Cerrar Menú Blogs
Las opiniones de los blogueros son de su estricta responsabilidad y no representan la opinión de este portal.
Profile image

Ingresa o regístrate acá para seguir este blog.

Seguir este blog

Los impuestos han sido el tema central desde que se eligió el nuevo gobierno. Nada cambia en este aspecto. Llegar a poner impuestos ha sido la constante de todos los gobiernos y el cambio no es la excepción. La razón es que se quiere aprovechar la supuesta luna de miel del gobierno entrante, que los colombianos no se den cuenta qué tan capaces son de administrar, que no sepan cómo van a gobernar y antes que empiecen las quejas se les expida un cheque en blanco para que coloquen los impuestos que quieran, así no puedan demostrar para qué los requieren.

En esta ocasión ha sido incluso peor, ya que además de no decir para qué necesita semejante suma de recaudo, no quieren mostrar en qué se piensan gastar el presupuesto general de la nación. Es así como iniciando esta semana, el gobierno no asistió a la cita en que se iba a hablar del tema, como si temieran que al ver que hay dinero y de sobra, la reforma tributaria perdiera importancia o por lo menos la premura por la que el gobierno supuestamente mandó a hacer llamado de urgencia.

Todo queda en una nube gris: el presupuesto para 2023, el monto de la reforma tributaria y la misma necesidad de más impuestos en momentos que todos hablan de un gran crecimiento económico y un recaudo mayor al que se anticipaba desde la campaña. Lo raro es que todos tienen algo en contra de la Reforma Tributaria, pero ningún medio cuestiona ni la urgencia ni el monto.

Por otro lado, entrando al análisis de la reforma tributaria y sus puntos, se encuentra que va en contra de las tendencias y alarmas a nivel mundial que afectan o van a incidir en nuestra economía y de manera tozuda, al igual que el gobierno anterior, cero cambio, siguen en su camino a más impuestos, en contra de lo que se ve y comenta en lo países desarrollados al este y oeste de nuestra ubicación geopolítica.

Como los caballos de los coches de Cartagena, un par de anteojeras en la vista mirando la implementación de nuevos impuestos, sin la más mínima posibilidad de analizar ni pensar en otras posibilidades.

Mientras Europa se debate en la falta de autonomía energética con miras al próximo invierno, por haber sacrificado su independencia a los suministros del este, en Colombia que se tienen reservas y proyecciones de más, miembros del partido de gobierno proponen por un lado imponer más impuestos a las exportaciones de combustible y a su consumo, y otros llegan a pedir suspender exploración y depender del vecino cuando se acaben las reservas. Esta semana, en el colmo de la insensatez, pidieron que se empiece a importar gas, lo cual demandaría unos gastos enormes e ineludiblemente aumentaría exponencialmente los costos de los hogares colombianos, mientras no han podido bajar las tarifas de energía que quedaron en alza. Si no se puede pagar la energía, ¡como será subir el gas y el agua!

Siendo más especifico en la situación europea, que prácticamente ha sido el oráculo de los males que llegan a Colombia -ya que por ahí entró la pandemia viniendo de China y aquí en lugar de prepararse médica y estructuralmente, se dedicaron fue a alistar decretos de emergencia con impuestos-, igual ahora, por ahí está entrando ahora otra epidemia mundial: la inflación. El pequeño detalle es que el gobierno anterior se adelantó con sus medidas internas, pero contrario a lo que piensan muchos nuevos gobernantes, esa inflación que les dejaron no es el tope, PUEDE AUMENTAR. Es así como ya en este gobierno al mantener la tendencia sin cambiar nada subió a los dos dígitos, sin haber llegado la mundial, y en lugar de estar pensando cómo bajarla, piensan en dispararla con más impuestos.

