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Muchas de las personas que lean esto terminaran calificando como ‘ignorante’, ‘básico’ o ‘simple’ a quien escribe, pero la verdad es que no importa, pues, como dice el popular adagio, ‘el que gana es el que goza’.
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Hoy quiero dedicarle estas letras a un equipo de fútbol que ganó una de las copas más importantes del mundo a punta de orden, inteligencia, efectividad, trabajo y entrega. Jugadores que, a pesar de que el mundo entero los calificó como dueños de un fútbol feo y falto de estética, superaron todos los obstáculos y ganaron.  Un grupo de hombre que entendió que lo importante no es tener el balón más que el contrario, sino que es utilizarlo mejor el tiempo que se tiene. Le dedico este texto al ‘Internazionale de Milan’, el campeón de Europa.
Jose Mourinho, el polémico técnico portugués que celebró con intensidad en el Camp Nou (el estadio del ‘invencible’ Barcelona) ,  fue el encargado de liderar un onceno que, aunque no gustó, terminó obteniendo lo que todos sus críticos deseaban para sus equipo, el título de la Liga de Campeones.
Muchas de las personas que critican a este equipo comienzan por decir que sólo se defiende y que no tiene el balón. ¿Y qué? ¿Quién dijo que eso está prohibido en el fútbol?
Es verdad que el Inter casi no tiene el balón durante un partido. Durante la transmisión de la final entre el equipo italiano y el Bayern de Munich, Fernando Niembro decía que el promedio de posesión del balón del Inter durante la ‘Champions’ era de 45%. Es más, según los datos que me mostraron  durante el partido, los dirigidos por Mourinho tuvieron el balón el 33% del tiempo durante la primera mitad y el 31% durante la segunda mitad.
Según muchos esto es algo negativo, pues para muchos un equipo que no es dueño de la pelota no merece ganar. Sin embargo, a mi parecer, esto demuestra que el Inter es un equipo con un altísimo nivel de efectividad. El Inter no necesito de la pelota por mucho tiempo para salir campeón de la Liga de Campeones. Es más, para ganar la final sólo fueron necesarios dos jugadores en el ataque: el argentino Diego Milito y el holandés Wesley Sneijder (sólo en un par de jugadas los acompaño Samuel Eto’o).
¿A quién no le gustaría que su equipo ganara títulos, a pesar de tener un muy bajo promedio de posesión del balón?
El otro argumento de los críticos del actual campeón de la Liga de Campeones es que se defiende demasiado y con muchas personas. Dicen que hace la fácil, pues, para muchos, defender es poner un montón de jugadores cerca del área y listo. 
Defenderse es difícil y es mucho más complicado si se hace tan bien como lo hace el equipo italiano. Para poder hacer lo que hace el Inter es necesario un inmenso orden táctico y un gran estado físico. Si es tan fácil defenderse, ¿por qué no todos los equipos lo hacen tan bien como el Inter?
Hablemos de uno de los que mejor defiende. Ver jugar a Esteban Cambiasso es un deleite para los amantes del fútbol inteligente. Él, como muchos de sus compañeros, además de ser un incansable de la defensa, sabe muchísimo con el balón en sus pies y cuando tiene el balón sabe qué hacer con él. El volante argentino (el cual no irá al Mundial gracias a una muy estúpida decisión de Maradona)  es un ejemplo perfecto de lo que hace el equipo italiano: defiende con mucha concentración y, cuando tiene el balón, ataca con precisión y velocidad.
Para terminar, quiero preguntarle a los críticos del Inter: ¿Quiénes son más felices hoy, los hinchas del Inter o los de cualquier otro equipo que juegue ‘más lindo’? ¿No le gustaría que su equipo jugara y ganara como el equipo italiano?
Juan SQ

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