Redacción: Javier Baquero – Crotaurinos
El torero colombiano Paco Perlaza vio hoy las dos caras de la moneda en la corrida realizada en la Plaza de Toros de Maracay – Venezuela, donde cortó una oreja y vio ir vivo a los corrales a su segundo ejemplar.
Con menos de tres cuartos del aforo y toros de Laguna Blanca, desiguales de juego y presentación, hicieron el paseíllo el colombiano Paco Perlaza, la malagueña Mari Paz Vega y el venezolano José Alberto García, en la Plaza de Toros La Maestranza César Girón de la ciudad de Maracay.
Los astados de Laguna Blanca con una presentación bastante irregular, los lidiados en segundo, tercero y sexto, fueron los únicos que se ajustaban al fenotipo de toro. En cuanto al comportamiento se puede decir que la corrida fue mansa e incluso desarrollando sentido, características menos notorias en el segundo y cuarto de la tarde.
El quinto toro del festejo acuso aparte de las condiciones anotadas, síntomas de burriciego, circunstancia que no fue detectada por la junta técnica que dio el visto bueno al encierro.
Mari Paz Vega encontró en su primero un toro con complicaciones, las cuales sorteó de manera pronta y entro a matar, escuchando palmas del respetable. En el cuarto de la tarde destacaron sendas tandas por el pitón derecho y en general una faena ligada y variada. Mato de estocada y dos descabellos, corto una oreja.
Paco Perlaza en su primero destaco en el capote. Con la muleta inicio su labor en el centro de la plaza con un cambiado por la espalda, lo que hizo que el público se pusiera de su lado desde el primer momento. La faena fue emimentemente derechista desarrollando tandas de mucha importancia y ligazón. Mato de estocada y corto una oreja.
En su segundo el colombiano se encontró con un verdadero ciego que acabo con la ilusión de triunfo, pues imposibilito cualquier tipo de faena e incluso hizo imposible la ejecución de la suerte suprema, Perlaza escucho los tres avisos y vio pasar a los corrales al enfermo de Laguna Blanca.
José Alberto García en su primero pasó con más pena que gloria al estar falto de voluntad suficiente para enfrentar las complicaciones del astado. Con el acero estuvo pesado, un pinchazo, un bajonazo y siete descabellos. En el que cerró el festejo García aprovecho para ejecutar dos tandas de naturales, que fue lo único que el toro permitió. Mato de estocada. Vio silenciada su labor en los dos ejemplares.
Mari Paz Vega: Ovación y oreja
Paco Perlaza: Oreja y silencio
José Alberto García: Silencio y silencio.
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