Medellín – Colombia. Con la presencia en la plaza de un
porcentaje cercano al medio aforo comodísimo y una sexteta de actores
principales en el ruedo se llevó a cabo el Festival Taurino nocturno en
la capital antioqueña.
Se corrieron astados de la dehesa de La Carolina,
justamente presentados para el festejo y desiguales de comportamiento,
destacándose el lidiado en primer lugar, que fue bravo, noble, fijo, con
calidad, pero que desafortunadamente carecía de fuerza en sus remos
delanteros para sostenerse en pie. La sexteta de coletudos conformada por un cartel de actuantes españoles, colombianos y el francés Castella.
Manuel de Jesús – El Cid
(chaquetón tacaco y calzona gris, botines negros – novillo 324
Collarejo de 401 kilos) muy bien con la capa, bajando las manos,
templándola embestida. Con la muleta la labor tuvo que ser de enfermero,
pues su oponente demasiado flojo de remos perdía la estabilidad con
mucha frecuencia. Templo y consintió tratando de dar aire y respiro al
astado de buena calidad, fueron tandas de muletazos largos. Por el
izquierdo los muletazos tuvieron algunos altibajos porque el toro se
sobreponía a su merma física y se rebosaba en la muleta. Dos orejas.
Sebastián Castella
(traje de paño, negro, camisa blanca, pañoleta negra en su cuello y
sombrero gardeliano negro – novillo Guionista de 426 kilos) con el
capote ejecuto cuatro bonitas verónica y una media de mucha calidad,
mientras que el toro no acababa de entregarse a los cites. Con la muleta
en su manos inicio por bajo muy cerca a las tablas. Las embestidas de
mansedumbre acortaron la faena y la espada llegó muy rápido. Hubo
voluntad frente a la mansedumbre.
Javier Castaño
(traje corto azul petróleo, gorrilla café y botos caperos cafés –
novillo 311 Engreído de 426 kilos) con un capote eléctrico inicio su
labor en el festival, varias verónicas y dos chicuelinas a un rápido y
codicioso toro. Con la muleta tuvo demasiados altibajos. Toreo marginal
mezclado con muletazos de buena factura, eso si todo con demasiado
velocidad. Mentiroso con la muleta. Con la espada dos comparecencias.
Luis Bolívar
(traje corto con chaquetón gris, calzona negro y sombrero cordobés gris
– novillo 307 Camarero de 381 kilos) tres largas y media de buena
calidad fue el saludo del torero nacional. La muleta en manos de Luis
Bolívar buscó el sitio por ambos pitones, pero el descastado toro
descompuso la labor que quiso ser entonada pero no alcanzo notas altas.
La espada y el descabello tuvieron que ser usados uno tras otro.
Iván Fandiño
(traje corto gris con botines cafés – novillo 303 Gladiador de 413
kilos) nada prácticamente con la capa debido a la falta de fuerza y la
cojera de su para izquierda. Con la pañosa busco dar distancia largas
pero el toro era tardo al cite y al momento de llegar no duraba mucho en
la repetición. La fórmula le funciono a Fandiño y el toro llegó a durar
hasta 5 muletazos seguido. Las distancias, el temple y la hondura en
los muletazos brindaron buen espectáculo. La espada fue certera y la
petición unánime entregó las dos orejas al diestro español.
Luis Miguel Castrillón
(traje corto azul oscuro, camisa azul celeste, botines cafés – novillo
305 Mesero de 353 kilos) con dos verónicas de calidad inicio su labor el
novillero antioqueño. El Santa Coloma mostró su ascendencia y dejó en
el ruedo una suma de complicaciones que se estrellaron con los deseos
del nobel torero, incluso un fuerte revolcón se llevó al equivocar la
lidia la tomar la muleta en la mano izquierda.
Lo que no se vio en el Festival de Medellín
Medellín – Colombia. A
un festival que ya hace parte de los afectos de todos los taurinos y en
general de la aficionados antioqueños acudimos con el ánimo de
divertirnos y detallar todo aquello que se escapara de la mirada del
común del público y esto es lo que no se vio.
Asistieron al tradicional festival
ganaderos de España, Portugal, México y Colombia, quienes hacen
presencia en el congreso internacional de ganado de lidia que se realiza
por estos días en las ciudades de Manizales y Medellín respectivamente.
Los seis actuantes acompañaron el desfile de la Virgen Macarena.
Un grupo de muchachos con las camisetas de toros si, también acompañaron cerrando el desfile.
Cerca de media plaza cómoda asistió al festejo.
