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¿Jesucristo de donde zapatos Prada?. Jorge Mario Bergoglio, es el Papa número 266, esta de moda y  por su sencillo estilo de vida esta cambiando la forma en que el mundo ve a la iglesia. 

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El vestuario Papal envía mensajes a más de 2.000 millones de creyentes y no creyentes porque refleja mucho de la dinámica global. Benedicto XVI condenado por su afición a usar modelitos marca Prada, Giorgio Armani, mucho oro y piedras preciosas, etc.
El Papa Francisco, «es un parche», -se lo escuché a un niño de 12 años-, y es verdad, llegó con su cruz de hierro, reloj de plástico y sotana sencilla a marcar tendencia, y ése es el verdadero mensaje del evangelio, menos es más.

El Papa Francisco a diferencia del Papa emérito Benedicto XVI no es de usar mocasines rojos marca Prada, en cambio, prefiere sus mocasines negros viejos, un reloj de plástico, una cruz de hierro máximo de plata y nada de sotanas con hilos de oro. ¿Papa móvil Mercedes? no señor, se va en bus o en su carro Ford, el Papa que fue semi-revoltoso, se toma selfies como cualquier cristiano y es un imán de carisma desde su nombramiento para creyentes y no creyentes. Este es el estilo del Papa Francisco y su esencia radica en el verdadero valor de la iglesia y el evangelio.

