Ingresa o regístrate acá para seguir este blog.

Por @Silviadan

Post Card from Onondaga County Public Library collection

Post Card from Onondaga County Public Library collection

Syracuse_1913_flirt.jpg ‎

Para que  exista una conquista,  debe haber un conquistador y un conquistado. Por lo general el primero es hombre y el segundo, claro,  mujer.

Para lograr su cometido el conquistador debe buscar la forma de hacer sentir al segundo   buscado,  consentido, atendido,  valorado, validado y apreciado.  Se usan las mejores habilidades y destrezas. Se apela a las flores, los versos, los regalos, las  conversaciones, las invitaciones, las frases bonitas, las sorpresas, y  las canciones.  Se va midiendo el efecto en el objeto de la conquista y de acuerdo a las reacciones,  se cambia la intensidad, las formas y los tiempos.

CREATOR Muybridge, Eadweard, 1830-1904, artist

Es una lucha de poderes. Un baile. Un tango. Un juego.

Quien está siendo conquistado, por lo general se resiste un poco. Se esconde y se controla para no caer.

Es un proceso que puede durar horas, días, meses. En algunos casos, años.

Lo particular del asunto es que una vez hay un “conquistado”, el que conquista puede perder interés. Logrado el objetivo, abortada la misión! Y entonces arranca una nueva.  La conquista se convierte entonces en  un “bien” de acumulación, que además representa poder,  fuerza, dominio.

Por el contrario, quien se ha dejado conquistar pierde control y queda en muchos casos a la orden de quien logró, como dice el diccionario, “capturar el amor del objeto de conquista”.  De una u otra forma, uno gana y  otro pierde.

La conquista hace parte de todas las historias de amor. Es la primera etapa de una relación y por eso es tan atractiva. De su curso depende, en muchos casos, el desarrollo  y futuro de la misma.

Claro, hay unas espontaneas, otras trabajadas, y otras ficticias, mentirosas.  Las más profundas son las primeras. Esas que se dan sin pensarlas demasiado. Las últimas son mezquinas y se crean a partir del ego. Son aquellas que practican quienes se la pasan de “conquista en conquista”.

¿Te has preguntado,  en que grupo estas?

Compartir post