Luego de la procesión los jóvenes leyeron un manifiesto en pro de la fiesta brava.
Los gritos de Toros si, Petro no siguieron en la ceremonia.
A Carlos Mario, el tradicional alguacilillo de la ciudad de Medellín se le encabrito su caballo y por poco vemos un percance.
La amazona se quedó cerca del burladero de matadores «estorbando» un poco luego de terminar el paseíllo.
Muy largo el previo del animador antes de iniciar el festejo.
Todos los matadores saludaron al público menos Castella, que no se destoco de su sombrero gardeliano.
Estos patrocinadores regalaron los toros del festival: Bellota, Kenworth de la Montaña, Colanta, Dislicores y Fedegan
Resultados
del festejo: 1. Dos orejas, fuerte ovación para Cornalejo. 2. Silencio a
Castella y fuertes pitos al manso toro. 3. Silencio a Castaño y
división de opiniones para el toro. 4. Silencio a Bolívar y división de
opiniones al toro. 5. Dos orejas a Fandiño y división de opiniones para
el toro. 6. Palmas para Castrillón y pitos al toro.
El segundo toro se mostró cojo de la «mano» derecha.
Vuelta canela por parte de Collarejo, primero del festejo.
El contenido de una bota se quedó prácticamente en la garganta de El Cid durante su vuelta al ruedo en el primero de la noche.
El segundo de la noche partió plaza y se estrelló contra un burladero partiéndose su pitón izquierdo.
Con tan solo un muletazo Castelal pidió a su mozo de espadas cambiar de muleta por una más larga.
Discusión
entre el alguacilillo y Pedro el fiel mozo de espadas de Castella,
porque el primero reconvenía a los subalternos que tocaban al toro
tratando de hacer que doblara rápidamente, luego de la mala condición
mostrada durante la muy poca lidia.
El tercero de la noche presentaba cojera de su mano derecha y su pata izquierda.
Cojera del quinto del festejo en su pata izquierda.
Providencial el quite de El Piña, cuando Chiricuto perdía los pasos y caía en el ruedo, luego de banderillear.
Antes de saltar al ruedo el sexto un par de aficionados sacaron una pancarta «Viva la fiesta brava»
Un
aficionado de los tendidos altos tiro al ruedo una botella y el público
lo recrimino hasta tanto la autoridad lo saco de los tendidos, cosa que
no pasa en otros lugares públicos.
El Piña pierde los pasos al quedarse en la cara del seto y providencialmente Sebastián Castella le salva con un quite.
Lo Bueno, Lo Malo y lo Feo del Festival Macareno
Medellín – Colombia. Luego de un día pasado por
agua, lo que indudablemente le quito afluencia de público a la plaza, a
pesar de ser techada, se llevó a cabo el tradicional festival taurino a
beneficio del Hospital San Vicente de Paul en la ciudad de Medellín.
Como siempre se vivieron aspectos buenos, malos y feos
, y estos son algunos de ellos:
Lo Bueno
La procesión de la virgen de la Buena Esperanza Macarena.
El himno de la ciudad de Medellín, a grito fuerte y firme.
El piquero de El cid midió bien el toro, poca vara luego de una vuelta canela.
La calidad del Collarejo, primer novillo de la noche, toro muy importante.
El tercero del festejo, desaprovechado por Javier Castaño.
El
quite de Wilson Chaparro – El Piña al quinto de la noche en momentos en
que el vallecaucano Chiricuto callera a la arena luego de colocar un
par de banderillas donde el toro apretó mucho.
La faena de Iván
Fandiño, que gozo de la inteligencia para sacar hasta el último muletazo
de un toro que no se encelaba con los engaños.
El quite de Castella a El Piña en sexto de la noche, al caerse luego de colocar un primer par de banderillas.
Lo Malo
El poco público que asistió a la plaza.
No se le concedió la vuelta al ruedo al primero del festejo, toro bueno.
Claro que si el público no pidió la vuelta el palco en buen criterio debió concederla.
El 2 toro del festejo se estrelló contra un burladero y se partió desde la madre el pitón izquierdo.
El encierro fue disímil en su comportamiento.
El sexto y último ejemplar de la noche. SantaColoma con complicaciones y defectos
Lo Feo
El matador Sebastián Castella no saludo al público en los previos al inicio cuando la parroquia ovacionaba a los actuantes.
Javier Castaño fue engañoso en su faena de muleta, no entendió al toro y «regalo» toreo de provincia lejana.
El carrusel por parte de El Piña y Jaime Mejía.
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