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¡Uno de los mejores aviadores de la naturaleza son las arañas, y estas no necesitan alas para volar!

Ilustración por Paola León

Las arañas usan un mecanismo llamado ballooning con el cual, a través de sus hilos de seda, pueden transportarse miles de kilómetros de un lugar a otro. Anteriormente se creía que estos arácnidos aprovechaban únicamente las corrientes de viento para flotar en el aire con sus globos de seda. Sin embargo, en el 2018 los investigadores Erica Morley y Daniel Robert, de la Universidad de Bristol, descubrieron que el vuelo arácnido también se daba por el uso de la electricidad.

Ilustración por Paola León

Para comprender cómo funciona este mecanismo es fundamental tener en cuenta que bajo cualquier condición atmosférica y climática siempre hay un campo eléctrico alrededor de nosotros. En este campo, la atmósfera porta una carga eléctrica positiva, mientras que la superficie terrestre porta una carga eléctrica negativa.

De esta manera, la fuerza y la atracción de cargas les permite a las arañas vencer la gravedad para realizar sus vuelos, como se explica a continuación:

Ilustración por Paola León

  • 01. Las arañas escogen lugares altos y puntiagudos, como lo son las copas de los árboles, para realizar el ballooning. Esto se debe a que en estas zonas se da una mayor fuerza y concentración de los campos eléctricos, bajo un fenómeno llamado el Efecto de Descarga Corona. Así, una vez este animal ubica el lugar propicio de despegue, inicia su ritual de vuelo y como primer paso ancla su cuerpo a la superficie terrestre con un hilo de seda.

Ilustración por Paola León

  • 02. Una vez realizado el anclaje de su cuerpo, levanta sus dos patas frontales y, por medio de unos pelos sensoriales (tricobothria), mide las condiciones eléctricas atmosféricas.

Ilustración por Paola León

  • 03. Verificadas las condiciones atmosféricas, la araña se pone en puntas de pie, levanta el abdomen y lanza sus hilos de seda al aire con una carga eléctrica negativa. Cuando estos hilos son atraídos por las cargas eléctricas positivas de la atmósfera, la araña corta el hilo de anclaje e inicia su vuelo. En el aire utiliza sus patas para generar balance y regular su velocidad. De este modo, la electricidad le permite permanecer suspendida en el aire mientras que las corrientes de viento le dan dirección a su vuelo.

PD: Las investigaciones realizadas para este blog me han llevado a encontrar en los sistemas de navegación una dimensión muy nutrida y tecnológica de la comunicación. La naturaleza, y en particular la interacción de los insectos con los campos electromagnéticos de la Tierra, son un punto de estudio muy interesante para comprender nuevas formas de comunicación y conexión que están al alcance de los humanos.

Referencia:

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