Ingresa o regístrate acá para seguir este blog.

Aunque los equipo no jueguen con el típico armador de antaño como era el Pibe Valderrama, todavía mantienen en su titular a un mago del balón.

Síguame en twitter: @avargasdeporte

El Pibe muestra su camiseta con el '10'. Foto: Getty Images

El Pibe muestra su camiseta con el ’10’. Foto: Getty Images

Para el Pibe Valderrama “Es carretilla que el volante 10 desapareció”. El máximo asistidor de la historia del fútbol no puede tener más razón. La convocatoria de Carlos Queiroz para los amistosos de la Selección Colombia de septiembre, en la que brillaron las ausencias de James Rodríguez y Juan Fernando Quintero por lesión, así como la de Edwin Cardona por rendimiento, explotó el tema. El armador, creador o mago puede venir en muchas versiones, pero la función del 10 es necesaria en todos los equipos.

Está claro que los volante 10 clásicos tipo Juan Román Riquelme, Pibe Valderrama o Andrea Pirlo, por dar una lista reciente, han desaparecido porque el fútbol hoy se mueve a un ritmo más rápido. La táctica, el físico, la técnica y la tecnología con la que los equipos preparan los partidos exigen estrategias de ataque que aprovechen los huecos rivales con agilidad. No necesariamente hemos llegado a una época en la que el fútbol de posesión sea imposible, pero este juego necesita un dinamismo que no se puede ejecutar con un 10 lento o de la vieja escuela.

Pero eso no significa que la función del volante 10 esté muerta. Le llamamos así al mago de las idea, al que manda un pase que nadie pensó, al que propone juego. Puede ser un extremo, un mediocampista e incluso un falso nueve, pero siempre debe haber en el equipo un jugador con la capacidad de poner el orden para armar el desorden. Lionel Messi, que empezó su carrera como extremo, ahora desempeña esa función en el Barcelona. James Rodríguez, el mediapunta que a veces se tira a una banda, tiene esas capacidades dignas del número que lleva en Colombia. Karim Benzema, un delantero centro, cumplió para muchos ese trabajo cuando compartió zaga con Cristiano Ronaldo y Gareth Bale. Los ejemplos son tan variados como las estrategias del deporte. Queda claro es que los equipo modernos siguen jugando con un mago en sus filas.

La Colombia de Carlos Queiroz no es la excepción. Esta polémica convocatoria tiene que verse en contexto. El armador del entrenador luso es James Rodríguez y tanto Cardona como Quintero pueden entrar en la dinámica sí están en forma para hacer el trabajo defensivo que exige Queiroz a sus mediocampistas. Para los amistosos de esta fecha FIFA, por la ausencia de estos tres, otro jugador deberá coger el bastón de mago. Rafael Borré tiene dotes para cumplir esa función, así como Roger Martínez, Mateus Uribe y Orlando Berrío. Siempre hay alguien con la varita mágica.

No es el número el que hace a los jugadores, es el jugador el que hace al número” dijo Carlos Queiroz en la rueda de prensa previa al amistoso contra Brasil. Él, como el Pibe Valderrama, sabe que la creatividad viene en muchos matices. Cuando vuelva, James será el referente que pone a jugar a la Selección Colombia del luso. Estos partidos sin él son una oportunidad de buscar variaciones cuando el futbolista del Real Madrid no pueda poner su creatividad.

 

Compartir post