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A pesar de estar presente en Colombia desde hace más de 10 años con algunas unidades vendidas, respaldadas en su momento y hasta hace poco por un importador que no logró  -por motivos que desconozco-,  darle a la marca la expansión que merece, se instala ahora sí con pies de plomo la marca Seat en nuestro país, gracias a que todo el proceso de importación, venta, y postventa es implementado por Interamericana, la misma compañía encargada de hacer lo respectivo, con los vehículos Volkswagen.

Perteneciente al grupo VW desde hace casi 19 años, es una de las marcas más conocidas, fiables y reputadas en Europa. Su  ingeniería, al igual que Skoda,  se basa en las plataformas y conjuntos mecánicos de última generación de Volkswagen pues por ejemplo la van compacta Altea, y el modelo León  -de cuya prueba hablo más adelante-, comparten sus elementos mecánicos con el Volkswagen Bora y el Golf V (del cual ruedan pocas unidades del actual modelo GTI). Podemos decir entonces que por debajo de sus líneas, tanto Seat, como Volkswagen y Skoda, son iguales en mucho más de un 80%; buenos recuerdos y satisfaccion actuales para los dueños de VW y Skoda  -por su  duración y confiabilidad-,  y así mismo, tranquilidad futura para los clientes de Seat.

Todos los modelos de la compañía reflejan perfectamente su filosofía: autoemoción. La palabra acoge básicamente  la deportividad, y el diseño. Son expresivos, individuales y muy atractivos; por eso es que más adelante en el tiempo a primera vista, usted siempre se dará cuenta de cual marca  y cual modelo es el que usted verá circulando por nuestras calles. El León (lo pueden conocer en www.seatcolombia.com), un Hatchback de 5 puertas con apariencia de Coupé  -la cerradura de las puertas traseras «no existe», y su techo es bien descendente y bajo-,   distribuye sus 4,32 metros de longitud poniendo los 2 ejes lo más al extremo posible, dejando espacio para unos voladizos muy pequeños.

Sus amplios y redondos guardabarros, con mayor prominencia de los delanteros, alojan unos rims que van            -dependiendo de la versión-  desde las 16 hasta las 18 pulgadas de diámetro. Su techo es bien bajito, formando casi una curva, a medida que se avanza hacia atrás. Y, como casi siempre, la lámina predomina bastante sobre los vidrios laterales, de cuya base parte hacia abajo el inicio de las puertas, con una parte inicial convexa.

Esto forma desde atrás, una línea musculosa a lo largo, que se funde con las nervaduras del capó en la parte final, terminando en una curva que hace de soporte para la persiana, la cual forma casi un óvalo alojando en el centro la gran S de la compañía. Las chapas de las puertas traseras se camuflan con el color negro de las pequeñas ventanillas de policarbonato, ubicadas en el extremo de los costados. Las luces son ojos bien razgados que se extienden desde esos nervios de la tapa, hasta terminar prácticamente en la parte lateral. Atrás, la compuerta del baúl tiene trazos redondeados, aloja un vidrio pequeño  -se dificulta un poco la visibilidad-,   y es relativamente pequeña. Los stops alargados acompañan en deportiva armonía al resto del conjunto.

En el interior, su tablero tiene una vicera poco prominente, donde se alojan los relojes de revoluciones, velocidad, gasolina etcétera, con una buena legibilidad; en la noche, estos iluminan en blanco, con las agujas indicadoras en rojo, acentuando la calidad y deportividad.Timón de 3 radios en buen cuero, y a la derecha, los habituales mandos del radio  -6 discos-,  y la climatización, cuyas funciones se pueden leer en una  pantalla común ubicada hacia abajo, la cual distrae algo nuestra debida atención en el manejo. Los plásticos son duros, y transmiten calidad visual sobretodo en el negro del cual hace parte la mayoría de la parte superior del tablero.

Las puertas van en  2 tonos de gris, con vinilo, mientras que las sillas con buena comodidad, se fabricaron con una tela muy bonita y deportiva, la cual para bien, no deja deslizar nada el cuerpo. Al volante da la sensación de poco espacio entre el tablero y el vidrio panorámico, debido a la inclinación del mismo, y a lo bajo que queda el techo. Pero esto no es obstáculo para el espacio interior, al contrario: la habitabilidad es muy buena en altura, a lo ancho, y sobretodo en el espacio para las piernas. El baúl es de los más capaces de la categoría con 385 litros, por encima de los 340 del Citroen C4, de los 320 del Mazda 3, y de los 350 del Megane II 5 puertas entre otros; por encima está su primo, el VW Golf V con 400 lts.

