemplar con una larga cambiada que a la postre resulto desangelada o embarullada. Luego de la pica ejecutó una serie de Gaoneras que fueron del agrado del público. Estuvo bien con las banderillas sin mayor espectacularidad. En la muleta ejecutó tandas justas y de buena factura, teniendo que sortear la brisa en el ruedo. El toro se fue haciendo tardo y la faena disminuyendo a uni-pases. Mató de buena estocada y cortó la primera oreja de la tarde.

 

En el cuarto de la tarde, vio salir al mejor toro de la tarde, de nombre divino, con 464 kilos de peso y herrado con el guarismo 339 en sus lomos. En el capote la labor no fue lucida en el saludo, llevó al astado por cacerinas a la cabalgadura para que escasamente picaran al ejemplar y luego ejecutó dos tafalleras de buena factura.

 

La labor con la muleta la inició pegado a las tablas en los bajos del tendido de sombra, donde ejecutó cuatro muletazos por alto y lamentablemente resultó cogido por el pupilo de las Ventas y lesionado en su pierna izquierda. Luego del percance ejecuta algunas tandas buenas pero que no dejaron ver la magnitud de la importancia del toro. Por el pitón izquierdo ejecutó dos pases invertidos, resultando arrollado y con la taleguilla rota a la altura del muslo derecho. Mató de buena estocada y el presidente concedió las dos orejas como premio. Hubo fuerte petición de vuelta al ruedo para el toro, la cual no fue concedida por el presidente. Paso a la enfermería y le fue decretada una incapacidad por tres meses debido a lesión en los ligamentos de su rodilla izquierda.

 

Sebastián Castella

El segundo de la tarde, primero para el torero francés genero en las horas de la mañana un jaleo para que no fuera en la corrida y razón tenían los que no lo querían, un toro feo, remontado, cuesta arriba, zambombo, sin hechuras. En fin este toro fue caminador, sosote, poco franco frente a los engaños que le presentó Castella y no transmitía. Recibió poca pica. En la muleta Sebastián quiso tratar de hacer las cosas bien, ejecutó tandas cortas y a media altura, que era lo ajustado al comportamiento del toro. Luego de tratar de agradar mató de dos pinchazos e igual número de descabellos. Pitos fuertes al toro y silencio para el torero que estuvo voluntarioso.

 

En el quinto Castella quería agradar al público, saludo con tres verónicas y en la muleta brindo a los tendidos e inició su labor, como es costumbre en el centro del ruedo, resultando luego de tres invertidos por la espalda revolcado por el astado, lo despojaron de la chaquetilla y muy mermado de condiciones completa una faena llena de deseos por hacer las cosas bien, el toro no colaboraba con las buenas intensiones de Castella. Mató tras pinchazo y paso a la enfermería, para luego ser trasladado a la Clínica de Inbanaco, con un parte facultativo que refiere “fractura de una costilla y un neumotórax por afectarse el pulmón con una astilla de la clavícula”

 

José María Manzanares

Debutó con siete verónicas de buena factura, luego de las cuales resultó achuchado al enredarse con el pitón. Inició por doblones, ejecutó muletazos con más ganas y valor que otra cosa. Mató de estocada.

 

En el último del festejo no se acoplo al toro en el capote. Antes de iniciar su labor con la muleta el toro se lesiono una de sus extremidades delanteras lo que hecho al traste cualquier tipo de deseos por agradar. Mató pinchazo y estocada entera.

 

Incidencias

No es justo que durante lo corrido la feria, en dos tardes, sin tan siquiera haberlo pedido el público, el presidente de las corridas haya mostrado el pañuelo azul para conceder la vuelta al ruedo a toros que fueron “buenos”, pero no excelentes y ayer cuando el quinto astado de Las Ventas del Espíritu Santo, demostró bravura, casta y nobleza, entre otras de las características del buen toro, el palco alto ignoró por completo la voz de los aficionados que colmaron los tendidos de la plaza de Cañaveralejo. Es más el público fue burlado cuando en medio de su petición salio un pañuelo blanco, para hacer trío con los que concedían las dos orejas, y con esto los asistentes “tragaron” y pensaron que se había concedido la vuelta al ruedo al toro, cosa que no ocurrió, porque ese pañuelo lo único que ordenaba era que la banda iniciara el pasodoble. Y sin embargo, hay quienes dicen “se le concedió arrastre lento al toro”. Señores eso no existe en el reglamento de Colombia, Ley 916.