Políticus cizañus: especie que carece de vías de extinción

«Hay que reconocer que la yuca está haciendo bien la tarea que la Patria le encomendó: ocupar las tierras abandonadas por la coca.

“Lo cual confirma que la humilde yuca se halla en pie de guerra contra la invencible coca: una audacia que tal vez convierta a la yuca en una aventajada precandidata a la Presidencia de la República.

“Guerra que algunos políticos rechazan porque la consideran un craso error tanto político como agrícola, y una imperdonable falta de cortesía con la coca.

A tal punto que no perdonan el desplazamiento forzoso a que está siendo sometida la coca, pues se preguntan qué se cree la yuca para cometer semejante infamia contra la más ilustre representante de la variada vegetación nacional.

“Y además han empeñado la imaginación en la reparación de los daños psicológicos causados a la coca. Esos políticos le ofrecieron a ésta las matas de remplazo que tenían a la mano. Al cabo, y tras examinar las bondades de todas, la coca decidió que una sola merecía el lujo de sustituirla: la planta de cizaña.

“Así las cosas, los colombianos han de aceptar que a partir de ahora su madurez moral, ética, psíquica y política no dependerá de la yuca en el sancocho, sino de la cizaña en el discurso político”.

Estas son algunas de las consideraciones y recomendaciones que arrojó el estudio La importancia de la cizaña en la formación del pelmazo nacional, llevado a cabo por la Unidad de desmantelamiento de la paz, una dependencia del partido político Centro Democrático.

En realidad, esta Unidad es el grupo de élite encargado por la dictadura suprema de ese Partido para devolver la anhelada violencia a los colombianos.

El estudio destaca la alta calidad de la cizaña que hoy se siembre en el terreno electoral. Y también cuenta que esa calidad se debe a las mejorías que un grupo de ingenieros genéticos y científicos del Centro Democrático introdujo en los cromosomas de la cizaña original.

En síntesis, el informe final refiere que de la planta primitiva, la de la especie Lolium temulentum, y tras esas mejoras, este grupo de avanzada científica obtuvo la especie de cizaña que hoy asombra al mundo entero: la Uribium turbulentum.

Y de cuya eficacia cizañera nadie duda: de ella dan fe millones de personas que, luego de llenar la mollera con la dosis diaria de la cizaña Uribium, esas personas se vuelven súbditos que solo aciertan a balbucear: “Voto por el que diga Uribe”.