La nueva cinta, dirigida y protagonizada por Bradley Cooper, se estrenó hace un poco menos de una semana en Colombia. A Star is Born ha sido sorpresa y ha estado en boca de todos, pero no precisamente por deslumbrar en la gran pantalla.

La ópera prima del reconocido actor de Hollywood se ha quedado corta. A Star is Born no muere por dos cosas: la increíble y emotiva banda sonora y la actuación de Cooper.

El principal problema que tiene el filme es su falta de identidad, quiere ser muchas cosas pero acaba siendo ninguna. Nos transporta a través de su núcleo, en el que conocemos a Jackson Maine (Cooper), un cantante entregado al alcohol quien se topa con Ally (Gaga), una chica de estrato medio que sueña con ser cantante. Pero su guion juega por otros espacios e historias que hacen desviar la atención sobre lo importante, es por esto que se torna excesivamente larga.

De repente, la historia mueve su rumbo y cae en varios lugares comunes y otros no tan comunes que desentonan. Está claro que es un remake, y que sigue siendo superior a la desafortunada ‘A Star is Born’ de Frank Pierson. Sin embargo, no alcanza a emocionar como un conjunto, lo hace de manera intermitente. Y es ahí cuando pierde toda su esencia y se convierte en otra cosa, es casi como si cambiáramos de sala y comenzaran a proyectar otra película. Ese cambio brutal genera una desconexión completa.

Por otro lado, la dirección de fotografía es algo que se rescata de esta cinta. La cámara es una explosión, sigue a los personajes desde sus emociones, basta con mirar la primera escena para sentar un precedente. El uso de tonos rojizos y azules le va muy bien y permite un juego interesante entre lo cálido y lo frío.

La banda sonora es lo mejor que tiene y de seguro ostentará el Óscar el próximo año. Se destacan I’ll Never Love Again, Is That Allright?  y Shallow. Y por supuesto, nadie más perfecta que Lady Gaga para interpretarla. Más que actriz, es una intérprete excepcional, y eso lo vemos a lo largo de toda la historia.

A Star is Born me deja un sinsabor, se esperaba una historia con un romance desgarrador (que lo tiene), pero contaminado por un exceso de tramas que nunca van al caso.

5 claquetazos de 10.

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