Desde el anuncio del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y del dictador cubano, Raúl Castro, a través de los medios de comunicación, de reactivar relaciones bilaterales y la posibilidad de levantar el embargo, solicitud hecha al Congreso por parte del presidente estadounidense, los movimientos diplomáticos han sido constantes a tal punto que esta semana después de 50 años aproximadamente, delegaciones de ambos países se sentaron para dialogar y analizar los pasos a seguir.
Entre las propuestas y debates está la apertura de embajadas, la continuidad de la ley de ajuste cubano junto con la política de “pies secos/pies mojados” que privilegia a los cubanos que logran tocar territorio estadounidense a los que les permite solicitar la residencia permanente un año después, entre otros temas, como los constantes reclamos del exilio cubano que pide al gobierno norteamericano la exigencia a la dictadura castrista del respeto a los derechos humanos y la posibilidad de la apertura democrática del país mediante elecciones.
Mientras que en la isla cubana hay vientos de cambio, por los lados de Venezuela la situación es cada vez peor, producto de un presidente elegido en un país polarizado donde la crisis alimentaria, es la matriz de la debacle política, económica y social, y en donde sobrevivir es el objetivo del día del día, a pesar de los recientes anuncios de Nicolás Maduro de aumentar el salario mínimo un 15% y abrir el debate en torno al aumento del precio de gasolina, uno de los más bajos del mundo, medidas irrisorias ante la grave crisis que requiere de medidas macroeconómicas en diversos sectores ante el aumento del precio de dólar y la caída del precio del petróleo, ambos que parecen estar lejos de aquellos precios de mediados del año pasado.
Por su parte, el embargo de Cuba no parece estar cerca de ser levantando por el Congreso norteamericano, ya que este año la mayoría republicana ha tomado el poder de ambas cámaras, y por tratarse de una ley el embargo impuesto a la isla, es exclusivamente el cuerpo legislativo el encargado de levantarlo y no el Presidente mediante medidas ejecutivas.
Sin embargo, sí el Presidente ve compleja la posibilidad de llegar a un acuerdo con el partido republicano en este asunto seguramente intentará vía ejecutiva levantar progresivamente el embargo, que generó el aislamiento continental durante décadas del gobierno cubano, aumentó la miseria y la pobreza en la isla cubana y auspició el movimiento emigratorio ilegal así como la fuga de cerebros.
Cuando apenas estaba en campaña, no solo los norteamericanos sino también personas de todos los rincones del mundo, vieron en Obama, un gobernante abierto al dialogo y transformador, y es precisamente a través de este tipo de acciones que un gobernante pasa a la historia, por tener la capacidad de cambiar las huellas de un oscuro pasado latente en el continente.
Lo anterior no implica exportar a toda costa el afamado y discursivo modelo democrático de gobierno existente en varios países del mundo, el mismo sistema de poder a través del cual han gobernado la violencia, la corrupción, el hambre de poder, la ignorancia, el populismo, el miedo y las amenazas, demostrando que el supuesto poder que tiene el pueblo es una máscara y una excusa para legitimar un gobernante.
Independientemente del modelo de gobierno en un país, la protección a los derechos humanos es la mínima expresión y condición necesaria para gobernar en un Estado partiendo del respeto por la vida, la libertad, la independencia judicial y la pluralidad del órgano legislativo, condimentos esenciales en cualquier país, que pretende ser Estado.
Pero ¿es acaso Estados Unidos legitimado para hacerlo? el mismo país que tiene la pena de muerte, el que practica la tortura en la cárcel de Guantánamo, el de los escándalos de espionaje en el mundo, uno de los mayores consumidores de droga en el mundo, el símbolo de Coca Cola y Mc Donald´s, cómplice de dictaduras en Medio Oriente por estrategia política… el mismo Estado que hoy en día gobernando por un negro pretende sanar la mayor herida continental del siglo XX.
FORO DE OPINIÓN
¿Cuáles son las medidas que requiere el pueblo venezolano para salir de la crisis?
¿Cuál es el gran beneficio para Estados Unidos y Cuba de reactivar las relaciones bilaterales?
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