Mentiríamos al decir que no fuimos motivados a ir a este concierto, para sentir al menos en cada baquetazo, algo del sonido Ramone, para darnos un baño aunque tarde, en esas aguas vertiginosas. Oh sorpresa!!! El testimonio rebasa las antiguas escrituras.
El Teatro Las Vegas Nevada, anclado en un lugar no apto para, mojigatos, cardiacos o radicales, ya daba pie para prejuicios e incluso para revivir batallas campales, como la previa al show de los Misfits, hace unos años. Sin embargo nada de esto sucedió, el ambiente estuvo caliente pero gracias a las dos agrupaciones colombianas Chite y Bombillos Peludos, que prendieron la fiesta con energía y canciones acordes a la propuesta fuerte de la noche. El pogo se desataba de cuando en cuando y varios personajes ya sin camisa, izaban su piel tatuada en señal de poder. Crestas, pelo largo, rapados, cortes estrafalarios y ropa desmembrada en las mujeres, todos, prendidos en las melodías que abrirían pronto la puerta a los mentores de esta historia. Un poco desconcertante la hora anunciada para el show, pero claro en el lugar acostumbrado a otro tipo de gestas, se podía salir del 20 y entrar fácilmente al 21 de Mayo. Media hora antes de recibir el nuevo día y ante el retoque una y otra vez en tarima, cuya ubicación era cubierta desde cualquier ángulo del recinto, por fin se veía desfilar rumbo al escenario a dos «extraños», un reconocido y a un legendario sobreviviente del punk, quien saludo tímidamente y luego se acomodo frente a su vieja amiga. Quisieron arrancar de una, pero un problemilla técnico lo impidió, ahora sí, el salto de Michael y el one two, three four, en voz de su bajista. Rockaway Beach permeo el recinto hasta ese momento y por su aspecto, saturado de melodías, bailables y populares, lujuria ahora de la mano del Punk Rock. Casi imperceptibles se hicieron las canciones, a no ser por el conteo que hizo tan popular Dee Dee, con energía incesante ya se habían disparado casi 6 o 7 de ellas, pasando por Psycho Theraphy, IDon´t Care, Sheena Is A Punk Rocker. No había tiempo para entremeses, el velocímetro apuntaba más lejos, y la gente danzaba alrededor de todo el escenario, mientras en los balcones se gritaba con más fuerza, intentando sacudir el cuerpo con la voz. Michael Graves incitaba con sus saltos a no parar, el bajista al coro y desplegando sus piernas en un marco amplio, ajustaba su toque. La guitarra no sonó mal pero lo pudo hacer mejor, por un breve espacio uno de los canales lo evidenció. Sin embargo guitarrista era lo que había, con la actitud de un viejo zorro se echo a cuestas el sonido de las cuerdas, rellenando espacios era pura potencia al rasgar. Escondido por la posición, juiciosamente el amo del punk americano, aplicaba sabiduría al tambor, imponiendo la marca registrada a través del sonido inventor de sus cuatro amigos perecidos, no los abandona, golpe a golpe los revive. Pie constante en el acelerador y el viento no quemaba, lo hacia el calor al andar sobre la cresta de Beat On The Brat, Judy is A Punk, o I Wanna Be Sedated, de las más incendiarias. Primer acto, ráfaga de tan solo 53 minutos, impactó sobre los cuerpos de un «teatro» por poco colmado en su totalidad.
La vuelta trajo un nuevo aliento, y justicia para todos, las luces de nuevo empezaron a saltar al ritmo de I Just Want To Have Something To Do, Cretin Hope y R.A.M.O.N.E.S.,parecían no quedar restos, pero todo estaba fríamente calculado. La guitarra acústica que reposaba sobre tarima desde el inicio del show, suponía otra ambiente, cuando Michael se la calzo, los gritos de las mujeres fueron premonitorios. Con sus amigos ya en camerino, solitario, palpo las cuerdas y mostro otra faceta igual de conmovedora a la cruda, durmió los sentidos briosos y despertó a los ángeles melancólicos con Descending Angel, pero la más sentida sin duda Saturday Night. Si existían sospechas acerca del canto de uno de los personajes importantes dentro de la historia de los Misfits y del punk mismo, aquí quedaban despejadas. Vuelven los tres y hubo tiempo para un par de covers (Misfits, Creedence), incluso para poner a juicio la primera canción como banda, When We were Angels. Entonces sonó el riff y el ritmo de batería más esperado…luego al unísono Hey ho, Let´s go, Hey ho, Let´s go… Blitzkrieg Bop última locura de la noche, desató varias emociones atragantadas, dejando en claro hasta donde ha transcendido una cultura de la nada pero de brillo propio.
