Emmanuel Taborda Blandón realizó la segunda versión del Foro Cocina como Acción Social en los barrios de Popular, Pederegal y el Centro Cultural de los Colores. Un encuentro que a mi me pareció fascinante en su concepción y desarrollo. Después participé con él en el primer Festival del Frito en el municipio de El Retiro y, una vez más, me sorprendió la agilidad y el el impacto de un festival que fue delicioso y muy incluyente.
En el bar Guanábano de Medellín, al calor de unas polas, hablamos de lo que sería el encuentro para 2019 y fantaseamos con la idea de tomarnos el centro e implicar a todos sus habitantes en foros, conversatorios, debates gastronómicos e intercambios de conocimientos, porque en Medellín son muchas las experiencias alrededor de la cocina que se viven en casas y lugares que son una apuesta a una alimentación sostenible, ancestral y pegada a los nuevos conceptos de los calderos alternativos. Nombres tan bonitos y sugestivos como Amadas Suculencias, Cocina Intuitiva, La CalleCocina, Ollas y Calderos, Gastronomía y Territorio, Víacocina, Foro Gastronómico y otros más que no conozco, animan una escena alimentaria que crece por los barrios de la ciudad dando la buena nueva: una gastronomía local, técnica y bien desarrollada es posible. Durante tres días el Centro de Medellín será un hervidero de apuestas y viajes gastronómicos.
El Foro contará con 3 días de programación. 30, 31 de mayo y 1 de junio. El primer día es un encuentro académico en el Museo de Antioquia; el segundo, un Mercado de emprendimientos culinarios, proyección de documentales y presentación sonora de salsa en el Teatro Pablo Tobón Uribe y el tercero, una Cena del Encuentro con líderes y representantes de la gestión social de la ciudad de Medellín, en el Hotel Nutibara.
Los alimentos y las charlas tendrán un escenario de lujo para la tercera versión. En el Museo de Antioquia, el hotel Nutibara y El Teatro Pablo Tobón Uribe, comensales, expositores y creadores culinarios harán del Centro el lugar que todos queremos para vivir: animado por los sabores, los olores y los ecos que Emmanuel Taborda y su equipo han convertido en una hermosa realidad cuyo nombre Cocina como Acción Social, es la apuesta más autentica y necesaria para habitar realmente la ciudad.
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