Muchas veces se habla de innovación para referirse a nuevos desarrollos de producto, bienes, servicios, procesos, métodos de comercialización o de organización. Nuevos o con alto grado de mejora. De todos los tipos de innovación, considero que la más retadora para un líder es la innovación en la gestión.
Foto: Pablo Álamo
Durante los últimos dos años he estado investigando la innovación en varios países con ocasión del Proyecto KITFEM de la Unión Europea, que ha sido liderado por la Universidad CUNEF de Madrid. He pasado dos meses en Argentina, dos en México y otros periodos largos también en Colombia, Paraguay, Uruguay y, por supuesto, España, entrevistando empresarios. De toda esta apasionante experiencia quiero destacar la importancia que tiene -mucho más de lo que me imaginaba- la innovación en la gestión y cómo ésta depende en buena parte de dar voz a los empleados y empoderarlos, especialmente a la gerencia media.
Conversando con los empresarios, predominaba la percepción de que dar voz a los empleados era algo tan necesario como difícil. Entre las ventajas de dar voz a los empleados, sobresalen algunas:
-Mejora el rendimiento de la empresa
Rueda de la Innovacion
-Mejora el compromiso de los empleados
-Ayuda a desarrollar una cultura abierta
-Reduce la rotación laboral
-Mejora la relación con los empleados
-Mejora la toma de decisiones organizacionales
-Ayuda a aprovechar mejor el conocimiento de los empleados
-Impulsa el potencial creativo de los empleados
-Aumentan los resultados de innovación.
Innovación en la gestión y círculos de responsabilidad
De todas las ventajas que hemos observado en nuestra investigación, despunta de manera preponderante la importancia de «dar voz» a los colaboradores y empleados. En efecto, hemos visto cómo empresas han logrado mejorar sus resultados de innovación gestionando el empoderamiento de su gente, por ejemplo, a través de eficientes comités de gestión de mejora continua, fomentando la participación en los círculos de responsabilidad, aumentado el touching, la cercanía, el «face to face», sin excluir a nadie. La tendencia es, si quieres innovar y hacer sostenible la innovación, trabajar en círculos colaborativos.
Las empresas y organizaciones necesitan, hoy más que nunca, innovar en la gestión, y generar una cultura interna abierta a la innovación. No se trata de apoyar cualquier idea creativa sino de suscitar en los colaboradores la conciencia de que todos podemos innovar porque la innovación es todo cambio (no sólo tecnológico) basado en el conocimiento (no sólo científico) que genera valor (no sólo económico), como bien apunta la Fundación COTEC. Por eso, en mi opinión, el mejor ejemplo de innovación siempre será una nueva vida humana. Es impresionante los cambios y el valor insuperable que cada ser humano aporta a su círculo de influencia.
En mi experiencia, algunos empresarios no logran ser todo lo innovadores que podrían porque se dejan llevar por algunos conceptos que más bien frenan la innovación: reducción de costos, escuchar al cliente, satisfacer al cliente, Benchmarking, ventaja competitiva… Como bien muestra Alejandro Ruelas, esos conceptos han acabado por ser la «biblia» de algunos ejecutivos y presidentes que, sin saber que estaban cavando la tumba de la empresa, se obsesionaron por la eficiencia a corto plazo en lugar de generar valor sostenible.
A mis clientes suelo proponer trabajar la Rueda de la Innovación, concretamente nueve factores que hacen que las empresas sean más innovadoras: liderazgo, espíritu emprendedor, conocimiento, cultura intraemprendedora, capacidad de recursos financieros, buenas prácticas de gobierno, trabajo en equipo, motivación y diversificación. En las empresas familiares, añado uno: familiness, ese intangible propio de la familia empresaria que en la práctica se concreta en una serie de fortalezas únicas que deben reconocer, aceptar y desarrollar al máximo.
PhD en Economía y Empresa
De acuerdo con lo que indica de la importancia de la Innovación en las empresas y mas ahora que esta de moda el Design Thinking , en mi concepto falta un complemento a esto y también la retribución al empleado por sus buenas ideas que permiten mejorar la empresa y aunque se podría decir que el empleado esta cuidando su lonchera también es importante la reciprocidad, eso estimula y no solo hace ver el proceso como mas ganancia para el empresario, aunque en Colombia desafortunadamente es la realidad.
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