El reloj estaba titilando al borde de la 1:00 am, la despedida fue corta pero las miradas intensas, esa espera superaba cualquier expectativa horas antes, días antes, cuando dispuesto Marky Ramone atendió a los medios y luego a los fans, hecho que ya de por sí daba crédito a su sencillez. Y Ahora, en carne viva, emanaba su esencia, inyectando perfectamente en los tres jóvenes acompañantes, una filosofía que ellos mismos han tomado como propia, respetando pero aportando ímpetu, fogosidad. Michael también se roba la atención otro experimentado sabe como gruñir pero también como descender, carismático toca al fan en medio del acto, hace parte del rito sentir a los suyos. Fue así como el espíritu de Joey, Johnny y Dee Dee se hizo presente, en un país poco condescendiente, ver este espectáculo hace comprender cosas hasta hoy ignoradas, no me imagino la vibración por aquel entonces donde los cuatro Ramones hacían de las suyas, y cuando apenas vivimos un trozo no menos importante, bien acoplado, pero no igual. Esa imagen, destructiva y moribunda, otorgada al Punk, se ve ridícula al lado de Marky Ramone, un hombre de figura escuálida, tímido, pero sincero y leal al momento de hablar, de tocar sus tambores, al momento de contar que su arte continua vivo.
Asía hoy en Bogotá
La semana pasada el blog se centro en un post especial relacionado con esta banda. Anoche el maestro Andrés Durán en su programa Detector, emitió una entrevista con Geoff Downes, teclista de la agrupación. Gentilmente me concedió el audio que subo al post para quienes no tuvieron la oportunidad de escucharla y deseen disfrutarla. Entre otras cosas Geoff cuenta lo que vienen tocando en su gira (no repiten setlist) y sobre su nuevo disco.
Se oficializan tres evento más…
Grave Digger anunciado la semana pasada, se confirma también para sábado 30 de Julio, igualmente en el Metro y en los mismos puntos de venta, a partir de mañana.
Mr. Big después de cuadrar calendario reafirma su gira por este continente y a propósito, Bogotá será la encargada de abrirla el próximo 30 de Junio. El combo gigante viene con su alineación original, de paso veremos al señor Gilbert de nuevo. Entradas ya disponibles.
Como sabemos Aerosmith vuelve a Colombia el 3 de Noviembre, desde el viernes a partir de las 4 pm empieza la venta de boletería, por etapas y en abonos del 30% hasta 16 de Septiembre.
Judas Priest y WhitheSnake es otro show que promete, la vuelta de Halford y su combo esta vez como despedida, es un evento que genera bastantes expectativas, gracias en parte a la primera visita del grupo. El plus la primera incursión de Whitesnake, muchos fans los han esperado durante largo tiempo. Las entradas ya están disponibles aquí. y todos los datos por acá.
Ante la confusión de algunos datos del concierto de Immortal su página oficial ofrece en este enlace toda la información completa y correcta acerca del concierto que se realizará le próximo 11 octubre, pendientes.
Para cerrar reuerden que el show más cercano y no menos importante es el de As i Lay Dying, la banda vuelve por estas tierras a ratificar su potencia metalera y su último disco. También los acompañaran los señores de Heaven Shall Burn, ellos lanzaron hace un año exacto su álbum Invictus. todos los datos del concierto en este sitio . Esperen post especial…
A propósito de bateristas nuevo entrada en Retina Al Aire
Permanezcan Rockosos
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