Entonces, adiós a la era marca ‘Prada’, bienvenida la era marca ‘nada’.
La diferencia entre el Papa emérito Benedicto XVI y el Actual Papa Francisco fue evidente desde el primer instante en que salió a la luz pública.
Uno de los escándalos que encrespó corbatas en cuanto a vestimenta Papal, fue cuando Adriano Stefanelli le entregó un par mocasines rojos marca Prada al Papa emérito Benedicto XVI. Giorgio Armani y otras lujosas marcas de gafas y sombreros tampoco se quedaron atrás con donaciones estilísticas Papales como si se tratara de toda una celebridad hollywoodense o un  Jesucristo Super-Star.
A este fenómeno podría llamarle Marketing Papal, no en vano lo que viste el Papa por lo menos 1.200 millones de fervientes creyentes vemos. Y unos van al son otros al sorbetón. Eso ni en un mundial. Esto no fue muy bien aceptado y su notable inclinación por la moda fue objeto de controversia porque Jesucristo de donde zapatos Prada.
Benedicto XVI vestía de Prada.
Sus famosos  mocasines rojos simbolizan el poder y la sangre derramada por Cristo y los mártires. Su estilo: se encargó de revivir tradiciones incluso olvidadas de la moda papal a lo largo de cientos de años en aquellas suntuosas y elaboradas sotanas y accesorios con los que fue visto en público y en privado. Elecciones tradicionales y respetables.
Por otro lado, el actual Papa Francisco rompe tradiciones y viste para sorpresa casi con ‘nada’. El se encarga de revivir el verdadero significado de la iglesia alejándose de hilos de oro, sotanas elaboradas, dijo no a las joyas, prefiere un reloj de plástico y sus mocasines negros viejos. Desde su nombramiento conquistó al mundo con su particular comportamiento más de humano, menos de Papa tradicional. Era claro que el mundo le iba a observar y aceptar.
Seas quien seas, el estilo es una manifestación directa de su forma de ser. Socialmente, el estilo que más influye es el de iconos globales o líderes. Por icono entendamos a esa persona ( de cualquier esfera social llámese: política, religión, cultura pop, deportes, ciencia y tecnología, etc.); con la asombrosa capacidad de influir en el vestir o actuar de un ciudadano promedio.
No en vano los niños ruegan a sus papás un permiso para hacerse el corte de cabello del futbolista de moda, las mujeres profesionales y adultas de clase media corren a comprar las prendas asequibles de Michelle Obama, las más jóvenes  agotan en tiendas de pronta-moda las piezas que usa Kate Middleton, millones de jovencitas cortaron su cabello como Victoria Beckham.
La emblemática chaqueta roja de cuero (thriller)  y el moon walk (paso de baile) de Michael Jackson forjaron una cultura y todos la querían tener, hoy las prominentes cejas de Cara Delevigne son pedidas en las salas de belleza, ni hablar de las pintas ochenteras de Madonna, El vestido blanco cuello halter de Marylin Monroe, La boina del Che Guevara, Las piernas de Beyoncé, y junto a otros miles de estereotipos de iconos o lideres positivos o negativos a nivel mundial que inciden en la sociedad promedio.
Una persona común y corriente, ve, escucha, atiende, adapta y/o adopta particularidades del estilo de estos iconos influyentes, definiendo así su propio nicho, lo que quiere ser y lo que no es.
Hoy no solo los más de 1.200 millones de católicos prestan atención al fresco, humano y totalmente alejado de rituales tradicional estilo del Papa Francisco. Jamás pretencioso,  nada de sotanas suntuosas con hilos de oro, mucho menos mocasines Prada de cuero rojo. El estilo de la persona del año 2013 según TIMES, es sencillo.
Contrario al estilo del papa emérito anterior, que quiso recuperar la tradición de siglos atrás reveladas en su lujoso vestuario, más sumido a la pomposa tradición que generó rechazo de la iglesia con más seguidores y más rica del mundo.
Desde el Papa Juan Pablo II el mundo católico esperaba un Papa con carisma que reafirmara los valores tradicionales de la iglesia y del evangelio empañados por escandalosos temas. Y el Papa Francisco desde su nombramiento ha dado en el target, y vaya manera.
Su estilo, es decir no solo lo que se pone sino su forma de actuar tiene su sello, ha logrado con calidez la convergencia entre creyentes y no creyentes, le dijo adiós al tradicional derroche de parafernalias que chocan de la iglesia, adiós al Papa móvil Mercedes, Bienvenido un Ford viejo o pude tomar el bus como una persona normal.
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El mundo esta lo suficientemente hastiado de vanagloriar líderes frívolos y demanda líderes de carne y hueso, no tan perfectos; y ante esta necesidad funcionan hoy algunos gobiernos y ahora la iglesia. A través de mensajes de simpatía en códigos como el vestuario usando marcas asequibles o haciendo lo cotidiano. Por ejemplo, es claro que la monarquía inglesa se ha anotado un hit con la nueva cara que le brinda la frescura y sencillez de Kate Middleton.
Para el atormentado mundo de hoy, donde es más fácil salir del closet que de pobre, un hombre sencillo por dentro y por fuera, con una modesta cruz de plata o hierro en su pecho en vez de una de oro adorada con gemas, es lo que gusta. Claramente quiere recuperar el mensaje de la evangelización de los pobres, atender la voz del pueblo, resaltar los valores del catolicismo sobre la roca de la humildad la sencillez y lo mejor, lo hace naturalmente.
Primero lo simple. ¿Tradicionales mocasines rojos marca Prada?, «no gracias, mis mocasines viejos».
Su estilo va más allá de lo que se pone y habla por el, sin esfuerzo todos lo notan. El Papa Francisco desde su nombramiento dejó claro que es el Papa con más estilo de los últimos tiempos.
Su sello es natural, sin poses, los niños lo aman, ama el fútbol como cualquier mortal, no negó su pasado semi-revoltoso, dice lo que los líderes políticos se cuidan de decir, esta concentrado en la pobreza y la riqueza, en los enfermos, en flagelos reales, nada de cadenas de oro, se toma selfies (auto-retratos) con sus seguidores, es el Papa que responde de manera excelente a la dinámica global de nuestros días y por eso sin ser la mas devota me encanta.
Los niños lo aman.

 

Nunca es tarde para bromear.
El Papa esta de moda y es más que merecido ser el hombre del año 2013 por la revista TIMES. Es el verdadero significado de estilo: ante todo la esencia no la apariencia. Y es su esencia la que queda plasmada en su vestuario, pensamiento y acciones. Un líder que en corto tiempo no nos hizo correr a comprar sotanas, ni cruces de hierro pero sus acciones nos hace replantear gran parte de nuestra frialdad.

Hasta la próxima,

Pepa María,

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Imágenes vía google.

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