Mientrasque en Londres están alarmados por que su inflación sobrepasó el 10%, aquí en Colombia la única solución que se ve de parte del ministro de hacienda es decir que el problema es mundial y no muestra una sola acción para bajar esa inflación. Le oculta al país que esa absurda #ReformaTributaria va a encarecer todo y que la va a aumentar. Mientras, traen la desgastada teoría de decrecimiento, cuyos principios nunca fueron pensados para un país subdesarrollado como el nuestro y no miran la tendencia hoy en Europa. La prolongación de la incetidumbre por una desmedida reforma tributaria ya está causando grandes problemas con la prolongación de la devaluación, con un dolar que de tanto mantenerlo en ese nivel, cada vez será mas difícil bajarlo de $4.000 otra vez.

El sueño de un ciudadano de cualquier país es tener un gobernante que haga anuncios como los de la nueva primer ministro del Reino Unido Liz Truss, quien pensando en sus gobernados llegó fijando como prioridad de su gestión bajar la inflación que pasó el 10 %, la misma de aquí. Pero a diferencia de la solución tropical, su esfuerzo va a estar en bajar impuestos para que las empresas produzcan más, den más empleo y haya ¡MAYOR CRECIMIENTO! Nunca en decrecer y menos en poner más impuestos que encarecen todo.

La obsesión por llegar a poner sus propios impuestos no los deja ver más allá del árbol de usar su poder a su manera, sin cambio con lo hecho por gobiernos anteriores. Se hacen los locos en el tema que más impuestos aumentan inexcusablemente la inflación y que si la unen a la mundial puede llegar a causar una explosión social.

Pero no es el único principio enunciado por Liz que nos llena de envidia, también el de la libertad, cada vez menos respetada por cada ley que sale de nuestro congreso y la responsabilidad del ciudadano, en momentos en que unos desquiciados embuidos en su poder perdieron todo límite, queriendo imponer a cada colombiano qué tiene que comer y qué tiene que beber, sin importar su gusto, su metabolismo, su necesidad, su capacidad… llevando la responsabilidad del individuo a su mínima expresión ¿Qué sigue después? ¿Vestirnos todos de gris o verde oliva? ¿Que nos digan cómo respirar, cómo caminar?

Como se puede ver en anteriores blogs sobre el tema de la inflación, se dijo y repitió que los incrementos constantes de las tarifas de energía en el anterior gobierno, no eran ni externas ni normales, que eran factor de incremento de la inflación, que tampoco era culpa de los demás.

En los cuatro años anteriores, la polarización ocultó la verdadera razón de estas alzas. Cambiaron a la ministra pero no corrigieron nada, quien se quejaba era de izquierda y los que aplaudían eran fieles derechistas con sólidos valores, pero el resultado fue que llegamos a las tarifas de hoy en que ya ningún estrato, en especial en la costa, las puede pagar. Aunque decir esto no es nada nuevo ¡sí hay la necesidad de mirar el bosque!

Una cosa es que se suban las tarifas de energía, que se aumente exponencialmente la inflación y que ya ni la clase media ni los “ricos” la puedan pagar y otra cosa es que esto suceda con el costo de alimentos y bebidas. Es que, si llega un momento en que los alimentos y bebidas no los puede pagar ya ni la clase media ni los ricos, hemos llegado a la venezuelización de este país. Se produciría el éxodo de ciudadanos y los que no se pueden ir se vuelven violentos, una protesta por no poder pagar la energía no es ni una pálida idea de una protesta por hambre crónica, en medio de una inseguridad inatajable.

No se puede seguir aumentando paulatinamente a los alimentos y bebidas con ninguna disculpa, ni que son grasos, ni dulces, ni salados, ni procesados, ni deshidratados, ni conservados, embotellados, enlatados, ni nada. NO se puede seguir gravando los alimentos y bebidas, ni nada que los afecte, como los plásticos de primer uso o el combustible para transportarlos. Si los impuestos son, supuestamente, para programas sociales, a los hambrientos, deshidratados, débiles que no tienen fuerza para recibir programas sociales y los muertos si que menos. Los alimentos y bebidas, los pobres y los ancianos deben ser intocables en una reforma tributaria, ya no se pueden gravar más, se atenta contra la seguridad alimentaria y la vida.