La unidad probada monta  la mecánica de 2 litros, con el sistema de inyección directa produciendo 150 caballos acoplado a una caja automática Tiptronic de 6 cambios, algo que muy pocos de sus rivales por ahora, equipan. Éste tipo de inyección ayuda al mejor rendimiento del torque y la potencia,a  la economía de consumo, y a la reducción de las emisiones contaminantes. Pero la máquina no es tan refinada como otras tal vez por el sistema puesto que, en marcha mínima, transmite pequeñas vibraciones al igual que al girar por encima de las 5000 revoluciones  -nada molesto-,  hasta el corte de encendido en las 6500. Eso sí, en esos regímenes, el sonido es algo sugestivo acorde con lo que se espera en un Seat.

Su respuesta es buena en todas las rpm, responde con un buen torque en bajas rpm, y se va de manera lineal hasta su máximo giro. Gran parte del buen performance se debe a la caja de 6 cambios. Al ser mayor la cantidad de relaciones, éstas serán más cortas, ayudando en la aceleración del auto. Las relaciones de la caja son excelentes, pues para el rendimiento del motor, de la 1a a la 3a por lo menos, son bien cortas; inclusive más que muchos mecánicos de 5.  El carro arranca muy bien, acelera como los mejores  -me pareció prácticamente como si no fuera automático-,  y se enfrenta a difíciles cuestas con total respuesta y soltura.

Al demandar el cambio anterior pisando a fondo, lo hace con relativa rapidez, pero es un poco brusca al engranar la primera marcha, y como que al mínimo movimiento del pedal, empieza a hacer cambios de manera casi constante, en lugar de quedarse quieta, cuando las circunstancias lo ameritan. Como la gran mayoría de las actuales, permite un manejo manual que lo involucra a uno más en la conducción, pero el manejo de la palanca no me pareció tan intuitivo, pues para subir los cambios se dan pequeños golpes hacia adelante, y viceversa. Y si usted no hace el cambio al girar al máximo ella lo hará por usted. Los puristas no estarán muy de acuerdo con que «los controlen»; a otros, les puede parecer mejor y más seguro. En el modo sport en el pique, responde un poco más rápido.También, se adapta a su estilo de manejo, y baja los cambios al ir reduciendo la velocidad: las ventajas de la electrónica y la ingeniería contemporáneas.

En marcha, transmite aplomo, y en zonas de curvas lentas y medias, seguridad, puesto que se inclina muy poco; es de esos autos que le hacen sentir a uno su centro de gravedad bien bajo. La suspensión multilink trasera del grupo VW ayuda en esto, así como también la puesta a punto de espirales y amortiguadores. Hay sensación de control con unas suspensiones que sin ser blandas, permiten un buen manejo del confort, absorviendo muy bien las pequeñas y medianas irregularidades. Es en ese tipo de vías donde también se nota la rigidez de la carrocería-estructura, típica de los modelos del grupo.

La dirección al estar quieto, tiene un tacto totalmente electrico y suave, perfecto para estacionar, casi como si estuviera levantado del suelo. A medida que se aumenta la velocidad, la asistencia y el tacto cambian totalmente: adiós sensación eléctrica  -voy al mando como piloto-,  se endurece lo suficiente, y tiene una buena tendencia al autocentrado. Los frenos son potentes, con un recorrido del pedal justo, y con un buen control a la hora de oprimirlo. No se pudo probar la resistencia a la temperatura presente durante exigente uso, pero supongo que está dentro de lo normal de una marca reputada.

¿Seguridad? Airbags frontales, laterales y de cortina, abs, control de tracción, rigidez estructural con las consabidas y mejoradas zonas de deformación, etc. La información sobre todo esto y más, la encuentra en la página de la compañía.

Seat es una marca que tiene con que. Esperemos que las personas en busca de un modelo de cualquier categoría, hagan una visita a sus vitrinas puesto que es una de las marcas a probar y tener en cuenta, antes de tomar la buena y agradable decisión de comprar un vehículo nuevo.  Un buen año 2009 para todos ustedes.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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