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Llego la hora de la verdad para el álbum más esperado de los últimos años, los 4 jinetes “metálicos” regresan de un sueño profundo.

 

 

                                           

                                                     

Cuando mis oídos se abrieron

Corría el  año 89 y me mente andaba pegada a los Guns And Roses día y noche, mi banda favorita por ese entonces, Leonardo primo de una amiga vecina que solía quedarse en vacaciones lo estaba con Metallica, los dos defendíamos a nuestra manera el porqué  una era mejor que la otra. Nos intercambiamos música, tengo que reconocer que él tenía más que yo y que su conocimiento era más amplio, yo apenas comenzaba por esta ruta.  Lo que si tenía claro era que la agrupación Californiana ocupaba la segunda posición en mi gusto, y como no hacerlo, si  recibí precisamente del primo-vecino  en calidad de préstamo el disco….And Justice For All en su versión original de doble acetato, obviamente lo copie al popular casette, por aquella época era lo que solíamos hacer cuando alguien conseguía un disco nuevo, pues mis recursos no eran muchos y  a decir verdad no creo que mi padre hubiese “malgastado” el dinero que conseguía en la música de mi preferencia, además  poco entendía del “ruido” que yo ponía.   Pasaron los años, fui dejando a un lado a los Gunners, descubrí  cosas en Metallica más interesantes, entre ellas su obra maestra,  Master Of Puppets en mi opinion, Axl y sus secuaces decaían y su separación fue el punto que llevo a sacarlos de mi Top,  lo que si no puedo olvidar es por donde empezó mi historia en este cuento, ellos fueron los culpables de mis tendencias rockeras, y en especial mis amigos al prestarme sus discos, a todos les debo mucho, por eso estaría mal sacarlos completamente de mis afectos, GNR sigue en un lugar muy exclusivo.    Ya con James y Ulrich en lo más alto, navegue en el sonido del Álbum Negro, de este me gustaron solo algunas canciones, luego, sucedió lo que muchos conocemos, la banda entro en un etapa de crisis y en medio de muchos cambios sonoros y hasta de “pinta”, sus seguidores vimos sin luz, el final del túnel. Los adjetivos no se hicieron esperar, el mundo entero escucho la nueva propuesta y el rechazo junto a la frustración se sintió en un gran porcentaje de la gente, el reflejo de la situación luego de sus tres producciones posteriores, lo evidencio el documental Some Kind of Monster .

 

 

A la banda Thrashera  y a una de las más influyentes entre las agrupaciones actuales del metal, la guarde en el baúl de los recuerdos, cada paso en falso que han dado en estos últimos años, lo he vivido de un modo un poco indiferente, cosas más importantes han sucedido en el rock para quedarse anclado. Se de gente que los borro por completo de su ámbito musical, para ellos ya no existe el perdón, muchos se sintieron traicionados. Qué si los perdono por lo que hicieron? pienso que no se trata de perdonar, simplemente para mi estuvieron  sumidos en un letargo que le puede suceder a cualquier banda de este calibre, el hecho es no olvidar la sangre que nos hizo hervir en su momento la sonoridad de Metallica, son más las cosas buenas que nos transmitieron,  sucede a menudo en nuestro diario vivir el exaltar los errores de los aciertos, borrando todo lo bueno que se ha construido  (remítirse a la sección de  Jefes) .Obvio , es duro ver como se dice una cosa y con el paso del tiempo se contradice (“nunca haremos un video”, Napster), por eso el mayor pecado de la banda ha sido hablar de más, el no tener la claridad suficiente al momento de expresar sus emociones.

 

La Magnética concepción

Estuve casi al margen y escéptico con el nuevo álbum de Metallica,  los sencillos no me habían calado mucho, por eso no quise dar una opinión concreta en las entradas anteriores, apenas quise mencionarlo. La semana pasada tuve la oportunidad de escuchar completamente la producción no solo una si no varias veces, durante los días siguientes hasta hoy. La verdad no entendí porque  teniendo  temas con más fuerza y mejor estructurados tuvieron que lanzar las canciones con menos poder, si la idea era atrapar de nuevo al público no lo consiguieron en principio, leía algunos foros en donde la gente comentaba cosas como: “estos babosos no salieron con nada, siguen muertos…..” Pero al escuchar lo latidos del corazón (los mismos que sentimos durante estos meses ante la expectativa) de la intro en   That Was Just Your Life con la que  abren el álbum, fácilmente me dije, estos locos habían podido dejarlo como su primer lanzamiento o incluso  The End of the Line, de una manera u otra eran los precisos para comprender el regreso de un sonido a lo Metallica. Bueno, lo interesante es que nuevamente se libera a Hammet y su talento al mando de la guitarra, estuvo amarrado, o ¿atrapado?, la velocidad, los punteos agudos y los cambios de ritmo volvieron a ser sus compañeros de batalla,  la evidencia suficiente en All Nightmare Long,  entonces ¿porque limitar el don? y de paso sacrificar a nuestros oídos. Con el piano rompiendo el silencio The Unforgiven III se despliega como el tema más lento de todos y a decir verdad como en casi todas las sagas, me quedo mejor con esta versión:

 

Sin acercarse ni pretender ser uno de los mejores álbumes de la historia de Metallica, cosa que ellos mismos dijeron no buscar, James y sus compañeros de escena, vuelven a encarrilar el tren y dejan al seguidor con ese toque de retorno, con el abrigo del resurgimiento después de estar 12 años adormilados en algo que ellos sintieron como un cambio para bien (muy respetable, en parte entendible). Igualmente “el zorro” Rick Rubin una vez más se sale con la suya, al parecer todo lo que produce lo vuelve oro, precisamente encontré  un artículo sobre la agrupación realizado por Ben Ratliff para The New York Times, separata en español que circulo ayer con el diario  EL ESPECTADOR, la cual recontra-recomiendo consigan pues es excelente, en el se relata entre otras cosas, aspectos previos al concierto ofrecido por la banda en Bucarest, Rumania, además  conceptos sobre Death Magnetic en boca de sus autores y la influencia de R.Rubin, justamente esto dijo Lars acerca de él: “Rick nos inculcó un mantra en la mente que era ´no tengan miedo de su pasado. No tienen que copiarlo, pero no está mal que se inspiren en él”.

No puedo negar que volví a sacudir mi cabeza como en los viejos tiempos, de una u otra forma me sentí nuevamente parte de su ejército ´Metallico´, tanto que desempolve la “vieja” música de estos jinetes hace un par de semanas, para recibir de nuevo en gracia los anónimos sonidos que ya no lo serán a partir de este viernes, cuando los mayores adoradores tengan la palabra.   ¿Y ustedes que esperan del álbum?, ¿Ya lo escucharon? ¿Qué les pareció?

Permanezcan Rockosos

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