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Londrinazo.jpgUn pequeño recuento para aquellos que no se acuerdan bien de qué les hablo. Era el año 2000 y se jugaba el Preolímpico Sub 23 en las ciudades brasileñas de Londrina y Cascavel. La Selección Colombia estaba en el grupo 1 del torneo junto a Brasil, Chile Ecuador y Venezuela. 9-0, eso es todo lo que voy a decir por ahora.

El equipo nacional, dirigido por el técnico colombiano Javier Álvarez, venció 4-2 a los ecuatorianos en su primer juego y empató con los venezolanos en el segundo. El tercer partido de Colombia, que contaba con jugadores como ‘Pepe’ Portocarrero, Mayer Candelo, Fabián Vargas, ‘Tigre’ Castillo, ‘Piña’ Posada y demás figuras de la época, era frente a Chile.

El juego frente a la selección austral fue una cosa de locos. Yo, los seguidores y los periodistas de la época, todos elogiamos a Colombia como después de esos 90 minutos en el Monumental de Nuñez la tarde del 5 de septiembre de 1993. Un contundente 5-1 sobre los chilenos nos dejaba primeros del grupo y, por lo menos para nosotros, clasificados.

El próximo juego era contra Brasil, y, como lo dijo Javier Hernández Bonet: «Colombia, primero con +6 goles. Tiene 7 puntos, los mismos que tiene Chile y que tiene Brasil… De manera que tendríamos que perder con Brasil por goleada…«.

Cuenta el libro del ‘Bestiario del Balón’ (del cual obviamente hablaré luego, pues es el primer libro colombiano de esta clase) que «la noche previa al encuentro y ante la intranquilidad de algunos jugadores que hasta ese día eran suplentes, el buen Javier entró en escena… les ordenó irse a la cama con la indumentaria que habrían de emplear el día siguiente: camiseta, pantaloneta, medias y ¡guayos!». 

Será posible que un técnico de fútbol pida eso. Si es así, ¿se imagina qué le dirán al los astronautas el día antes del viaje al espacio? «Duerman con el traje y el casco para que estén más tranquilos»… no lo creo.

En fin, después de 90 minutos de fútbol, no por el lado de nuestra selección, Brasil 9-0 Colombia. Como lo dijo Fabián Vargas: «Después de la gran hazaña, viene LA GRAN CAGADA» y de que tamaño, ¿no?

En fin, mi intención no era hablar del hecho en si, sino de la manera como el programa ‘El Siguiente Programa‘ recuerda ese penoso episodio del fútbol colombiano. Creo que, además de ser la mejor manera de ver esto, nos recuerda que del triunfalismo solo queda ‘LA GRAN CAGADA‘.

 

 

Ahh…, que quede claro. Me gusta la forma como este par de caricaturas recuerdan la salida colombiana del Preolímpico Sub 23 del 2000, eso no significa que comparta todo lo que dicen. Ya saben, por si las moscas.

Finalmente, será que después de esto y de lo hecho en USA 94, ¿alguna vez volveremos a ser una fanaticada triunfalista?

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