Cerrar Menú Blogs
Las opiniones de los blogueros son de su estricta responsabilidad y no representan la opinión de este portal.
Profile image

Ingresa o regístrate acá para seguir este blog.

Seguir este blog

Entrar en una cafetería y pedir un café no debería ser algo complejo. Pero por varias razones en España han conseguido que algo tan simple tenga un número absurdo de variantes que podrían volver loco al más paciente de los camareros.

Hasta donde yo recuerdo, en una cafetería normal de cualquier ciudad colombiana uno entra, pide un tinto o un café con leche y ya está. Aprender que la palabra tinto en España se refiere al vino y no al café es una cosa básica, que tampoco representa un gran problema. Lo que sí es un problema es especificar cada variante posible en ese café que te van a servir a la hora de pedirlo. Algo que roza la neurosis.

Supongamos que en un restaurante, tras el postre, un grupo de cinco personas quiere pedir cafés. Y se acerca el mesero que los atiende, con la mirada de resignación de quien ha pasado cientos de miles de veces por lo mismo y escucha cómo quieren sus majestades la divina bebida.

 

Porque el café puede ser corto o largo, con azúcar o con sacarina, con cafeína o descafeinado, con leche o sin leche, de máquina o instantáneo, en taza o en vaso. Si lleva leche, la leche puede ser fría, caliente o templada, con nada o desnatada. Y si es verano, el cliente puede querer el café con hielos.

Estamos hablando de un nivel exponencial de variantes que ni siquiera incluye opciones más elaboradas. No hay nata, ni chocolate, ni whisky, ni leche condensada. No es un carajillo ni un capuchino, ni un mocachino ni un frappé. Sigue siendo un simple café.

Aún así, el camarero de esta mesa ficticia apunta un café corto con leche desnatada fría, un café largo con hielo en vaso, un café corto descafeinado sin leche y con sacarina, un café largo con leche templada y dos de azúcar. El último del grupo pide un té rojo con una rodaja de limón y un poco de leche. Sólo por joder.

o-coffee-tea-taste-facebook

Lo peor es que tanta complicación es para beber un café que suele saber a agua filtrada en el calcetín sucio de un recolector de Uganda. Pocas cosas hay más lejanas del sabor aromático y sabroso del café de Rodrigombia Colombia. Curiosamente, tan mal gusto no es sino una consecuencia más de la absurda, dañina y estúpida guerra civil y de la (mismos calificativos) dictadura franquista.

Porque durante muchos años de escasez causados por décadas de mal gobierno y guerras en el siglo pasado, los españoles se acostumbraron a tomar sucedáneos de un café que no se conseguía o era carísimo. Durante y después de la guerra civil, en vez de café se tomaba achicoria, o se secaban y tostaban semillas de malta, de soja, de maíz, de bellota o de lo que fuera.

Cuando las cosas se calmaron un poco después de que Franco fusilara, enterrara o encarcelara a sus adversarios, el comercio del café se convirtió en un monopolio del Estado, que se encargaba de fijar las cantidades que se importaban, los precios de compraventa y los distribuidores. Era una industria mediocre y estancada que no garantizaba la calidad de un café que de entrada era bastante inferior, porque se compraba la variedad robusta que es de sabor más fuerte y ácido que nuestra arábica colombiana.

Tras años y años de beber mal café, los paladares de toda una sociedad han quedado irremediablemente atrofiados. La cosa ha empeorado con la entrada en España de Starbucks, hace poco tiempo. Lentamente han ido expandiéndose por las principales ciudades, con todo éxito, vendiendo mil variedades de una bebida que es al café lo que Lady Gaga a la música: un montón de marketing, añadidos y adornos que ocultan un producto caro y malo.

En España se sigue comprando el café mediocre de Uganda o Vietnam, se sigue bebiendo una mezcla de mala tostadura (el café torrefacto), y se sigue comprando poco café colombiano. Mi esperanza de que esto cambie con las nuevas generaciones quedó frustrada hace unos años, cuando traje de regalo a un amigo madrileño una bolsa de café excelso, que todavía tenía el olor de las montañas donde fue cultivado. Semanas después de me confesó que a su familia le había parecido un café simplón y sin sabor, y que lo había mezclado en una jarra con el café que compraba en el supermercado.

Dejé de hablarle por un tiempo y nunca más volví a tomar café con él.


