¿Usted sabía que la gente con más plata no paga el IVA que debería pagar?

¿Usted sabía que cuando una persona de ingresos altos compra una papa, arroz, pan, carne, huevos y verduras no paga IVA por eso? Y no lo hace porque en Colombia nos hemos negado a ponerle IVA a estos productos, porque son de la canasta básica de los hogares, y pensamos que eso afectará directamente a los más pobres; pero la verdad es que, al no hacerlo, permitimos que los que más tienen no paguen los impuestos que deben, y que muchos tenderos nos roben. Permítanme les explico.

La mayoría de los colombianos creen que el IVA en Colombia es del 16%, y eso no es del todo cierto. Hay productos que no tienen IVA, y otros con tasas de 0%, 5%, 10% y 16% dependiendo el producto, sino que se busca cobrar una mayor tasa a los bienes más lujosos. El problema de esta idea, es que ya es muy difícil saber qué es lujoso: ¿el televisor es un lujo pese a que lo tienen más del 80% de los hogares?

Cuando se le pone el IVA a un producto, su precio no aumenta, pero sí nos toca pagar más. Por eso, muchos piensan, que lo mejor es no ponerle IVA a los productos básicos, ya que las personas de menores ingresos perderán capacidad de compra para cubrir sus necesidades básicas. Hoy, los colombianos en promedio pagamos una tasa media de IVA de 5,06%, es decir, que si tomamos todas las cosas que compramos, y calculamos cuánto IVA pagamos y lo dividimos en el total, es como si pagáramos una tasa de 5%, que significa que nos quita un 4% de capacidad de compra. En Ingresos bajos esta tasa es de 4% y en ingresos altos de 10%, pero debería ser incluso más alta, porque no pagan IVA en los productos protegidos de la canasta básica, lo que nos deja con un problema muy complejo: los que tienen mejor ingreso no pagan los impuestos que podrían pagar.

Existe otro problema. Cuando una gran cadena nos vende un producto con IVA lo declara y se lo da al gobierno, pero cuando un tendero informal nos vende algo que tiene el impuesto, no lo declara y se queda con él. El ejercicio es más o menos el siguiente: un tendero le compra a Papas Margarita un paquete en $1.000 y paga un IVA de $160, pagando $1.160 por paquete; Margarita (o Pepsico, como compañía), le declara al gobierno esos $160 y se los paga a la DIAN; pero el tendero sabe que le tiene que ganar un margen a ese paquete de papas y lo vende por $1.500, sin decirle al comprador que de ese pago, $205 son IVA, de los cuales el pagó $160 a Margarita y llegaron a la DIAN, pero él se quedó con $45 del IVA de todos los colombianos. Cosa que ha hecho siempre, y no lo hace de malo, simplemente siempre lo ha hecho así porque es informal, y quizá ni sabe que se está quedando con esta plata.

Así, se ven dos problemas enormes en el tema del IVA: los ricos no pagan lo que deben pagar y la informalidad en nuestro comercio hace que muchos tenderos evadan impuestos y se queden con su plata. ¿De cuánto estamos hablando? En cifras aproximadas, si se pusiera un IVA del 16% a los de mayores ingresos por lo que compran podríamos tener $1,8 billones de pesos de más; y si calculamos sólo en las tiendas de barrio, esa evasión puede ser de cerca de $5 billones de pesos, que no le entran a la DIAN, pero que las personas de ingresos bajos sí pagaron; es decir, como tenemos el IVA, las personas de ingresos más altos se ahorran $1,8 billones al año, y a los pobres algunos tenderos les quitan $5 billones de pesos, que debería ser para financiar salud y educación. Claramente, el sistema es perverso.

¿Qué hacer? Para salir de esto, hay que pensar diferente y sin duda eso no le gusta a mucha gente. Al comprender que el sistema es inequitativo e ineficiente, debemos encontrar la forma de mejorarlo, y una buena opción es ponerle una tasa de IVA del 6% a todas las cosas en Colombia, así se recauda más y el gobierno tiene más dinero para sus gastos sociales, y hacemos que todos paguen según sus gastos.

¿Por qué una idea tan simple no se ha llevado a cabo? Fácil. Porque ningún político le quiere poner IVA a la canasta básica, porque conceptualmente piensa que eso afectará a los pobres y perderán sus votantes.

Por esto no sólo debemos poner una tasa de IVA universal en Colombia, sino crear un sistema donde todos ganen. Se podría proponer en la próxima reforma tributaria el IVA universal, y la formulación de tres políticas fundamentales: inicialmente, por una vez en la vida y solamente una vez en la vida, aumentar el Salario Mínimo un 1% más de lo que el gobierno lo debe aumentar por inflación causada y productividad, así se ajusta el 1% de más que tienen que pagar las personas de menos ingresos por el impuesto. Paso seguido, se sube esta tasa a norma constitucional, para que los gobiernos entrantes no la puedan aumentar continuamente, a menos que hagan 8 debates en el Congreso y aumenten el salario mínimo según el aumento del IVA. Finalmente, crear un sistema de subsidios directos a las personas menos favorecidas en sus servicios públicos, salud y educación, donde se les pueda retornar de manera efectiva el pago de ese IVA, devolviendo más del 1% adicional del impuesto universal.

Sé que suena soñador, pero técnicamente es más sano y tiene efectos muy buenos para todos: las personas de ingresos bajos deberán pagar IVA por la papa, pero el precio de los televisores se les baja en cerca de un 9%, por pasar de un IVA del 16% a uno del 6%, al igual que las neveras, hornos microondas y ropa. Las personas de ingresos altos pagarán esa tasa sin mucho problema y tendrán cosas “lujosas” más baratas, dinamizando la demanda y creando más empleos. Es una idea donde todos ponen, y todos ganan.

Sé que algunos al leer esto comprenderán la idea y otros estarán molestos con la idea de pagar impuestos porque eso es financiar la corrupción de los políticos, y seguramente eso es verdad, y puede ser mejor que los ricos se queden con la plata de esos IVA y compren otras cosas, y que los tenderos se queden con los impuestos que recaudan, no informar que lo hacen y no declarar a la DIAN; pero más allá de esos ladrones que tenemos en la clase política, nuestro deber es pagar impuestos, o de lo contrario no habrá cómo financiar nuestros derechos: si no pagamos el IVA bien, no tendremos dinero para la salud, la educación, la justicia y la seguridad, y no tener eso es mucho más caro que una tasa del 6% de IVA.

Quizá si nos cuentan que hoy los ricos no pagan lo que deben pagan porque los más pobres no pagan el IVA, y que el tendero sin querer nos quita dinero de los impuestos, comprenderíamos que la idea del IVA universal no es para robar al pobre, sino para que otros dejen de robar.

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