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Me da tristeza como colombiano que Juan Manuel Santos sea Nobel de Paz, escuchando al Ñoño Elías con esas declaraciones que ya eran Vox Populi, un secreto a voces, no puedo evitar que la indignación fluya por mis venas.

El exsenador Bernardo ‘Ñoño’ Elías, condenado por irregularidades con la multinacional brasilera Odebrecht,  reveló, en calidad de testigo en el juicio que se adelanta en contra del exdirector de la Agencia Nacional de Infraestructura, Luis Fernando Andrade, conversación con Eleuberto Martorelli, uno de los principales miembros de la junta directiva de la concesionaria:

¨Yo le dije: Martorelli, si tú te das cuenta acabamos de perder la primera vuelta presidencial con el señor Óscar Iván Zuluaga, la segunda vuelta viene ahorita y no sé si vayamos a ganar. Si el señor Óscar Iván Zuluaga llega a ganar y Santos a perder, quitan al señor Andrade y a la ministra, y yo no tendré posibilidad de ayudarte a terminar el Otrosí en lo poco que yo pueda”.

¨Él contestó: No te preocupes amigo, que ya yo tuve una reunión con el mismo presidente Santos acá, la empresa tuvo una reunión con él, tuvo una reunión con los jefes de campaña y con el mismo Roberto Prieto y vamos ayudar a reforzar para que no perdamos la segunda vuelta. Ahí es donde entendí que, desde la ministra pasando por la campaña presidencial, el doctor Andrade estaba ayudando a sacar ese otrosí a cambio de eso. Y el gobierno en cabeza del presidente se encargaba de ayudarles a terminar de sacar el otrosí con el Confis y el Conpes”.

Escándalo Odebrecht - foto El Tiempo

Escándalo Odebrecht – foto El Tiempo

Todo en el expresidente Santos, ha sido deprimente, un dizque ‘proceso de paz’ que le concedió la impunidad a los asesinos de lesa humanidad, un Nobel de Paz muy criticado y cuestionado por ser Noruega un país garante en el proceso de paz¨, un NO del plebiscito que desconoció y como se dice popularmente ¨se lo pasó por la faja¨ y según el testimonio del Ñoño Elías, compró la reelección al parecer con dineros de Odebrecht.

En Colombia no pasará nada porque la Comisión de Absoluciones, la Corte, la Justicia Ordinaria, lo que sea, no lo va a condenar, pero a nivel internacional si queda, como decía el exjugador de la Selección Colombia, el ‘Totono’ Grisales, ¨un sin sabor amargo¨.

Es increíble como Juan Manuel Santos hizo lo que quiso, se salió con la suya en todo, traicionó a Uribe, se burló de sus electores, desconoció el mandato de la voluntad popular, la del pueblo, le hizo el quite a la justicia, logró el Nobel de Paz, su mayor obsesión, y se pavonea por el mundo como conferencista, erudito, escritor, expresidente y millonario.

No recuerdo en la historia reciente de Colombia un presidente tan malo, ‘enjalmó’ a los colombianos durante todo su mandato, muchos medios de comunicación estuvieron a su servicio y ahora se rasgan las vestiduras.

Logró, con la ayuda de sus aliados, luego de perder en primera vuelta con Óscar Iván Zuluaga, desprestigiarlo con la famosa historia del Hacker, es sin duda un Tahúr, para no decirle Ajedrecista porque eso sería ofender a quienes practican ese hermoso deporte.

Ahora bien, las amenazas que denuncia en contra de su vida el Ñoño Elías son preocupantes, según él lo quieren callar a toda costa.

¿Por qué los medios no le dan la importancia que merecen esas denuncias?, ¿por qué la justicia no investiga a fondo al expresidente Santos?, ¿por qué no lo cita a declarar?. No puede ser que algo tan grave pase desapercibido.

A nivel internacional ya hay indignación porque un expresidente, un dizque Nobel de la Paz, esté cuestionado por que su campaña supuestamente recibió aportes de Odebrecht. En otros países hay presidentes en la cárcel por eso, y por menos, y acá no pasa nada.

Qué vergüenza que muchos medios de comunicación se presten para tapar este escándalo, que sean cómplices por omisión, cuando Santos gobernaba muchos periodistas se le arrodillaron y le acolitaron todo, hoy, muchos de ellos, siguen en el ‘tapen tapen’ y otros se le ‘voltiaron’, para parecer independientes.

El consuelo que nos queda a los colombianos es que en las redes sociales si se replica el escándalo, cada día aparecen nuevas cosas que comprometen más al expresidente Santos y el pueblo se informa por otros medios y no traga entero.

Juan Manuel Santos no pierde su sonrisa, sabe que judicialmente nada va a pasar porque pertenece al club de los intocables, pero ante la mayoría de los colombianos su imagen está por el suelo.

Expresidente Santos, ¡devuelva ese Nobel!

Giovanni Agudelo Mancera

Periodista

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