Suscríbete al blog
De cañas por Madrid

 


Sígueme en Twitter
camiloenmadrid

Entradas anteriores

 

 

(Visited 302 times, 1 visits today)

Etiquetas

PERFIL
Profile image

Madrid es mi ciudad adoptiva, sitio de todos y de nadie, capital del Reino, moderna y tradicional, canalla y noble, llena de maravillosas historias, lugares y personas sobre las que me gusta escribir. camiloenmadrid@gmail.com

Más posts de este Blog

Ver más

Lo más leído en Blogs

1

Reconocimiento a un melómano que acaba de fallecer y que cultivó la melomanía en miles de clientes. Además. reflexiones en torno a un concierto bastante raro, el de Carlos Santana y la Fania. 

 

santana1.jpg
 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En la noche de ayer, domingo, falleció de un infarto Saúl Álvarez, el fundador de la tienda La Musiteca, ubicada en el paseo comercial de la calle 19 con carrera 8, en Bogotá. Ese local fue el precursor de toda la ola de vendedores de música de la zona. Su negocio estuvo ubicado primero en una de las casetas metálicas que quedaban sobre la calle 19.

 

saul1.jpg

Recuerdo que cuando yo era niño, iba casi todos los domingos al mercado de las pulgas que en ese entonces era por la carrera tercera. Y si estaban abiertas las casetas de discos, era el momento de bajar y mirar esas rarezas que a uno de niño lo dejan marcado para siempre.

 

La última vez que estuve, hace no más de dos meses, le compré el disco de Hercules & Love Affair, y el Dig Lazarus Dig!!! de Nick Cave. De paso le eché ojo a la hermosa caja que tenía de los Talking Heads, prometiéndome que un día de estos volvía a la tienda a comprarla... Qué impresión tan tenaz saber que si vuelvo, Saúl ya no va a estar ahí.

 

Hoy me enteré del deceso a través de José Plata, locutor de Radiónica, y luego lo confirmó por Facebook otro coleccionista, Mario Jursich. En su proyecto Musicpimp, Alejandro Marín también recuerda los últimos discos que le compró... ¿Cuáles le compraron ustedes?

 

Vive.in publicó en alguna ocasión una corta reseña de Musiteca, dentro de su guía de lugares interesantes de Bogotá. Allí aparece la imagen de Saúl, sosteniendo una de sus joyas de colección.

 

La pérdida de Saúl Álvarez es un golpe certero en la cultura del melómano que creció haciéndole encargos a este rebuscador consumado. Era demasiado raro que no pudiera conseguir algún encargo caprichoso de esos que a uno se le venían repentimanente a la cabeza.

 

Para quienes estén interesados en acompañarlo en la velación, supe que será a partir de esta tarde en la Funeraria Gaviria de la 13 con 42.

 

Paz en su tumba. Sea momento para despedirlo con una buena canción: 'Phoenix', de Wishbone Ash.

 

 

- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -

 

¿Qué pasó con la Fania?

 

El pasado concierto conjunto de la Fania All Stars y Carlos Santana estuvo lleno de matices que harán de la noche del jueves 12 de marzo de 2009 una experiencia inolvidable. Sobre todo porque, pese a que fue un gran concierto con más de cinco horas de música, fue también, extrañamente, una gala de confusos errores que dejaron deslucida a una de las agrupaciones más interesantes de la historia de la música popular latina.

 

Empecemos por el final. Empecemos por Carlos Santana... ¡Qué concierto! El tipo le dio gusto a todo el mundo. Para quienes disfrutamos de sus grandes clásicos, no se midió en gastos y tocó 'Oye cómo va', 'Samba pa ti', 'Evil Ways', 'Jingo' y una que me encanta y que no me imaginaba en el repertorio: 'No One To Depend On', que me la canté a grito herido... y en uno de sus "potpurríes", metió 'A Love Supreme', un fragmento de la pieza de jazz de John Coltrane que Santana tocó con John McLaughlin en el disco 'Love Devotion Surrender', en su etapa más experimental y espiritual al 100%... cosa rara, definitivamente. Supongo, específicamente por ese fragmento, que es un concierto diseñado para gustarle también a los fanáticos que extrañan a ese Santana salvaje.