Con hambre no hay paz total

Viendo nuevamente el bosque, no viendo solo cada árbol, que los impuestos a alimentos, a la vejez, a la movilidad, a la energía, a X, Y y Z, entre más se tenga que echar mano a los más vulnerables y aún más, en contra de la legalidad, en contra de la constitución, es un indicio más que obvio que los colombianos ya no tienen de donde sacar para pagar más impuestos y entonces esa anteojera que están poniendo, para solo mirar una cantidad extremadamente exagerada, se tiene que quitar y permitir el análisis abierto y franco de cual es la cantidad que los colombianos si pueden pagar.

Si el resultado es que ya no pueden pagar más, hay que buscar otras herramientas, reducción burocrática, reducción de gastos, reducción de despilfarro, de lujos a quienes ostentan los sueldos más altos, etc. lo cual llevaría claramente a que esta Reforma Tributaria debe ser archivada. Se debe trabajar este 2023 con el abultado presupuesto nacional, muy por encima del que manejó el gobierno anterior, el más alto de la historia, sin agregar un solo impuesto. Y para el 2024, habiendo reorganizado y priorizado ese presupuesto, entrar a analizar si de verdad es necesaria.

Si además se avanza en el combate a la corrupción y en la disminución del gasto burocrático, se pueden estar administrando hasta 200 billones más en los cuatro años solo por estos conceptos, además del crecimiento normal de la economía en la tendencia que lleva, que de paso es uno de los grandes riesgos con esta Reforma Tributaria, que esos impuestos lleguen a parar esa tendencia y entren en el anunciado decrecimiento que lejos de beneficiarnos, viene con menos recaudo y nos metería en un tobogán enjabonado por el que es difícil caminar en sentido contrario a buscar nuevamente la economía que tenemos hoy.

(Visited 743 times, 1 visits today)
PERFIL
Profile image

Ingeniero Naval Electrónico, Master of Science en Planeamiento y Gerencia de Recursos Internacionales de una universidad en Estados Unidos y Magister en Relaciones Internacionales de la Universidad Javeriana de Bogotá, más de 15 años en cargos directivos en organización sin animo de lucro y 10 en la empresa privada, incluyendo emprendimiento en la creación de dos empresas de tecnología. Profesor, exDecano, ex Director de Educación a nivel nacional, Ex-Vicerector y Ex-Rector de Entidad de Educación Superior, Ex-Consejero del CSSFP, Consejero del Consejo de Veteranos

    Sigue a este bloguero en sus redes sociales:

Más posts de este Blog

Ver más

Lo más leído en Blogs

1

Cuando hablamos de mantenernos saludables, es altamente probable que el pensamiento(...)

2

Quizás eres como yo, de esos que siente que marchar es(...)

3

Uno de los invitados a la octava versión del concierto Las(...)

3 Comentarios
Ingresa aquí para que puedas comentar este post
Reglamento de comentarios

ETCE no se responsabiliza por el uso y tratamiento que los usuarios le den a la información publicada en este espacio de recomendaciones, pero aclara que busca ser la sombrilla de un espacio donde el equilibrio y la tolerancia sean el eje. En ese camino, disponemos de total libertad para eliminar los contenidos que:

  1. Promuevan mensajes tipo spam.
  2. El odio ante una persona o comunidad por su condición social, racial, sexual, religiosa o de situación de discapacidad.
  3. Muestren o impulsen comportamientos o lenguajes sexualmente explícitos, violentos o dañinos.
  4. Vulneren o atenten contra los derechos de los menores de edad.

Además, tenga en cuenta que:

  • - El usuario registrado solo podrá hacer un voto y veto por comentario.
Aceptar
¿Encontraste un error?

Para EL TIEMPO las observaciones sobre su contenido son importantes. Permítenos conocerlas para, si es el caso, tomar los correctivos necesarios, o darle trámite ante las instancias pertinentes dentro de EL TIEMPO Casa Editorial.


Debes escribir el comentario
¡Gracias! Tu comentario ha sido guardado
Tu calificación ha sido registrada
Tu participación ya fue registrada
Haz tu reporte
Cerrar
Debes escribir tu reporte
Tu reporte ha sido enviado con éxito
Debes ser usuario registrado para poder reportar este comentario. Cerrar