Tras tres semanas espectaculares y una superioridad notable, Primož Roglič se consagró como el campeón de la Vuelta a España.
Ya es oficial: Primož Roglič, el ex-saltador de esquí, la gran esperanza del ciclismo esloveno anexó a su palmarés la Vuelta a España 2019. Tras haber demostrado una solidez enorme, logró derrotar a ciclistas de calidad como Alejandro Valverde, Nairo Quintana y Miguel Ángel López y se ratificó como uno de los ciclistas llamados a ser protagonista de las grandes vueltas de los años entrantes. Son muchas las reflexiones que deja esta Vuelta, aspectos positivos y negativos, polémicas, sorpresas y aprendizajes, que deberán de dar una referencia a los corredores de si es necesario cambiar el plan de trabajo o mantenerse en esa línea.
En primera instancia es llamativo ver un pódium conformado desde el ciclista más joven hasta el más veterano. Con tan sólo 20 años, Tadej Pogačar concretó una actuación impresionante, 3 victorias de etapa, clasificación de los jóvenes y un tercer puesto en la general, un botín muy grande que le pondrá más presión en carreras futuras. Previo al inicio de la carrera, anuncié que donde este chico tuviera un espacio iba a pelear el podio, su gran condición en la escalada, mezclada con su defensa en la contrarreloj podían servirle para hacer algo importante; todo esto añadido a su ofensividad e inteligencia lo fue llevando de menos a más hasta alcanzar ese resultado. Resulta tan interesante ver cómo se empieza a establecer un crecimiento veloz en los ciclistas jóvenes, quienes desde tempranas edades ya brillan en carreras de 3 semanas y demuestran la madurez y experiencia de gente más veterana. Está quedando claro que en ciclismo no hay un rango de edad para lucirse y de esa forma el círculo de candidatos de grandes vueltas se sigue ampliando.
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El otro bando está representado por Alejandro Valverde, quien a sus 39 años logró su noveno podio en Giro, Tour y Vuelta. En cualquier deporte es difícil encontrar a un competidor de tan alta edad, mantenerse en un estado de forma esplendoroso y compitiendo al máximo nivel. En el presupuesto, no se esperaba ver a Valverde en el pódium, pero después de Roglič fue el más regular de la carrera y en sus días malos no cedió mucho tiempo. Con él, queda también una sensación de que en la última semana pudo haber hecho más, pero decidió asegurar más su segundo puesto y no se atrevió a desestabilizar al líder. Sea como sea, su labor fue plausible.
Nairo Quintana acabó cuarto de la general y se despidió con un buen resultado del Movistar. Lo particular es que, en un terreno ajeno a sus características, pudo hacer el mayor daño y ese fue el llano. Las formas que está encontrando el boyacense para mostrarse son interesantes, puesto que, al no tener ese golpe de pedal en las ascensiones, se dejó ver en esas etapas parecidas a unas clásicas gracias a su inteligencia y ubicación. Esa famosa fracción donde sacó 5 minutos, fue la prueba de sus ganas de seguir siendo protagonista y complementarse como ciclista. Considero que es muy difícil volver a verlo en el nivel de años anteriores, pero días como esos tienen un gran valor y son una garantía de que a pesar de que no tenga las piernas en las trepadas, lo vamos a ver buscando otros caminos para volver a la pelea.
Con “Supermán” López el caso es muy especial y amplio. Partiendo como un gran candidato para llevarse el título, tuvo la valentía, pero asimismo algunas adversidades, días malos y una falencia táctica de su equipo. La suerte no lo acompañó en la novena etapa con la caída que tuvo, día en el que pudo haber dado un golpe importante en la general y donde todas esas pérdidas pudieron haber sido ganancias. Desde luego, este factor no fue tan influyente, también hay que reconocer que falló en días claves como en Los Machucos y en El Acebo, que en gran parte lo privaron de conquistar la Ronda Ibérica. Su equipo, que se destacó por los buenos planteamientos tácticos en etapas de montaña, le regaló el triunfo a Roglič el día de los vientos, ya que si hubiesen jugado con cabeza fría, lo lógico hubiese sido dejarle toda la responsabilidad en la persecución a él y rematarlo con un ataque, pero por el afán de que Nairo no les sacara más tiempo salvaron al esloveno de perder el primer puesto, eso tampoco lo hace el peor equipo de La Vuelta, pero ese error fue garrafal.
La valentía de López no tuvo recompensa, se requiere de mucho valor para tomar la iniciativa y siempre ser el primero que ataca, el que se atreve a probar de lejos y ponerle picante a la carrera, quedan muy pocos así, Miguel Ángel es de esos ciclistas que tanto se añoran de tener de esos que corran con sensaciones y que arriesguen todo en una época tan marcada por la tecnología, donde todo es a base de vatios y órdenes desde el pinganillo. Para que algún día esos ataques fructifiquen se necesita no sólo un diseño eficaz de la estrategia, también que se pueda aplicar, ya que no siempre es fácil que todo salga de acuerdo a lo planeado previamente. Esa combatividad y ser el más ofensivo la dan una buena nota a su desempeño en esta competencia.
Finalmente, hay que hablar del gran campeón, del mejor con diferencia, Primož Roglič. Reunió todos los requisitos para ganar una grande, nunca mostrar algún síntoma de debilidad, ser destacado en todos los terrenos, tener un gran equipo y dar golpes certeros en momentos claves. Como explicaba en la nota pasada, este éxito del pedalista del Jumbo Visma radicó en la diferencia marcada en las etapas claves de la segunda semana, esa fortaleza que golpeó anímicamente a sus rivales que veían como él los dominaba en la montaña. Trabajó duro, superó las adversidades del comienzo de carrera y nunca se desesperó, su frialdad fue determinante y tomó muy buenas decisiones. Claro, también se aprovechó de los errores de los rivales y de que algunos lo vieron insuperable y decidieron no sacrificar su posición en pro de hundirlo.
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Hace 12 años se proclamó como campeón mundial junior por equipos de esquí y también sufrió una escalofriante caída que pudo haberle costado la vida (Puede verla aquí). Decidió darle una oportunidad al ciclismo y ya se ha consagrado como uno de los mejores ciclistas del mundo y con justicia se convirtió en el nuevo rey de La Vuelta, sin lugar a dudas, el mejor salto de su carrera, ¡Felicitaciones!
Alejandro Matiz
@amatiz12