 

 

Yo sentía que me había desconectado de la música del guitarrista mexicano desde hace mucho tiempo, porque no me he sentido nunca identificado con la onda que se produjo del álbum 'Supernatural' para acá. De hecho, su música de los noventa también me parecía muy aburrida. Yo soy seguidor del Santana que comenzó en el 'Live At Fillmore' en 1968 (antes de Woodstock) y que llega al 'Inner Secrets' de 1978; luego le reconozco su importancia por 'Blues for Salvador' (1987) y me encantó el 'Santana Brothers' (1994). Pero de resto, no me gustó nada mas.

 

Y coincido con algunas teorías que dicen que Santana tenía un talento que se desarrolló hasta un punto máximo y ahí comenzó a repetir la fórmula, años tras año. Cuando ya parecía no tener más ideas nuevas, y ya invadido por una espiritualidad acaramelada que alteró su visión musical con una mística de la paz y el amor al extremo, salió con los duetos al estilo 'Supernatural', a promocionar nuevos talentos como la carrera en solitario de Rob Thomas, etc etc etc.

 

Pues bien, quienes nos creemos tan críticos con Santana desfallecimos en el concierto del pasado jueves. Si bien, el guitarrista tiene una sola fórmula para hacer todo lo que hace, lo hace de manera genial. Vale que se repita, vale que se desvíe, vale que no tenga ideas muy novedosas... las que ya tuvo hacen historia.

 

Y ahora trajo consigo a una banda interesante, con dos cantantes de perfiles interesantes, con los que grabó recientemente el álbum 'Multidimensional Warrior', reinterpretando todos sus éxitos. Un espectáculo muy sólido.

 

ismaelmiranda.jpg
Tan sólido, que aún hasta hoy me pregunto por qué los organizadores pensaron que podían integrar los dos espectáculos, el de Santana con el de la Fania... ¡Son completamente diferentes! Y si Santana traía una planificación, es respetable porque tenía ganas de tocar durante tres horas (y por eso llegó a las 12 de la noche tocando). La última vez que estuvo en Colombia, fue espectacular pero fue tratado casi como un artista de apertura frente a Soda Stereo. Esta vez quería vengarse y por eso jugó con el público a "¿Se quieren ir a dormir ya?"...

 

En la foto de la derecha, Ismael Miranda.

 

Si el mánager de Santana fue el que ordenó que sacaran a la Fania del escenario alrededor de las 9:05 p.m., eso sí está muy mal. Especialmente porque la anterior fue posiblemente la última oportunidad de ver a todo este combo de estrellas reunido. Será seguramente el último concierto de Ismael Quintana en Colombia. Y además junto a Cheo Feliciano y Johnny Pacheco, quienes tampoco pueden esconder el peso de los años, y Adalberto Santiago, Ismael 'niño bonito' Miranda y Andy Montañez.

 

Pretendían quienes juntaron a todos estos artistas que se iba a resolver una diferencia histórica en Bogotá, como homenaje al fallecido Ralph Mercado. Creían que Santana se iba a unir a la Fania, posiblemente a tocar 'El ratón' o 'Oye cómo va' en homenaje al hombre que precisamente intentó comprar a Carlos Santana hace más de 30 años, cuando le ofreció un cheque en blanco firmado, como comprando su voluntad. Fue en ese entonces que, como Santana rechazó la jugosa oferta, entonces su hermano Jorge Santana, el 'malo' (por el nombre de su banda, porque es buenísimo guitarrista) aceptó la propuesta y surgió la grabación de 'El ratón' que veíamos en el post de ayer.

 

A las 9:00 p.m. fue el turno de Richie Ray y Bobby Cruz tocando con la Fania. Salieron a tocar el 'Jala jala'. Papo Lucca le dio paso a Richie en los teclados para llegar al sonido bestial. Pero por sonido bestial, todos entendíamos otra cosa: Cada viento iba por su lado, los trombones nunca se entendieron. La voz de Bobby fue sepultada por una interferencia, piano y vientos iban a ritmos distintos, como si no tuvieran retornos. Aldredo de la Fe miraba a sus compañeros descompuesto, como si pudiera arreglar algo en el camino pedregoso hasta la primera nota. Impresionante. Recuerdo a un amigo melómano agarrándose la cabeza, sin entender por qué sonaba todo tan mal. Ninguno de nosotros entendió.

 

delafeylucca.jpg

 

 

 

 

 

Papo Lucca, Bobby Valentín y Alfredo de la Fe, desconcertados durante el concierto de la Fania.

