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El debate migratorio en los Estados Unidos se ha convertido en uno de los asuntos pendientes más críticos en esta nación. La facilidad con la que las leyes migratorias se violan en esta nación es sorprendente, especialmente en un país famoso por hacer respetar el imperio de la ley. Adicionalmente, La amenaza terrorista le ha dado nueva importancia, aunque este hecho que obsesiona a los americanos y su gobierno no ha logrado que la reforma migratoria siga siendo un tema de nunca acabar. Millones de inmigrantes, en su gran mayoría Latinoamericanos, y en su gran mayoría Mexicanos y centroamericanos, deambulan por las calles de esta nación, indocumentados y escondidos bajo la sombra de un “mercado negro” de empleos y servicios que los Americanos o residentes legales no hacen o no quieren hacer, y que esta nación necesita para continuar funcionando.
La realidad es que la inmigración en este país es un problema. No solo un problema para los americanos, sino un problema para los inmigrantes mismos. Los Latinoamericanos se han convertido en la minoría mas grande de los Estados Unidos, pero su condición de ilegalidad hace que su influencia en el rumbo de esta nación sea poca o ninguna. Registrarse para votar, para acceder a servicios sociales, educación y mejores empleos es impensable, debido al miedo de la deportación. La ambigüedad y casi anarquía con la que las leyes migratorias se aplican hace que buscar el camino de la legalidad para quedarse en el país se considera una locura!
Esta situación esta privando a la comunidad latinoamericana de aprovechar su numero para tener influencia y poder de decisión donde cuenta, en la política. Si bien es cierto que los americanos han aprendido a convivir con el hecho de que la población hispana crece aceleradamente, hay regiones y voces en la comunidad americana que quieren parar este proceso y evitar que la cultura, costumbres e idiosincrasia americanas desaparezcan poco a poco, reemplazadas por la cultura latina. La asimilación se ha convertido en el centro del debate sobre los que ya están aquí, y el control para que no entren mas, por lo menos de manera ilegal, el centro del debate sobre la política de control migratorio
Y es que los Latinos están metidos en un círculo vicioso que, si no hay reformas profundas en la migración, continuara indefinidamente. Dicho circulo es el siguiente: Los latinos llegan ilegalmente, la mayoría de ellos pobres y con bajos niveles educativos, a buscar oportunidades que no tienen un sus países. Debido a su situación migratoria y sus capacidades, los empleos que consiguen son mal pagos y normalmente sujetos a explotación por parte de sus empleadores. Esto hace que los sitios donde viven sean deprimidos, pobres y con pocas posibilidades de mejorar su situación. Los latinos no buscan acceso a la educación, que permitiría conseguir mejores empleos e ingresos, porque su situación de ilegalidad y bajos recursos no lo permite. El estado no invierte recursos en estas áreas porque sabe que el 80% de los que habitan en ellas no pagan impuestos. De esta forma al hispano ilegal no le queda mas remedio que seguir manteniendo su situación y los sectores donde viven siguen convirtiéndose en áreas deprimidas, inseguras y con poca inversión y mejoramiento. Es así el círculo continúa y la salida es realmente cada vez mas lejana.
Algunas analistas comparan la migración hispana a Estados Unidos con la Hindú o la China, normalmente educada y con mejor nivel económico, para justificar su argumento de que la idiosincrasia, cultura y atraso de Latinoamérica es la razón por la que los Latinos no logran mejores niveles sociales en América, pero dicha comparación no tiene sentido. Los Hindues y chinos que llegan a América no pueden pasar caminando, como lo hacen los mexicanos o centroamericanos, así que los que llegan ya pasaron por un proceso de selección hecho por las embajadas americanas en sus países. Es por eso que la mayoría de los que llegan son profesionales, o estudiantes universitarios que van a entrar a un nivel diferente de la sociedad americana. Otra historia seria si la India tuviera una frontera terrestre con América. El número de hindúes pobres, con poca educación e ilegales superaría con creces a los latinos.
Hay que reconocer que, sin embargo, otros aspectos culturales influyen en el hecho de que los hispanos tengan más dificultades en lograr un mejor nivel económico y por ende mayor influencia en la sociedad americana. Nuestra concepción cerrada de nuestra cultura y del mundo, nuestra visión tercermundista y parroquial de las cosas, nuestra desconfianza por el estado y el desinterés por participar mas activamente en la sociedad, entre otros aspectos, igualmente han hecho que las comunidades latinas logren menos y sean menos. Pero si la oportunidad de salir de ese circulo de pobreza, falta de educación y de mejores oportunidades se rompe, otra historia se empezaría a escribir. De hecho, las nuevas generaciones de padres latinos, nacidas en este país, se están educando, están participando más activamente en la sociedad y se están sintiendo más americanas, sin dejar atrás su cultura. Eso va a llevar la comunidad hispana de la próxima generación a una posición distinta a la que ahora tiene. La asimilación de la cultura Americana es fundamental para lograr una mejor posición. Eso no implica olvidar la nuestra, implica enriquecerla con lo que se puede aprender de la nación que le ha abierto las puertas a millones de hispanos a través de la historia y que hasta ahora, sea por convicción o por conveniencia, no ha decidido cerrarla. Lo importante es que para los que la puerta se abrió, debe crearse una política que permita su asimilación y su incorporación en la sociedad de una manera más vital, productiva y profunda. Ambos lados de la historia se beneficiarían tremendamente de un avance de esa naturaleza.

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