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¿Y a quién se quejan los vecinos cuando la basura, la inseguridad, el ruido y el desorden empiezan a aparecer en un barrio?
Es la pregunta que se hacen los residentes de la calle 53, arriba de la carrera Séptima, que desde hace varios meses han ido sufriendo el impacto de varios lunares que hoy caracterizan a la principal vía de acceso al sector de Chapinero Alto.
Primero fue el impacto inevitable e irreversible que llegó cuando las autoridades de tránsito la volvieron doble vía de la carrera Séptima hacia el oriente. A partir de ese momento, los niveles de ruido se intensificaron y el grado de riesgo para los peatones subió irremediablemente.
Si bien, la medida es una de las acciones de tránsito para mejorar la movilidad, y así lo entendieron y aceptaron los residentes, con la doble vía llegó al lugar el infaltable paradero nocturno de taxis. Todas las noches se parquean, de la carrera Séptima hacia arriba. Y claro, con ellos llegó la venta de tintos.
Antes de la llegada de los taxis, ya funcionaba sobre el andén norte una venta callejera de pizzas, que se instala todos los días a las 6 de la tarde. Y claro, como al frente se ubican los buses del Politécnico Gran Colombiano que parquean sobre la vía para recoger a los alumnos, también hay una venta ambulante de dulces, cigarrillos y minutos de celular.
Ojalá la Policía o los funcionarios de la alcaldía local se pasaran un jueves o viernes a las 6 de la tarde para que verificaran el caos en que se convierte la calle 53.
Pero ahí no paran los problemas. En el costado sur de la calle 53 sembraron dizque un jardín. Muy bonitas las flores y las matas, pero quedó tan estratégicamente ubicado, que se ha convertido en baño público y en botadero de basuras, y no son pocas las ocasiones en que en vez de un jardín parece un muladar.
A los vecinos lo que más les preocupa es la inseguridad en las horas de la noche, porque el jardín permite solo un paso peatonal que queda escondido de la vía y contra un muro, y deja a las personas a merced de la delincuencia en las horas de la noche.
A eso hay que sumarle la despreocupación –¿irresponsabilidad?- de algunos dueños y dueñas de mascotas que sacan a sus perros a pasear y dejan las gracias de los animales botadas sobre la zona verde de los andenes.
Si tienen mascota, perfecto. Si la quieren pasear, maravilloso. Pero que salgan con la palita y la bolsita en la mano –como hacen muchos dueños- para que vayan limpiando durante el recorrido y no le dejen el problema a los transeúntes.
Para rematar, una o dos veces a la semana, los andenes de la calle 53 amanecen llenos de basura, después del paso de los recicladores, que buscan en las bolsas que dejan sobre la calle algunos vecinos.
¿Tiene usted problemas parecidos en su barrio? Cuéntenos la historia al correo yolgom@eltiempo.com.co.
Lamentablemente estamos en una ciudad sin director, aca el “alcalde” sirve para poner a sus conocidos en puestos politicos, para robarse la lata y para cobrar el sueldo, ahh bueno para salir en la TV cuando el Ministro de Defensa le toca salir a defender a los ciudadanos, pero de resto el incompetente y autista alcalde es un muñeco tan porco racional que hasta los taxistas, transportadores y los de las empresas de aseo manejan a su antojo por unos pesitos.
Cuando volveremos a tener un alcalde de verdad?
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Samuel Moreno MULTIMILLONARIO, con especilizaciones en las mejores universidades de E. U., nos ha metido a los Bogotanos de bién en un grave problema; Resulta que Samuelito se disfrazó de proletario y con ese cuentico ganó la alcaldia mayor; Ahora Samuelito para sostener la caña vá a ser permisible con muchas conductas ciudadanas de las minorías aunque que molestan a las mayorías, por aquello dizque llamado Socialsmo pujante e igualitario, además el hombre sueña con ser presidente; Créalo ó no doña Yolgom, todo lo que le suene a contravensión ó mala conducta de cualquier perico de los palotes vá a tener que ver con la libre personalidad, además de que se puede “Reconvenir” al infractor sin tocarlo ni siquiera con el pétalo de una rosa, al fín y al cabo es un elector importante para la política socialista de Samuelito; En cuanto a las mascotas, los perritos son chéveres, reclamémosle al dueño pero respetemos a los animalitos.
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Sin duda Colombia es una Banana republic. No hay gobierno responsable. No existen leyes. No hay common sense. En pocos hanos, se parecera a la India, or a un pais Africano, or Haiti. Pero todacia se hoye, Colombia es un pais bellisimo. Digan la verdad. La justicia no existe alla. En el gobierno solo existe el interes personal y no del pais. No veo solucion, desgraciadamente. No pienso volver.
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Pero aquí no nos plantea ninguna solución. Hay que poner punto final a estas situaciones antes de que nos tomemos la ley en nuestras manos. Ojo vecinos cochinos que permiten que sus perros chandosos se orinen en el anden del vecino… mañana puede amanecer muerto su perro o quizas usted o… a lo mejor los dos. Después no se pregunten: ¿Ay por qué lo matarían si era tan buen muchacho…?
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