Un Millos inofensivo (Millos 0 – Santafé 1)
Aunque dadas las actuales circunstancias del equipo, luego de la salida de su principal figura en el último año, lo de ayer enfrentando al rival de patio no resulta sorpresivo, indudablemente el primer contacto de Millonarios, versión segundo semestre 2014, con su hinchada dejó más dudas que expectativas.
Con muy poco el rojo se llevó los tres puntos en disputa. Aunque en buena parte del juego Millos contó con la posesión del balón y con una mejor disposición del equipo por buscar el arco rival, quedó en evidencia la ausencia de un goleador de jerarquía en el frente de ataque.
Lillo inició el partido con Anderson Plata y Yuber Asprilla como delanteros. Se esforzaron, corrieron y lucharon pero ninguno de los dos cuenta con las características que necesita un equipo de la importancia de Millonarios en su línea delantera.
Respecto a Fernando Uribe, es muy pronto para dar un veredicto definitivo frente a lo que puede aportarle al equipo, sin embargo siento que su presencia inspira más respeto y fortaleza para enfrentar a los defensas rivales. No obstante, ayer no contó con mayores posibilidades de mostrarse, porque los responsables de generar jugadas de ataque tuvieron una noche para el olvido.
Habrá que esperar que la apuesta que hizo el club por el juvenil delantero peruano Andy Polo resulte efectiva. Entiendo que el mismo Lillo lo sugirió, y lo que se ve en los videos da cuenta de un futbolista de buena técnica, rápido, habilidoso y de buena talla. Sin embargo, sus números no son los de un goleador. En 87 partidos jugados en su país convirtió 13 goles, y tras su traspaso al Inter de Milán no registra en su palmarés juegos oficiales disputados en el último año.
En esos videos suele mostrarse lo que conviene mostrar. Con un video bien editado, de los goles que Eric Moreno convirtió en Millos, y un buen representante de por medio fijo lo habían logrado vender a un equipo más grande de Europa.
En conclusión, el Millonarios que vimos anoche en el Nemesio no es un equipo acorde con las obligaciones que trae este segundo semestre, con torneo internacional de por medio. Esperemos que la dirigencia reconozca las debilidades del equipo, y se esmeren en traer con celeridad y certeza los jugadores que se requieran para hacerlo más fuerte y competitivo.
Adiós a la “Saeta Rubia”
En las últimas horas se conoció el fallecimiento en Madrid del legendario jugador Alfredo Di Stéfano, considerado uno de los mejores futbolistas de la historia, con quien Millonarios tuvo la fortuna de contar en sus filas durante la denominada época del Dorado.
En cuatro años vistiendo la azul, el argentino disputó 101 partidos, anotando la nada despreciable cantidad de 90 goles. Durante su paso por Millos logró encumbrar al equipo hasta ser considerado por algunos como uno de los mejores del mundo.
Por el lustre que le dio a la historia azul y porque siempre mostró gratitud y reconocimiento con su paso por el fútbol colombiano Di Stéfano será por siempre considerado el máximo ícono de la rica historia de Millonarios. ¡Paz en su tumba!
Gracias Selección Colombia
Entiendo que para muchos de los más recalcitrantes hinchas de Millonarios es casi un pecado referirse o alegrarse por los logros de un seleccionado nacional de fútbol.
De hecho, debo admitir que después de fracaso y desilusión de la Selección Colombia en el Mundial de USA 94, lo que sucediera con el combinado nacional no despertaba en mí mayor interés. Sí me alegraba con sus victorias, pero me importaba muy poco cuando perdía. Ningún seleccionado lograba despertar mi interés.
Sin embargo, la actuación de estos muchachos que representaron tan dignamente al país en el Mundial de Brasil logró reavivar en mí, como sé que en muchos de ustedes, el fervor por la camiseta amarilla.
Por el juego exhibido, por la seriedad con la que afrontaron el torneo, por el respeto, pundonor y dolor de patria con que disputaron cada uno de sus encuentros, lograron enardecer y exacerbar el sentimiento patrio, unir a los ciudadanos del común alrededor de un mismo color y de una misma causa y durante casi 20 días permitieron dibujar sonrisas en los rostros, generalmente sombríos y preocupados, de la mayoría de los colombianos.
Por lo anterior, me permito tomarme la licencia, con el debido respeto por los “odiadores” de la Selección – si es que aún quedan- de expresar mi sentimiento de gratitud y reconocimiento por esos futbolistas y ese cuerpo técnico que pusieron en alto el nombre de nuestro sufrido país, y nos hicieron olvidar, durante tres semanas, tanto dolor, miseria y sufrimiento que lamentablemente padecemos en nuestro diario vivir. De mi parte ¡OVACION DE PIE! para cada uno de ellos.
Cordial y albiazul saludo
@azulhstalatumba
Comentarios