Ven te cuento el final de la película- Spoilers

«…Y cuando todo termina nos enteramos de que el asesino es el mayordomo».
Seguramente muchos odiamos el encuentro con alguien que arruina una película revelando de antemano el momento más emocionante, la escena en la que todo se resuelve y en la que la emoción aflora o el gran misterio que conlleva el 90% de la fuerza de la historia.  Así como quienes nos amargaron la vida escolar ahora se denominan «bullys», a lo que nos arruina el final de la película (un comentario escrito o una persona) lo llamamos «spoiler».
A pesar de que no soy amigo de los extranjerismos, no conozco en español una palabra concreta que traduzca este término anglosajón (derivado de spoil) que se refiere al que arruina, echa a perder o nos impide la emoción del descubrimiento. Para españolizarlo, podríamos usar el término «arruinador».
Hay gente que disfruta sádicamente arruinando los finales y debo confesar que algunas veces la emoción de ver una gran película y la sospecha de que mi interlocutor nunca la verá, me han convertido también en el arruinador de películas de mis seres queridos (que después del suceso ya no son tan queridos).  A mi favor debo decir que soy un arruinador en rehabilitación y que no lo hago por maldad como algunos, que disfrutan estropeando la experiencia cinematográfica del prójimo.
Las páginas especializadas de cine han acuñado el término «spoiler» para advertirle al espectador que lo que sigue revelará secretos de la película para que suspenda la lectura si no quiere arruinarla.  Si alguna vez usted ve esta palabrita en una reseña no crea que se refieren a Mr Spoiler, algún actor famoso, le recomiendo que evite la tentación de leer, se tape los ojos, busque a tientas el siguiente párrafo o bote bien lejos la revista.  En ocasiones son algunos críticos de cine quienes olvidan su papel al hacer reseñas o presentaciones y se exceden revelando detalles claves de la trama, como aquel que me dañó para siempre una película de Hitcock al anunciar: «El director quiere que creamos que él es el asesino que ahorca a sus víctimas, pero poco a poco veremos por qué no»…en ese momento quise tener a la mano una soga.
Lo increíble es que podemos toparnos con algún impaciente que, al no aguantar una alta dosis de suspenso, prefiere conocer de antemano el desenlace y nos pregunta: «¿Y entonces…qué va a pasar ahora?»…frase que sólo podemos responder neuróticamente con un «Si quieres apagamos la película y te la cuento».
Me pasó que un amigo planeaba ver La guerra del fuego de Jean Jacques Annaud (ATENCIÓN, SPOILER), pero antes quería conocer al final. Ante lo absurdo de la situación, decidí burlarme de él diciéndole que todo ocurría en el presente y que al final el protagonista sube a una montaña para ver un gran centro comercial lleno de luces de neón.  Otra vez el engañado fui yo cuando mi propio hermano me dijo que en una película en la que una pareja atraviesa por una crisis matrimonial, el psicólogo intentaba seducir al protagonista…por supuesto malinterpreté cada plano antes de entender que se trataba de su sádica venganza por arruinarle varias películas tiempo atrás.
Ocurre también que hay una especie de auto-spoiler ocasionado por la mala edición de los trailers de muchos films.  A veces estos anuncios se exceden en la información que proporcionan y revelan sin querer el secreto que deberían guardar con mayor recelo para el clímax de la historia.  Más de una vez me ha ocurrido que no quiero ver una película porque siento que ya la vi sólo con ver su trailer (algo grave en películas de suspenso o terror).
¿Usted ya vio Ciudadano Kane, Star Wars, El club de la pelea, Sexto sentido o Los sospechosos de siempre? Si la respuesta es no, entonces ni se le ocurra preguntar que significa Rosebud, que relación hay entre el narrador y Tyler Durden, o entre Luke Skywalker y Darth Vader o entre el psicólogo Malcolm y el pequeño Cole o quien es Kaisersoze.  Saber estos datos puede echar a perder por completo su experiencia cinematográfica y esto lo saben claramente los productores que, antes de hacer el lanzamiento de éstas y otras películas, han escondido con sigilo los desenlaces, llegando muchas veces a filmar finales alternativos para evitar filtraciones al público.  Eso sí, usted puede estar tan de malas que cuando esté haciendo la fila se encuentre con un «arruinador de películas» profesional y detestable que salga comentando en voz alta el inesperado final que cambió el rumbo de la historia.

Del blog El Magni