 

Lo que pasó con la Fania fue vergonzoso. Y fue una culpa compartida, entre quienes forzaron el show y los mismos protagonistas, el grupo: una demorada salida al escenario en la que ni los presentadores del show sabían qué era lo que estaba pasando; partituras extraviadas y instrumentos desencajados, cantantes que aparecieron con la ropa con la que estaban ensayando porque nunca les llegaron los vestidos. Roberto Roena haciendo muecas de que le llevaran algo que nadie entendía bien qué era. Canciones que comenzaban y a los 20 segundos debían detener, porque iban en un tono diferente. En fin, un completo desorden.

 

Si bien cada miembro de la Fania merece todo el respeto que se han ganado a través de la historia, era importante que un concierto de este envergadura estuviera muy bien preparado. Para muchos colombianos, fue el concierto de despedida, y esa no era la imagen adecuada para cerrar.

 

Ojalá vuelvan todos juntos para un concierto exclusivo para ellos. Ojalá que así sea. 

 

Suerte y pulso.

 

 

2

Hace  poco se intentó, por enésima  vez, prohibir el consumo  de(...)

3

[caption id="attachment_41" align="aligncenter" width="1242"] Captura de pantalla de YouTube[/caption] La criminalidad(...)

3 Comentarios
Ingresa aquí para que puedas comentar este post
  1. El cierre de un Café centenario | De cañas por Madrid

    […] en los que los versos de escritores reconocidos hablaban de las bondades del café servido allí; en este local también se cumplía la máxima que acompaña la mayor parte del territorio español: …. Otra cosa es que estuvieran aprovechando la fama de un siglo para venderlo además al triple de lo […]

  2. Claro que allá si hay café con nata y leche condensada, atrévete un día a pedir un “Café Bom Bom”. A mi es que personalmente no me gusta le café ni su olor. Lo que si extrañe es que en ningún lugar hay la opción para los que no consumimos lácteos de tomar té o para los que les gusta el café con leche de Soya. EL café colombiano claro que si se consigue en tiendas ecológicas y de comercio justo. Tampoco te sorprendas cuando el hostelero te devuelva el cambio de tu compra y tire el plato con las monedas sobre el mostrador de manera contundente, no es nada despectivo ni agresivo.

  3. juanchis323

    Para complementa un poco su excelente narración de lo que sucede en españa con nuestro excelente café.Nada muy distinto sucede en los demás países de europa.Por qué vender un café como el nuestro no es un buén negocio;el mejor negocio lo tienen las mafias de los tostadores,que importan nuestro café en verde baratísimo lo mezclan con otros cafés de peor calidad(disque,para darle cuerpo, o acidéz, o sabor,o no sé cuántas otras mentiras más).Cuando en realidad es para ganarse todo el dinero que no se ganan ni los productores,ní la federación juntas.razón por la cuál la ecuación de productores-tostadores-consumidores.no cambia nunca,por que las variables las mantienen fijas con sus cuentos chimbos.

Reglamento de comentarios

ETCE no se responsabiliza por el uso y tratamiento que los usuarios le den a la información publicada en este espacio de recomendaciones, pero aclara que busca ser la sombrilla de un espacio donde el equilibrio y la tolerancia sean el eje. En ese camino, disponemos de total libertad para eliminar los contenidos que:

  1. Promuevan mensajes tipo spam.
  2. El odio ante una persona o comunidad por su condición social, racial, sexual, religiosa o de situación de discapacidad.
  3. Muestren o impulsen comportamientos o lenguajes sexualmente explícitos, violentos o dañinos.
  4. Vulneren o atenten contra los derechos de los menores de edad.

Además, tenga en cuenta que:

  • - El usuario registrado solo podrá hacer un voto y veto por comentario.
Aceptar
¿Encontraste un error?

Para EL TIEMPO las observaciones sobre su contenido son importantes. Permítenos conocerlas para, si es el caso, tomar los correctivos necesarios, o darle trámite ante las instancias pertinentes dentro de EL TIEMPO Casa Editorial.


Debes escribir el comentario
¡Gracias! Tu comentario ha sido guardado
Tu calificación ha sido registrada
Tu participación ya fue registrada
Haz tu reporte
Cerrar
Debes escribir tu reporte
Tu reporte ha sido enviado con éxito
Debes ser usuario registrado para poder reportar este comentario. Cerrar